El Tribunal Superior de Justicia de Navarra ha declarado nula la implantación del programa de educación Skolae a causa de un error cometido en su tramitación por el anterior Gobierno de Navarra.

La sentencia anulatoria se basa en un error formal dado que el programa fue implantado de una forma irregular, al realizarse por medio de un acto administrativo y no como una disposición general.

Según el fallo, la resolución del director general de Educación por la que se aprobó la implantación de Skolae en 2017 prescindió “total y absolutamente del procedimiento legalmente establecido”. A diferencia del acto administrativo, la disposición general o reglamento exige un proceso más participado y una exposición pública previa.

La Sala de lo Contencioso-Administrativo del TSJN decreta la nulidad del programa por un error en la tramitación legal, pero no entra a analizar su contenido. Contra la sentencia solo cabe recurso de casación.

Un programa con polémica

El programa Skolae ha traído varias polémicas, aunque en el Parlamento navarro actualmente cuenta con un soporte amplio.

Ante este revés judicial para el programa educativo, todos los grupos expusieron su apoyo a excepción de Navarra Suma, que este lunes presentó una moción en el Parlamento pidiendo que la sentencia no sea recurrida y que se paralice el programa en marcha en los centros educativos. La moción ha sido rechazada por el resto de grupos representados (PSN, Geroa Bai, EH Bildu, Podemos e Izquierda-Ezkerra).

Desde el Ejecutivo navarro se está estudiando si se recurre la sentencia del TSJN o si se emprende una nueva tramitación del Skolae desde cero, lo que quizás pudiera retrasar la impartición del programa el próximo curso.

Tres años en los colegios

Skolae comenzó como un programa piloto en el curso 2017-2018. Tras la publicación de los contenidos y materiales que recibían los alumnos en el marco de ese programa de educación afectivo-sexual, algunos padres elevaron sus quejas e invocaron el derecho de educar a sus hijos de acuerdo a sus valores. Entre los demandantes se encuentra la Conferederación Católica de Padres y Madres (Concapa).

A su vez, la organización por la educación y la cultura de la ONU, la Unesco, concedió un premio al programa navarro de educación por “desmontar los estereotipos de género y crear un ámbito de igualdad para todas las edades en las aulas”.

En contra de esta opinión, la Asociación FamiliaE denunció que “con Skolae se educa en igualdad desde una visión muy particular, introduciendo conceptos ideológicos como el “sistema capitalista heteropatriarcal” o planteando que “los alumnos deben cuestionar su masculinidad y someter a crítica los privilegios de los que disfrutan”. En el fondo, con la excusa de la coeducación, se está introduciendo la ideología de género”, afirmaron en junio de 2019.

“Juegos eróticos infantiles” y críticas al “amor romántico”

La polémica surgió principalmente con la propuesta del programa en el ámbito afectivo-sexual.e propone para niños de 0 a 6 años. Skolae propone el “reconocimiento de la sexualidad infantil desde el nacimiento despenalizando el reconocimiento y la vivencia de dicha sexualidad en el ámbito de la escuela y la familia (curiosidad sexual, juegos eróticos infantiles…)”.

Los niños de 6 a 12 años serán invitados a identificar “las diferentes voces que habitan dentro de mí si soy chica, si soy chico, reconocer cómo suenan, qué me dicen, en qué momentos aparecen y cómo me hacen sentir”. Y los adolescentes de 12 a 16 años analizarán “el placer erótico: diversidad de gustos y de placeres”.

Otro de los puntos que ha llamado la atención es la crítica del amor romántico, relacionándolo directamente con la violencia a las mujeres, para alumnos de 12 a 16 años. Según el programa, en “su reconstrucción burguesa, el amor romántico ha sido definido desde la heterosexualidad y sobre la base de una división de roles dentro de la pareja” que bajo este “mito” sirven para “perpetuar los desequilibrios de poder existentes, que favorecen la tolerancia de comportamientos abusivos”.

El programa Skolae fue aprobado en su momento por Geroa Bai, EH Bildu, Podemos e I-E y cuenta con el apoyo del PSN.