`Desafío Miqueas´, un programa evangélico mundial contra la pobreza

Ese mismo día, antes de las declaraciones anteriores, los líderes de la WEA participaron en un culto para concienciar sobre la pobreza y los efectos devastadores que tiene sobre la humanidad. El culto formaba parte de una campaña de tres días en contra de la pobreza global que se organizó en parte por el Micah Challenge (Desafío Miqueas).

Fue del 14 al 16 septiembre cuando un gran número de líderes internacionales y líderes religiosos americanos apelaron a la ONU, y especialmente a los EE.UU., para que cumplieran los Objetivos de Desarrollo del Milenio para reducir la pobreza a la mitad para el año 2015. “Sufrimos por los 800 millones de personas en todo mundo que están desnutridas y más de 1000 millones de personas que viven con menos de 1 dólar al día, y luchan diariamente por sobrevivir”, dice Geoff Tunnicliffe, Director Internacional de la WEA. Después continuó: “Debemos exigir que todos los gobiernos cumplan sus promesas de responder al empobrecimiento del mundo”. Además añadió: “Sin embargo, no es sólo asunto de los gobiernos. La iglesia debe reunir todo su potencial y obedecer al mandamiento bíblico de cuidar a los pobres”.

RETO A BUSH
Cuando el Presidente Bush se dirigió a las Naciones Unidas en este encuentro, por primera vez dijo que se comprometía con los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), un proyecto ambicioso que incluye la reducción de la pobreza y el hambre a la mitad, la seguridad de que todos los niños y niñas del mundo tengan acceso a una educación primaria y el freno a la extensión del SIDA: todo esto antes del 2015. “Lo que queremos ver ahora es que los EE.UU. realmente cumplan estos objetivos”, dijo Smitheram, quien retó a la administración Bush a que demostraran hechos y no sólo palabras.

Según Richard Cizik, Vicepresidente de Asuntos del Gobierno para la Asociación Estadounidense Evangélica, una de las partes más importantes del encuentro fue la participación de los evangélicos en la mesa de opinión. “Sabemos que 30.000 niños mueren cada día de hambre en el mundo”, dijo Cizik. “¿Puede un evangélico, o cualquier otra persona religiosa, cerrar los ojos a tal tragedia?” “La respuesta es no”, dijo. “Los cristianos evangélicos no cerrarán sus corazones y mentes a esta realidad increíblemente trágica. Estamos aquí para ser testigos de los compromisos cristianos con los ODM para acabar con la pobreza durante nuestra vida”.

Ndaba Mazabane, Presidente del Concilio Internacional de la WEA, quien habló en el encuentro el jueves, también dijo que el mundo se enfrenta ahora a un “momento kairós”, que puede marcar un hito para la comunidad global. “Si aprovechamos este momento juntos, podemos marcar la diferencia”, dice Mazabane, quien añadió que este hito se puede explicar con la palabra en inglés, G-R-A-B, que significa en castellano “aprovechar”, y es el acrónimo de Gracious (gracia), Relevant (relevante), Available (disponible) y Biblical (bíblico). “La Biblia es nuestro mapa de carretera, la única forma de obtener la respuesta que necesitamos,” explicó Mazabane. “La Biblia manda a los cristianos a amar primero al Señor y después al prójimo. ¡Nuestro llamado es ‘aprovechar’ este momento juntos!”