Ni Yulan, cristiana defensora de DDHH, sigue en prisión

El Gobierno chino ha anulado la libertad condicional médica a la activista por los derechos de la vivienda Ni Yulan, a pesar de que esta sufre serios problemas de salud, que incluyen un tumor en la tiroides que no ha sido tratado, denuncia su hija.

Ni, que es cristiana, está cumpliendo una condena de dos años y medio de duración por causar disturbios.

Ni comenzó a practicar la abogacía en 1986, trabajando en diversos casos, incluyendo entre ellos algunos que atañen a la libertad religiosa. A partir de 2001 se especializó en la defensa del derecho a la vivienda. El año siguiente fue torturada y golpeada por más de 50 horas tras ser detenida por la policía. Como resultado, quedó discapacitada y desde entonces no puede caminar sin la ayuda de muletas.

Tras ser liberada, Ni Yulan siguió defendiendo casos, lo que le llevó a ser detenida en varias ocasiones entre 2004 y 2008. El 14 de abril de 2010 se le quitó su casa, por lo que desde entonces vivía en una tienda de campaña junto a su marido cerca de la plaza Tiannanmen. Un año después ambos fueron detenidos y acusados formalmente de provocar disturbios.

En octubre de 2012 la familia de Ni y su abogado presentaron una solicitud de libertad condicional médica que las autoridades rechazaron en marzo de 2013. En una visita en junio de este año, su hija se dio cuenta de que su madre tiene un tumor de tiroides sin tratar detectado en 2012 que se había hinchado considerablemente.

En diciembre de 2011 Ni fue galardonado con el Premio Tulipán del Gobierno holandés para Defensores de los Derechos Humanos tras su nominación por Christian Solidarity Worldwide (CSW) y China Aid. Su hija, que tenía previsto asistir a la ceremonia en su nombre, fue detenida en el aeropuerto de camino a Amsterdam y no pudo asistir.

El presidente ejecutivo de CSW Mervyn Thomas ha expresado su preocupación por la negativa de China a conceder la libertad condicional médica a Ni Yulan. “Ni ha sido detenido por su defensa de los derechos fundamentales y que los cargos presentados contra ella son injustos. A la luz de su condición de deterioro, CSW pide al gobierno chino a concederle acceso a la atención médica adecuada. Además, instamos al gobierno a revisar su caso y sin más demora”.