Juan José Cortés, exdiputado nacional del PP y padre de Mari Luz -la niña asesinada por el pederasta Santiago del Valle en 2008 en Huelva- ha quedado en libertad provisional después de ser denunciado por una mujer por un presunto delito de lesiones tras un altercado en la estación de Santa Justa de Sevilla.

Según han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), Cortés ha pasado a disposición del Juzgado de Instrucción número 9 de Sevilla, en funciones de guardia de detenidos, y su titular ha acordado su puesta en libertad provisional.

Cortés, pastor evangélico, entrenador de fútbol y activista onubense de etnia gitana, ha salido de los juzgados a las 12.45 horas y ha declinado hacer declaraciones.

Según ha adelantado La Voz del Sur, Cortés fue detenido el lunes en la estación de Santa Justa de Sevilla tras una agresión a una mujer, C. M., quién interpuso una denuncia policial.

Además, a través de un vídeo difundido en redes sociales, la denunciante ha asegurado que el padre de Mari Luz “me ha abordado con una vara y me ha abierto la cabeza. Me ha agredido brutalmente; lo tengo denunciado por amenazas de muerte y las ha cumplido”.

Cortés alega tener “lagunas”

Este miércoles Juan José Cortés ha utilizado las redes sociales para difundir un mensaje en el que alegaba no recordar exactamente lo ocurrido durante el suceso denunciado, algo que dijo que le ocurre a causa de “trastorno de la personalidad por estrés post-traumático” tras la muerte de su hija, del que está diagnosticado. “A veces tengo lagunas, no recuerdo las cosas en situaciones estresantes y me bloqueo, no controlo mis emociones, me fundo en negro, es una enfermedad complicada, siento no poder dar más datos, espero que todo se aclare, pero no soy una persona agresiva”, se defendió Cortés.

Además, expresó que lo ocurrido fue un “encuentro fortuito” con la mujer agredida, a la que además acusó de grabar varios vídeos “alegrándose de la muerte de mi hija Mariluz”. Finalizó su mensaje garantizando su colaboración con la justicia para que “se aclaren los hechos y si soy responsable de algo, para eso está la ley y la justicia para cumplirla”.

Cortés se hizo conocido ante la opinión pública en España tras el asesinato de su hija Mari Luz en 2008, que llevó al pastor evangélico a una campaña de recogida de firmas para apoyar la prisión permanente revisable.