Las revueltas aguas de la disputa por las cascadas de Agua Azul pueden ocasionar una masacre en Chiapas

Desde su sede en la ciudad de Stuttgart, la coordinación advierte que cada vez más turistas les consultan sobre la situación política en México, y ahora en concreto sobre Agua Azul, debido a incidentes mencionados en la prensa, que han llamado su atención. El organismo plural destaca que el área está poblada por comunidades indígenas de diferentes orientaciones políticas, para las cuales la tierra que trabajan y los recursos biológicos de la selva, así como los ingresos del turismo, significan mucho más que una base de existencia.

La Coordinación Alemana por los Derechos Humanos en México está integrada por diversas organizaciones e instituciones: Alasei-Bonn, Amnistía Internacional (sección de la República Federal Alemana), Carea, Fian sección alemana, Iniciativa para México de Colonia y Bonn, Oficina Ecuménica para la Paz y Justicia, Pan para el Mundo, Pax Christi (Fondo Solidario un Mundo), Procura Misionera de los Jesuitas Alemanes, Promovio (Asociación de Apoyo para el Movimiento de Derechos Humanos Indígena de Oaxaca/México, Promovimiento Indígena en Oaxaca) y la Universidad Protestante para Trabajo Social y Diaconía en Hamburgo.

Desde noviembre pasado se han reportado diferencias graves entre las comunidades alrededor de las cascadas, donde al parecer una parte está apoyada por grupos de poder y reivindica el territorio como suyo de manera exclusiva, utilizando para ello armas modernas.

Para el organismo, esos "incidentes" recuerdan lo ocurrido en el 22 de diciembre de 1997 cuando fueron masacradas 45 personas. A pesar de que los agresores de entonces en su mayoría han sido sometidos a un proceso penal, los autores intelectuales gozan de impunidad.

La coordinación expresa que los turistas ajenos al conflicto podrían estar en peligro y remarca que en condiciones de igualdad habría tierra y beneficio para todos.

Por su parte, la Comisión Civil Internacional de Observación por los Derechos Humanos (CCIODH) confirmó que una delegación -integrada por al menos 50 personas de una decena de países- llegará a México el próximo 30 de enero.

En su sexta visita, la comisión civil dará especial seguimiento a la masacre de Acteal, al cumplir ésta 10 años y seguir la impunidad gubernamental.

Los observadores expresaron su preocupación por la situación en Chiapas, con un incremento de las denuncias por agresiones y violaciones a los derechos humanos de las comunidades indígenas zapatistas, así que visitarán localidades chiapanecas donde esto ocurre.

Visitará Oaxaca, dará seguimiento a la represión en el municipio mexiquense de Atenco y la situación de los presos políticos.

La CCIODH entregará posteriormente su informe a las personas, organizaciones e instituciones que hayan presentado testimonio a las organizaciones que avalan la comisión, al Parlamento Europeo, la Oficina de la Alta Comisionada de la Organización de las Naciones Unidas y los distintos parlamentos nacionales y autonómicos.