La editora en temas religiosos de la publicación, Lisa Miller, dijo que en su opinión ni siquiera los eruditos en cuestiones bíblicas pueden asegurar que Jesús o la Biblia definieran al matrimonio como aquel celebrado entre un hombre y una mujer.
“Lo que la Biblia dice acerca del matrimonio no tiene nada que ver con la manera en que lo vemos hoy” declaró Miller “Hay muchas maneras de interpretarla dado que fue escrita hace tres o cuatro mil años, para un mundo que miraba las cosas de una manera en todo diferente a nuestra visión actual”.
Algunas de las cosas que los editores del artículo pudieron encontrar en sus personales conclusiones sobre su investigación fueron que sólo existen 4 versículos que son citados por los religiosos en contra de la práctica homosexual.
“Quise saber más de esos versículos, los tomé y acudí con eruditos progresistas para saber si habría otra manera de interpretarlos más allá de la condena de la homosexualidad como una abominación” declaró Miller.
Según Miller “El argumento ha sido siempre: Adán y Eva, el matrimonio entre un hombre y una mujer”
“En estos versículos del Genésis, se habla de que el hombre dejará a su familia y se unirá a su mujer para ser uno” continua Miller “El problema es que estos versículos fueron escritos en un universo donde los hombres eran polígamos, y como me dijo uno de los eruditos bíblicos con los que hablé… sé que tengo que ser uno con mi mujer, pero ¿con cuántas de ellas?”, opina Miller.
Y sobre el Levítico, en uno de cuyos pasajes se refiere al sexo entre dos hombres como una “abominación”, Miller dijo que ese pasaje del libro de las leyes es parte de un mundo diferente al de ahora.
“Este era un mundo muy particular donde existían toda clase de normas sobre los sacrificios de sangre y la mejor manera de matar a un animal. Sobre ello, uno dice ahora: Mira, esas leyes ya no se aplican ahora. Nosotros no llevamos extraños cortes de pelo ni hacemos sacrificios sangrientos ¿Por qué tomamos esos dos versículos sobre la sexualidad humana tan seriamente cuando tres páginas después recibimos instrucciones sobre el mejor precio que se ha de pagar por un esclavo dependiendo si es hombre, mujer, niño o viejo?".
Miller apunta también que ningún pasaje de la Biblia hace referencia al sexo entre dos mujeres. Ella piensa, de fondo, que el asunto de la prohibición del matrimonio gay es una negativa al sexo gay. “Dios ve dentro de nosotros, sabe nuestros secretos e incluso las partes de nosotros que no mostramos al mundo. Y este es un maravilloso argumento para el matrimonio gay: Si esto es así, que Dios nos ama a todos nosotros, en nuestra belleza e imperfección ¿por qué él iba a segregar a alguien en función de su orientación sexual? No lo haría. He encontrado esto como un argumento que me ha inspirado” concluyó Miller.
REPORTAJE SESGADO
No obstante, no consta que Miller tuviera la paridad de acudir con estos mismos versículos al sector conservador para recibir también una explicación acerca de ellos, dejando por lo tanto como único punto de vista al liberal, dejando al margen de esta investigación no sólo a quienes difieren de su punto de vista sino a la propia objetividad del reportaje.
Los “conservadores” entienden que la moral cristiana no condena unos pecados más que otros, pero que dentro de esta situación el Nuevo Testamento no cambia respecto al Antiguo su concepto de las relaciones homosexuales como contrarias al orden de Dios; mientras que en cambio sí que abroga muchas de las tradiciones de comidas, ritos y costumbres.
Entre otras muchas cosas le hubieran corregido también aclarando que Dios ama al ser humano con sus imperfecciones y tendencias equivocadas; y que por lo tanto Dios ama a la persona de orientación homosexual, pero condena la práctica homosexual (de la misma manera que ama al heterosexual pero condena la infidelidad matrimonial).
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