Obama aclara su fe cristiana evangélica como miembro de la Iglesia Unida de Cristo

Hasta ahora, Barack Obama ha lidiado con estos dañinos rumores invitando a la gente a venir a escuchar el estupendo coro de su iglesia evangélica a la que asiste. Pero en la recta final antes de las decisivas primarias de Ohio y Texas, el senador se ha visto forzado a realizar abiertas confesiones sobre sus creencias cristianas.

Mientras Hillary Clinton, cuya campaña ha sido acusada de impulsar parte de estos bulos sobre el islamismo de Obama, no ha hecho mucho por cerrar esta polémica. En una entrevista, Hillary fue preguntada reiteradas veces en televisión sobre este tema y la ex primera dama de religión metodista se ha limitado a afirmar que según lo que ella sabía, su contrincante no era musulmán.

Obama no duda de que sus enemigos políticos se han encargado de propagar e insinuar la mentira de que es un musulmán que no ha salido del armario. El candidato afroamericano también se ha declarado bastante cansado de tener que dar explicaciones constantes sobre algo tan personal y obvio como es su pertenencia durante los últimos veinte años a la rama protestante conocida como la Iglesia Unida de Cristo, que traza sus orígenes a los puritanos de Nueva Inglaterra y en la actualidad tiene 5.700 congregaciones en EE.UU. con 1,2 millones de feligreses.

Obama ha explicado en su biografía, que después de una infancia y juventud seculares, lo que le atrajo a su parroquia en el "south side" de Chicago fue una efectiva combinación de espiritualidad y activismo social.

RELIGIÓN Y ACTIVISMO SOCIAL
De todas formas, el esfuerzo de presentar a Obama como un musulmán clandestino tiene algunos rasgos de verdad. El padre de Obama, nacido en Kenia, abandonó el cristianismo para convertirse al Islam. Pero también abandonó a su familia cuando Obama era un niño de dos años. El pequeño también vivió unos años en Indonesia, el mayor país musulmán del mundo. Pero no se educó en una escuela de integristas islámicos como se ha repetido por Internet.

Dentro de este complejo capítulo de religión, Obama se ha declarado contrario a redefinir la institución del matrimonio en Estados Unidos para incluir a parejas del mismo sexo. Aunque si es partidario de reconocer "uniones civiles" para garantizar toda una serie de derechos familiares a lesbianas y homosexuales.

Sobre la cuestión del aborto, Obama insiste en que el gobierno federal debe promocionar adopciones y responsabilidad personal. Aunque a su juicio, las mujeres, que acaban consultando a sus pastores, doctores y familia, están en mejor posición de tomar estas decisiones que un burócrata en Washington.