La presión de distintas organizaciones sobre los miembros del Consejo consiguió no sólo que fuese rechazado, sino que además se aprobase una resolución alternativa que reconoce la objeción de conciencia como un derecho en el tema del aborto y la eutanasia y se insta a los gobiernos europeos a defender la libertad de los profesionales sanitarios y de las instituciones hospitalarias.
En concreto, el punto primero de la resolución aprobada por el Consejo dice textualmente que «ninguna persona, hospital o institución será coaccionada, considerada civilmente responsable o discriminada debido a su rechazo a realizar, autorizar, participar o asistir en la práctica de un aborto, la realización de un aborto involuntario o de emergencia, eutanasia o cualquier otro acto que cause la muerte de un feto humano o un embrión, por cualquier razón».
Esa resolución supone un triunfo sin precedentes para aquellas organizaciones europeas, como European Dignity Watch (www.europeandignitywatch.org), que han liderado la oposición al informe McCafferty y han defendido que se respete la libertad de los profesionales sanitarios a negarse a practicar abortos.
El médico Manuel Suárez, vicepresidente de la Alianza Evangélica Española, ha seguido de cerca el desarrollo del debate en torno al citado informe. Expresó su satisfacción porque el informe pretendía «restringir el derecho a objetar y se enfatizaba en poner la carga de la prueba en el médico que hace la objeción de conciencia». En su opinión «no sólo se presionaba a los médicos, sino que de una forma inapelable se presionaba a enfermeras». «Era -en definitiva- un ataque a la objeción de conciencia en un tema concreto como éste».
Suárez explicó cómo el debate se sustentó en datos falsos que presentaba el informe «como que no estaba regulada la libertad de conciencia, o que las mujeres no pueden abortar todo lo que pueden actualmente en Europa». Y el médico se sorprende de que desde ciertos círculos «se insista en que haya más abortos en Europa. Parece que hay que fomentarlo. No entiendo que tenga algo que ver con el progresismo».
Las bases de la democracia «se sustentan en la libertad de objeción de conciencia», explica Suárez. Por eso se trata de un derecho «que afecta a toda la sociedad». «No hay democracia en Cuba o en China porque no hay derecho a la objeción de conciencia. Si empezamos a aceptar pseudodemocracias en las que no hay objeción de conciencia, se nos viene todo abajo», advierte el vicepresidente de la AEE.
Además Suárez criticó el hecho de que no se le haya dado demasiada relevancia a un tema «fundamental». «La información que se pasa es la que apoya cierta postura ideológica. Seguro que si hubiera salido favorable este informe, tendríamos al día siguiente a la ministra Aído sacándolo en primera plana. Tenemos un problema con la manipulación de la prensa», sentenció.
Desde la Alianza Evangélica se ha realizado presión en cuanto a este tema, tal y como lo cuenta el vicepresidente de la entidad. «Conseguimos contactar con parlamentarios. Lo hemos conseguido enviando cartas pidiendo un posicionamiento favorable a nuestra posición y explicando por qué es así. Nuestro representante en Bruselas ha luchado también, para explicar a los parlamentarios nuestra posición y han sido capaces de apoyar su posición desde planteamientos que nosotros hicimos. Por eso nos sentimos muy satisfechos», explica Suárez.
Para Leonor Tamayo, responsable de Relaciones Internacionales de Profesionales por la Ética, «se trata de una gran noticia, fruto de la colaboración de una verdadera red europea de personas e instituciones comprometidas con el derecho a la vida y la salvaguarda de la libertad religiosa y de conciencia. Este hecho nos enseña que es posible trabajar unidos por los derechos fundamentales y la dignidad de la persona, fundamentos de la construcción europea. Y obtener frutos de este trabajo». Tamayo recuerda que las Recomendaciones del Consejo de Europa no son vinculantes pero se utilizan frecuentemente como preámbulo de leyes y normas de rango nacional.
MULTIMEDIA
Puede escuchar aquí la entrevista de Daniel Oval
a Manuel Suárez, médico, político y Vicepresidente de la Alianza Evangélica Española sobre las declaraciones de Bibiana Aido.
Si quieres comentar o