Empeora la salud de los misioneros con Ébola

Los dos misioneros que contrajeron Ébola en Liberia al atender a víctimas del virus continúan en tratamiento y su estado de salud ha empeorado en los últimos dos días.

A pesar de estar postrado en una cama, el doctor Kent Brantly sigue buscando el bien de los demás. “Ayer, un suero experimental llegó al país, pero sólo había suficiente para una persona. El doctor Brantly pidió que se le diera a Nancy Writebol”, explicó Franklin Graham, director de la organización Samaritan's Purse.

El doctor Brantly llevaba varios meses tratando a personas en Liberia, el país más afectado por el virus que ha disparado las alarmas en todo el continente africano. El pasado sábado detectaron que había contraído el virus, el cual es altamente contagioso.

“Brantly recibió una unidad de sangre de un niño de 14 años de edad que había sobrevivido al Ébola gracias a su labor”, agregó Graham. “El niño y su familia querían ser capaces de ayudar al médico que le salvó la vida”.

Por su parte, la enfermera estadounidense Nancy Writebol, trabajaba con la organización misionera SIM junto al doctor Brantly. Su estado sigue empeorando. Su esposo David sólo puede visitarla a través de una ventana o vestido con un traje que impida todo contacto.

“Seguimos orando por la recuperación total y completa de Nancy”, dijo Bruce Johnson, presidente de SIM EE.UU.. “A pesar de que su condición ha empeorado, sabemos que está recibiendo la mejor atención médica posible, y estamos agradecidos de que ella haya tenido acceso a esta medicina experimental”, añadió.

“Creemos en el poder de la oración y pedimos a la gente de todo el mundo que oren, no sólo por Nancy y Kent, sino también para todos los afectados por este terrible virus”, dijo finalmente.

UNA PROBABLE EXPANSIÓN POR ÁFRICA
El brote de Ébola en Liberia se ha extendido a Guinea y Sierra Leona principalmente. En Nigeria también se ha detectado un caso esta semana, ante lo que las autoridades reaccionaron con rapidez, implantando medidas contra el contagio extremas en el hospital.

Ante las especulaciones de algunos sobre una posible epidemia mundial, la mayoría de expertos considera que sería muy difícil que esta se pudiese producir. El epidemiólogo Jeremy Farra, una figura líder a nivel mundial en el campo de las infecciones, explicaba a la BBC que "no estamos ante un grave peligro de una pandemia global que llegue a Norteamérica, Asia o Europa".

Lo mismo opina W. Ian Lipkin, otro experto en enfermedades virales y profesor de epidemiología en la Mailman School of Public Health en la Columbia University. Cree que es "improbable".

Ante la pregunta de la publicación National Geographic sobre si sería posible que alguien infectado con el Ébola en África occidental llevara la enfermedad a EE.UU., respondió: "Ciertamente es posible. Pero debido a nuestro sistema de salud es improbable. Seríamos capaces de contenerla (...). No creo que haya razones para el pánico ante una epidemia global de Ébola".

Sin embargo, el doctor Farra puntualizó: "Frente a lo que sí estamos, es ante una posible propagación más extensa en África".

No obstante la OMS admite el fracaso de las actuales medidas, y el virus de alta mortalidad y sin tratamiento ya pone en guardia a las grandes potencias mundiales.