El juicio por el asesinato de tres cristianos en Turquía llega a su fin

El misionero Rody Rodeheaver expresó sus expectativas ante la celebración del juicio. «Todos nosotros en la iglesia cristiana estamos orando para que no sólo se haga justicia, sino que, en el curso de las cosas, los jóvenes que realizaron estos crímenes encuentren la esperanza y el perdón que viene a través del Evangelio de Jesucristo», explicó.

Los acusados son Salih Guler, Ozdemir Cuma, Ceker Hamit, Abuzer Yildirim, y el presunto cabecilla, Emre Gunaydin, todos ellos de edades entre 20 y 25 años. En abril de 2007 asaltaron a tres cristianos de la editorial Zirve, a quienes apuñalaron y torturaron hasta la muerte. Ocurrió en Malatya, en la zona este de Turquía. Uno de los asesinos detenidos dijo que el crimen «debería ser una lección para los enemigos de nuestra religión», refiriéndose al Islam, que es mayoritario en el país.

Las víctimas, atadas de manos y pies, fueron torturadas y encontradas degolladas en la oficina de la editorial. Una de las tres víctimas falleció tras el ingreso en el hospital debido a la gravedad de sus heridas. La autopsia de las víctimas ha relevado que una de ellas murió tras recibir más de cien cuchilladas, que en forma de tortura sistemática le aplicaron a todo el cuerpo.

El caso fue seguido con mucha atención por los medios de comunicación internacionales, en un momento en el que Turquía era observada ante una posible entrada en la Unión Europea.

DÍA DE ORACIÓN
De esta tragedia ha surgido un segundo día anual de oración por la iglesia perseguida de Turquía. El día de oración es el 18 de abril, que es el aniversario de los trágicos asesinatos. Para esta ocasión además se ha facilitado una página web en varios idiomas, entre ellos el español (www.prayforturkey.com), desde la que se puede encontrar información sobre la obra evangélica en el país y sus necesidades.

Rodeheaver, promotor de este movimiento, pidió a las iglesias del mundo que «oren para que Dios produzca un avivamiento en la tierra de Turquía, para que Dios también proteja a la iglesia, y para que Dios dé a los creyentes en Turquía la valentía para compartir su fe y permanecer firmes por el Evangelio en ese lugar». Pero la persecución todavía frecuenta los cristianos en Turquía. Aunque las condiciones no suelen ser tan graves como estos tres asesinatos, los cristianos turcos son desafiados a diario por su fe.

El misionero considera que Turquía es una plataforma de lanzamiento para la difusión del evangelio. Su ubicación geográfica la convierte en una intersección de varios países sin libertad religiosa. Es por ello que Turquía se ha convertido en un lugar importante para el campo misionero en el Oriente Medio.