El Ministro de Justicia confirma la extensión del dinero de Hacienda en el IRPF a las federaciones evangélica, judía y musulmana

En una entrevista Juan Fernando López Aguilar, ministro de Justicia indicó la pasada semana que «estamos dispuestos a hablarlo», en relación a que en la declaración de la Renta de Hacienda se incluya una casilla en la que los contribuyentes (sin coste económico para ellos) dediquen una parte del dinero que recauda Hacienda a una determinada confesión, algo que hasta ahora sólo recibía la Iglesia católica.

De hecho, responsables islámicos, judíos y protestantes según el diario ABC “han remitido ya a la Dirección General de Asuntos Religiosos los correspondientes informes económicos donde se reclama un porcentaje en el IRPF `por el procedimiento técnicamente más adecuado”.

Este aspecto hasta ahora había sido rechazado de plano por los representantes legales del protestantismo español, pero como en otros aspectos, siempre es posible el cambio, en un dirección en la que cada vez más recuerda al hermano pequeño del catolicismo romano en cuanto a búsqueda de derechos se refiere.

No obstante, dentro de la comunidad evangélica hay dudas sobre si la aportación estatal «perpetúa un mal sistema» según expresa un Comunicado de la Alianza Evangélica Española que recogieron diversos medios (entre ellos el propio diario ABC); mientras que buena parte de la Comunidad Judía teme que la inclusión de una casilla en favor de esta confesión pueda servir para elaborar un censo de quienes se declaran judíos en nuestro país.

Sin embargo, y tras el acuerdo alcanzado con la Conferencia Episcopal para mantener «de modo indefinido» su presencia en el IRPF, con una dotación del 0,7% de los impuestos de aquellos contribuyentes que marquen la «X» en la casilla de la Iglesia católica, responsables de la Federación de Entidades Religiosas Evangélicas de España (Ferede) y de la Comisión Islámica Española (CIE) han reclamado que «termine el trato de favor» hacia la Iglesia católica, permitiendo a los ciudadanos «la oportunidad de contribuir con sus impuestos, con una fórmula análoga a la empleada con la Iglesia católica, en beneficio de las actividades de, al menos, las confesiones religiosas que tienen acuerdos de cooperación con el Estado».

Claro que otra forma de terminar el trato de favor habría sido exigir que se terminase alguna vez con la aportación de dinero público a las confesiones religiosas por considerarlo incorrecto. De hecho, lo que logra esta postura (entre otros muchos aspectos) es ayudar a perpetuar el modelo de financiación de la Iglesia católica con dinero público, subiéndose al mismo tren el resto de confesiones con acuerdos con el Estado, aunque evidentemente los “vagones” son bastante más pequeños.

DINERO PÚBLICO PARA LA IGLESIA CATÓLICA
En relación al nuevo modelo de financiación pactado con la Iglesia católica hace dos meses, López Aguilar aseguró que «la Iglesia católica gana estabilidad financiera y margen de maniobra», al tiempo que aseguró que la institución eclesiástica «no va a tener privilegios fiscales incompatibles con el derecho europeo, ni tampoco garantía de que, en cualquier caso, el Gobierno, por la vía presupuestaria, le va a proporcionar lo que necesite para cuadrar las cuentas del año. Pero de este modo sí consigue un sistema que les aporta seguridad». López Aguilar lamenta que «son algunos sectores eclesiales quienes espolean a la jerarquía eclesiástica contra el Gobierno».

FEREDE Y ALIANZA EVANGÉLICA
Tras el anuncio –el pasado mes de octubre- del nuevo modelo de financiación para la Iglesia católica, en una nota oficial la Ferede expresó que «felicita al Gobierno y a la Iglesia católica por el acuerdo alcanzado», un sistema que considera «más justo» que el anterior. Al tiempo, la organización evangélica ha instado al Ejecutivo a «ofertar» una situación análoga para las otras confesiones, «con independencia de que -siendo éste un tema delicado- la Ferede deberá presentarla a sus Iglesias para que éstas se manifiesten a favor o en contra».

La otra institución evangélica, la Alianza Evangélica Española (AEE), también emitió un comunicado donde incidía en que «las confesiones religiosas deberíamos renunciar a recibir dinero público del Estado», calificando el acuerdo con la Iglesia católica de «parche que perpetúa un mal sistema» y que «va a provocar un «efecto llamada» para el resto de confesiones».

ENCUESTA
Pueden participar en una encuesta sobre cómo ven la inclusión de una casilla en la declaración de Hacienda para las confesiones no católicas pinchando AQUÍ: http://www.e-mision.org/encuesta/index.php?dispid=49

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