Descubren nueva práctica homosexual de Ted Haggard, del mismo tiempo de la ya conocida

Ted Haggard, ex pastor de la iglesia New Life de Colorado Springs, y ex presidente de la Asociación Nacional de Evangélicos había vuelto a hablar con los medios de comunicación hace tan solo 3 semanas. Explicaba que había superado un largo “proceso por el desierto”, después de reconocer que las relaciones homosexuales regulares con un prostituto, en 2006.

Ahora, más de dos años después, ha saltado a los medios de comunicación una nueva acusación. Haggard habría tenido también relaciones sexuales con otro hombre, esta vez un voluntario de la iglesia, que entonces tenía 20 años de edad.

EL NUEVO PASTOR EXPLICA LA SITUACIÓN
El viernes, el actual pastor New Life, Boyd, explicó a la congregación que los líderes de la iglesia se habían enterado de un segunda alegación contra Haggard a finales del 2006, poco después de que el prostituto hiciera las suyas.

Boyd dijo que un "conjunto de pruebas irrefutables” sugería que había existido una "relación sexual inapropiada y de mutuo acuerdo” entre Haggard y el voluntario durante un extenso período de tiempo. Según Boyd, los términos de un acuerdo legal que la iglesia estableció con el voluntario en el 2007, ninguna de las partes discutiría el asunto en público.

PERSISTEN LAS “HERIDAS” EN LA IGLESIA
Según ha continuado explicando Boyd, sólo ha decidido hablar de esta nueva acusación contra Haggard después de que el acusador hubiera hablado con una televisión local. KRDO-TV dio a conocer hace unos días que el hombre que había mantenido relaciones con Haggard había entregado a la emisora una grabación de audio de sus conversaciones con Haggard. En ellas, Haggard califica la relación de "inapropiada” y pide perdón, han declarado desde el canal de televisión.

Después que el pastor actual de la iglesia haya explicado la nueva información a la congregación, no ha hecho comentarios a los medios de comunicación. El ambiente en la iglesia de Colorado Springs sigue siendo tenso, por el foco de atención continuo en el que se ha convertido en los últimos años.

En este sentido, el liderazgo actual de la iglesia se ha mostrado triste por “las heridas” que siguen sin poder cerrarse. Por ello, Boyd ha insistido en que se llegará a un “día en que tendremos un cicatriz”, que marcará el final del caso.