Yusuf Fernández, portavoz de la Junta islámica, piensa que «España en teoría es un Estado aconfesional, pero en la práctica no»

Fernández calcula que un 15% de los musulmanes son progresistas, un 20% tiene tendencias radicales -«conservadoras»- y el resto vive la religión sin alardes. Ayer empezó el Ramadán y muy pocos se dieron cuenta.

Para él “todo aquel que comete actos terroristas queda automáticamente fuera del islam. Ninguna raíz del terrorismo puede ser religiosa aunque, efectivamente, el terror se vista a veces con los ropajes de la religión”.

Al Qaeda-dice- es una asociación nacida en los años ochenta para combatir en la guerra de Afganistán, que fue creada por los servicios secretos de Estados Unidos y Pakistán. Su objetivo era atraer a gente para luchar contra los soviéticos. Cuando éstos se retiraron, esa red continuó viva. No digo que Al Qaeda no pertenezca al islam. Pero es un monstruo, una aberración desde el punto de vista de la religión musulmana. Son unos cientos entre 1.500 millones, que sin embargo se llevan todos los titulares. Quiero que se entienda bien: el 80% de los asesinados por Al Qaeda son musulmanes.

En cuanto a las disculpas del Papa dice que “Hay un aspecto positivo, ha declarado que la cita de Manuel II no representa su pensamiento. Y uno negativo: lamenta las reacciones, pero hubiera sido más adecuado lamentar su contenido”.

De la aconfesionalidad del Estado español “lo es en teoría, pero en la práctica no lo es. El Estado tiene que cooperar con todas las religiones. No nos sentimos muy a gusto al ver una boda de Estado, como la de los príncipes, en la iglesia. Don Felipe y doña Leticia deberían haberse casado ante un juez, y luego, en privado, por el rito católico. Tampoco deberían haber permitido el despliegue mediático para el bautizo de la infanta. Lo del funeral de La Almudena por el 11-M fue un escándalo. Primero, porque se hizo en una iglesia católica cuando los muertos eran de varias religiones. Y luego, porque Rouco Varela dijo que el atentado había sido un ataque a la cristiandad”.

Ante la afirmación de que todavía hay lapidaciones a mujeres comenta que generalmente proceden de Arabia Saudí, del sector wahabista, que tiene una interpretación muy literal del Corán. “Para nosotros, eso no es ejemplo. Ellos dicen: «Eso se hacía antes y hay que seguir haciéndolo». Y yo les contesto: «Antes ibais a caballo y ahora vais en jet privado». De los cincuenta y pico países con mayoría musulmana, en sólo tres hay lapidaciones: Arabia Saudí, Nigeria y Sudán.