Corea del Norte, líder mundial en perseguir DDHH pese al cambio de liderazgo

El cambio de líder en Corea del Norte ha sido seguido en todo el mundo con especial interés. La pregunta en el aire era si el régimen aprovecharía la muerte de Kim Jong Il para hacer cambios significativos. Las primeras informaciones sobre la transición del poder a Kim Jong Un apuntan a que la adoración sectaria al nuevo “líder supremo” será la fe impuesta a todos los ciudadanos.

Todas las organizaciones que luchan por la libertad religiosa parecen estar de acuerdo en que la desaparición del antiguo líder no evitará que Corea del Norte siga siendo el país más peligroso del mundo para los cristianos. La grave situación (que incluye torturas, el envío de familias enteras a campos de concentración y ejecuciones públicas) no cambiará a corto o medio plazo.

Esta impresión la corrobra una año más la lista de referencia sobre libertad religiosa, la World Watch List, que prepara anualmente Puertas Abiertas Internacional. Pese al aumento de los ataques contra cristianos en países con mayoría islámica como Nigeria, Pakistán o Egipto, el régimen neo-comunista mantiene su triste primer lugar.

Se estima que cerca de 1/4 parte de los 200.000 prisioneros políticos en el país están encarcelados por su fe cristiana. Esto equivaldría a aproximadamente 40.000-50.000 personas. Aunque es difícil obtener datos de este país herméticamente cerrado, es posible que haya hasta 400.000 cristianos más practican su fe en la clandestinidad, sin haber sido descubiertos por el régimen.

“AÚN MÁS DUREZA”
Una organización que trabaja exclusivamente para la libertad de conciencia en Corea es Helping Hands Korea (HHK), con base en Seúl. “Estar en posesión de una Biblia o materiales de enseñanza bíblica o ser descubierto en una reunión de oración, son motivos suficientes para ser detenido”, explican.

Según HHK, “en la rápida preparación para la transición del poder absoluto de Kim Jong Il a su tercer hijo Kim Jong Un, se ha informado que este habría recibido mayor influencia en la seguridad del régimen, especialmente a la hora de castigar a posibles desertores. Algunos informes apuntan a que Jong Un está actuando contra los cristianos con aún más dureza, posiblemente por considerarles como una fuente potencial de oposición hacia su liderazgo nacional”.

A toda la paranoia del aparato se añade el hecho de que durante este año se celebra el centenario del nacimiento del fundador de la dinastía que ahora domina el país, Kim Il Sung, que murió en 1994. Su figura se exaltará de forma especial durante los próximos meses, por lo que la represión contra quienes se resistan a participar en los festejos será aún más dura.

VENERACIÓN DEL ‘LÍDER SUPREMO’
La fe de los cristianos es una afrenta directa al régimen, cualquier religión es una amenaza directa a su propio sistema de adoración, creado alrededor de la figura de Kim Il Sung y su recién muerto sucesor Kim Jong Il. La aureola que el régimen ha construido alrededor de su memoria les ha convertido en un tipo de “dioses de la nación” cuya memoria debe ser honrada continuamente por los ciudadanos.

Un ejemplo de esto fueron las impactantes imágenes de centenares de miles de habitantes llorando desconsoladamente la muerte de su ya ex “líder supremo”. Días después, esas mismas personas eran obligadas a participar en la “coronación” de su nuevo “padre de la nación”, Kim Jong Un, nieto del fundador de la dinastía.

Las decenas de personas que han conseguido escapar del país hablan de hambre generalizada, anulación total de las libertades y un estado de control constante del pensamiento de los ciudadanos.

EXPERTOS NO VEN CAMBIOS
“Esperamos que esto sea una nueva etapa, pero hay muchos que son pesimistas sobre ello”, ha dicho a Christian Post Paul Eastbrooks, miembro de Puertas Abiertas Estados Unidos. “No podemos dar una clara respuesta sobre si habrá cambios, porque no está claro qué poderes tendrá el nuevo líder”.

Lo ve de forma parecida Todd Nettleton, portavoz de La Voz de los Mártires, otra organización con largo recorrió en su defensa de los perseguidos. Explica que un testigo que conoce el país por dentro ha dicho que “no esperamos grandes cambios a medio plazo”. Nettleton insiste en que el régimen seguirá viendo a los cristianos como “un peligro para la sociedad”.

“Es común encerrar a la gente en campos de concentración, y no sólo a los que se cree culpables, sino también a sus padres e hijos”. Así, el régimen ataca directamente a “tres generaciones para intentar deshacerse en el país de la filosofía cristiana que no sólo amenaza la religión de los Kim como seres divinos, sino que también es una amenaza para el propio régimen”.

MÁS DE 48.000 FIRMAS PIDEN SOLUCIÓN EN REINO UNIDO
Release International, con sede en Inglaterra, es una de las organizaciones que más ha denunciado las barbaridades que se cometen en Corea del Norte. Una forma de concienciar sobre la situación en el país asiático ha sido la edición del DVD “No other God”, con testimonios de cristianos norcoreanos que han conseguido escapar del país.

Además, en el número de enero de su revista informativa, explican que “Corea del Norte, probablemente el peor perseguidor de cristianos en el mundo, fue el enfoque de la campaña ‘One day’”. Con esta iniciativa se recogieron durante el año pasado más de 48.000 firmas a favor de que los norcoreanos puedan expresar su fe en libertad sin amenazas de persecución. Entregaron la petición a la embajada de Corea del Norte en Londres después de que varios miembros de la organización recorrieran las calles cercanas representando la celebración de un funeral. Un féretro llevaba la inscripción “algún día habrá libertad” y al abrirlo, se dejaron volar de su interior globos blancos. El mismo día se hizo una vigilia de oración por los cristianos perseguidos en el país.

Unos días después, la misma carta se entregó en la residencia del Primer Ministro inglés, al que se la ha exigido que haga presión sobre el régimen para que haya avances hacia la libertad.