Dos cristianos de Sudán, libres tras amenaza de pena de muerte

Michael, de 49 años de edad, fue arrestado el pasado 14 de diciembre de 2014, mientras que Reith, de 36, fue detenido en enero de este año.

Desde sus respectivos arrestos, ambos han sufrido un trato vejatorio por parte de autoridades, y en el momento de ser detenidos ni siquiera existían cargos en su contra ni se les proporcionó acceso a un abogado o a sus familias.

El pastor Yat Michael envió un mensaje de apoyo a la iglesia cristiana North Khartoum tras apoderarse de la propiedad de esa iglesia fuerzas del gobierno, siendo esa la razón por la que autoridades de Sudán le acusaron de espionaje.

Peter Reith, por su parte, fue acusado y condenado por “romper la paz pública,” tras su arresto el pasado 11 de enero por enviar una carta a los líderes de la Iglesia Evangélica Presbiteriana, en la que pedía respuestas sobre el paradero de Michael, algo por lo que -junto con Michael- llevó a ser sospechoso de supuesto espionaje.

Finalmente, se enfrentaban al menos a seis cargos, entre ellos socavar el sistema constitucional (artículo 50); espionaje (artículo 53); promover el odio entre sectas (artículo 64); quebrantamiento de la paz pública (artículo 69); y los delitos relativos a las creencias religiosas insultantes (artículo 125).

De esos cargos, los artículos 50 y 53 exigen la pena de muerte o cadena perpetua en caso de un veredicto de culpabilidad.

Defensores de los acusados han dicho que durante las audiencias de sus casos, se les negó constantemente acceso a su equipo legal, a pesar de que la ley de Sudán reconoce tal derecho.

También la defensa ha dicho que los cargos no tenían validez, dada la falta de evidencias.

Tras ser liberados, el Centro Americano para la Ley y la Justicia (ACLJ, por sus siglas en inglés) publicó comentarios de los pastores en su sitio web.

“Nos liberaron hoy. Estamos felices. Habíamos escuchado que no quedaríamos en ,libertad. Pero alabado sea el Señor!” dijo Michael de acuerdo con el ACLJ.

Reith por su parte dijo que “estamos muy felices de estar libres gracias a sus oraciones. Gracias a todos ustedes por lo que han hecho por nosotros. Dios ha escuchado sus oraciones y somos libres.”

Debido a la persecución que cristianos sufren en Sudán, ese país ha sido designado como un “país de preocupacion particular” por el Departamento de Estado de Estados Unidos desde 1999.

También la organización Open Doors indica que Sudán es actualmente el sexto país del mundo donde se produce una mayor persecución de cristianos.