Gran parte de los evangélicos de EEUU se posicionan en favor de los inmigrantes latinos

Las Iglesias de la Restauración son parte de un creciente movimiento evangélico latino en Estados Unidos que no sólo está cambiando el perfil religioso de los latinos, sino la faz del movimiento evangélico en este país, hasta hace unos años principalmente blanco y anglosajón. Sólo en el área de Los Ángeles existen más de tres mil iglesias evangélicas latinas y tres seminarios que capacitan a los pastores que las dirigen.

El número de evangélicos latinos está creciendo en todo el país. Según un trabajo del Instituto de Estudios Latinos de la Universidad de Notre Dame, un 23% de los latinos son protestantes, alrededor de 10 millones de personas, y la inmensa mayoría de ellos son evangélicos y pentecostales. En la población de Estados Unidos en general, hay un 28% de evangélicos, de una amplia diversidad de iglesias y tendencias ideológicas.

Todo empezó hace un año, cuando estaba en pleno auge el movimiento pro inmigrante y la oposición contra la propuesta de Sensenbrenner (HR 4437), que criminalizaba a los indocumentados y las iglesias que los ayudaban. Mientras las diócesis e iglesias católicas, religión a la que pertenece la mayoría de los inmigrantes latinos (alrededor del 70%) ayudaban a organizar marchas, los evangélicos y otros protestantes también vieron la necesidad de organizarse.

La red de Pastores del Sur de California está trabajando con otros grupos locales y nacionales en una intensa campaña en favor de la reforma migratoria integral. El movimiento de alianzas evangélicas pretende, aparte de influir en el Congreso y en el presidente en Washington (Bush es evangélico de la corriente born again o "nacidos de nuevo"), movilizar a sus iglesias para que se recojan 10 millones de firmas en todo el país en favor de la reforma.

Pero el tema migratorio ha causado desacuerdos dentro de las iglesias evangélicas, particularmente entre las latinas y los evangélicos blancos que, según sondeos, suelen ser mucho más conservadores en temas sociales que los evangélicos latinos.

Un estudio realizado hace un año por la organización PEW, por ejemplo, halló que un 63% de los evangélicos blancos ven a los inmigrantes como una "amenaza" a los valores y costumbres de este país, una cifra similar a la opinión de la población en general. Muchos otros no lo ven así. La diferencia parece estar en la cercanía e identificación con los inmigrantes que tienen las diversas congregaciones.