“Lo que parecía imposible, Dios lo ha hecho posible”, expresa Elena García, esposa de David Araguàs, que pastorean la iglesia evangélica en Esparraguera (Barcelona) junto a Xavier Rigueiro. “Nuestros corazones solo se pueden llenar de gozo y gratitud por este regalo que sin duda proviene de Él para la proclamación de su evangelio y para que muchas personas puedan llegar a conocer a Jesús en este lugar”.

Elena García se refiere a la adquisición de un nuevo local para la iglesia, cuyo trámite se ha cerrado este mes de septiembre, y donde comenzarán en breve las obras de acondicionamiento.

“Todo ello sería irrealizable sin la colaboración y entrega de cada uno de los miembros de la congregación que han apoyado dicho proyecto”, explica Elena García.

Breve historia de la obra evangélica en Esparraguera

Esparreguera es un pueblo situado a 32 km. de Barcelona, con una población actual de unos 22.000 cuarenta habitantes. No se conoce la existencia de cualquier testimonio evangélico anterior al año 1977, pero consta que fue a partir del citado año, cuando un hermano procedente de la Asamblea en la calle Teruel de Barcelona, Carmelo Bartolomé, que ejercía su profesión de enfermero en Esparreguera, instó a los creyentes que allí vivían a reunirse con el fin de que se pudiera iniciar una iglesia local en esta población.

En 1981 se adquirió un local de alquiler en la Avenida Francesc Maciá nº 173 y en enero de 1982 se realizó la inauguración del nuevo local.

“Muchos han sido los hermanos que lucharon y padecieron por conseguir que la obra en Esparreguera se mantuviese, esto nos ayuda aún más a apreciar la labor de nuestros hermanos. Ya que, como suele suceder, no todo ha sido fácil en este lugar”, explica Elena García. “Existen por delante nuevos proyectos e ideas, nuevas ilusiones que empiezan a tomar forma y valor. Al igual que nuestros anteriores hermanos hemos luchado por conseguir el mismo propósito con la compra del local: ser testimonio de Jesucristo en el pueblo de Esparreguera”.

Un lugar adecuado

Uno de los retos de la congregación tenía que ver con el lugar de culto donde se reunían, que se encontraba deteriorado. “Nuestro local envejecía e irremediablemente había que hacer reformas importantes, entre ellas un muro de contención, a causa de una riera situada en la parte posterior del local. Además la dueña nos exigía 300.000 euros por la compra, una cantidad muy elevada por el estado del local y por las posibilidades como iglesia”.

Sin embargo, la iglesia ha podido afrontar la adquisición de un nuevo lugar para reunirse. “Dios en su bondad y misericordia ha provisto de los recursos para la compra de un nuevo local amplio y luminoso en el mismo pueblo y en la misma calle, un poco más arriba, en el nº 265, donde entre otras cosas se dispone de un gran descampado para aparcar. Ya se ha iniciado el proyecto de adecuación con el arquitecto y oramos que las obras sigan su proceso con normalidad hasta su inauguración y apertura”, añade.

La familia Araguàs García, que sufrió un grave accidente de carretera en abril de 2018 en el que falleció su hija Lluna Araguàs, comunica su alegría por este avance en la obra evangélica en Esparraguera. “Nuestro deseo es que este local sea para la gloria la Dios y la salvación de nuestros convecinos de Esparreguera. Tal y como decía nuestra hija Lluna: SPOILER GOD WINS!”.