Un chino protestante vuelve a ser el hombre más alto del mundo en el libro Guinness

Nació en Chifeng, en la Mongolia China, hace 56 años. Pesa 165 kilos soportados por sus dos metros treinta y seis centímetros. Hasta hace tres años vivía casi oculto por sus familiares en una aldea de montaña. "Descubierto" por el empresario hotelero Xin Xing, el hombretón chino salió a la luz y está plenamente integrado en la sociedad.

Bao tuvo el título durante un año, antes de perderlo en 2006 frente a Stadnyk, que según su médico medía 2,57 metros, explicó el editor general del Libro Guinness de los Récords, Craig Glenday. El chino Bao ha aceptado la nueva medición de la organización, que exige hacerlo seis veces en un día, tanto de pie como acostado, pero Stadnyk se negó. El ruso había sido nombrado como el hombre más grande del mundo debido a un informe de su médico.

Glenday indicó que Guinness ha pedido medir a Stadnyk desde 2004, cuando la organización supo de él, ofreciéndole enviar funcionarios a Ucrania o pagarle un vuelo a Reino Unido. "Se le ha grabado diciendo que no quiere que le molesten. Básicamente no quiere la fama y publicidad que supone ser el hombre más alto del mundo", dijo Glenday. Stadnyk ve su altura más como un problema que una bendición, porque "el mundo está hecho para personas de altura media".

Stadnyk, que vive con su madre en un pequeño pueblo en el centro de Ucrania, dijo el año pasado que sólo quiere una vida normal en condiciones normales, y para ello no necesita gloria alguna.

Por el contrario, a Bao le encanta la publicidad que conlleva el título y dijo estar "un poco apenado" cuando se enteró que lo había perdido a manos de Stadnyk, comentó Glenday. Ahora, este pastor de ganado de la región de Mongolia Interior oficialmente vuelve a ser el hombre más alto del mundo.

Su título se revalidará en la edición 2009 del Libro Guinness de los Récords, que sale el 17 de septiembre.

SU CONVERSIÓN
Con el título del Guinness le han llovido a Bao los contratos para patrocinar todo tipo de productos, ofertas de entrevistas, etc. Esto le ha permitido viajar por numerosos países. De Estados Unidos nos llegan noticias que durante una estancia en Brasil, Bao Xishun asistió regularmente a una iglesia evangélica y aceptó a Cristo como Salvador de su alma.

Recientemente ha contraído matrimonio con Shujuan, joven de 28 años y 1,68 m. de estatura, 68 centímetros menos que él. Los médicos que le han examinado coinciden en que su estatura no se debe a ninguna enfermedad, como padecen otros titanes humanos. Su gigantismo es natural.