Mas propone elecciones plebiscitarias y reconoce que el 9-N “no será la consulta definitiva”

En una esperada comparecencia hoy martes a las 10 de la mañana, Artur Mas ha reconocido que la consulta del 9 de noviembre no se hará tal cómo la había impulsado hasta el momento.

El presidente de la Generalitat de Cataluña ha explicado que tras varias intentos de llegar a una respuesta unificada, se constata que hay “grietas” entre los partidos pro-consulta.

Aún así, ha anunciado, el 9 de noviembre habrá “urnas, papeletas y votos”, decisión que se toma en base a “marcos legales preexistentes”. Pero estas votaciones populares no serán una consulta como la que se había presentado hasta ahora, ha reconocido. “Todos los que quieran votar la pregunta que hemos decidido, podrán hacerlo”, en un día que tendrá un carácter principalmente reivindicativo.

Tras la suspensión del decreto de la consulta, la alternativa se ha denominado como un “proceso participativo” impulsado desde el gobierno catalán para el que no se firmará un nuevo decreto. Este ‘plan b’ para el 9-N tendrá éxito, reconoció Mas, en la medida de que los 20.000 voluntarios con los que se contaba y la población respondan. Se prevé que “todas las personas de 16 años o más podrán votar”.

El nuevo 9-N, ha dicho claramente, “no puede ser visto como una consulta definitiva”.

MAS: “GOBIERNO CATALÁN ES HOY MÁS DÉBIL”

El ‘president’ admitió, sin citar a ERC, CUP y IC-V,  que tras la cumbre de ayer lunes se ha roto el consenso entre los partidos favorables al derecho a decidir. La nueva propuesta para el 9 de noviembre es “responsabilidad del gobierno”, una más de las “muchas que asumimos solos”, ha dicho Mas. “Constatamos que no hay el mismo consenso político, es evidente”.

“El ‘govern’ es hoy más débil” ha reconocido: “Estamos más solos que ayer a la tarde”. Más allá de los partidos, el gobierno catalán tampoco sabe aún si la ANC y Ómnium (los organizadores de las grandes manifestaciones a favor de la independencia de los últimos años) apoyará el nuevo planteamiento. “No puedo hablar en nombre de nadie, pero espero la máxima colaboración de todos los que quieren que esta consulta se haga, y se haga en condiciones”.

PRÓXIMO PASO: ELECCIONES PLEBISCITARIAS

Más allá de la celebración de un 9-N reivindicativo, en el que los votos no tendrán validez legal, el ‘president’ recupera ahora la salida política de unas elecciones plebiscitarias “con lista conjunta y programa unificado” entre todos los favorables a la independencia de Cataluña, frente a un bloque de los contrarios. “Unas elecciones ordinarias” en Cataluña con la independencia sobre la mesa es “lo que más temerían en Madrid”, ha dicho.

“Un referéndum se puede hacer de varias formas”, añadía, y “si la lista a favor de la independencia gana, se ha ganado el referéndum”.

DESCARTA DECLARACIÓN UNLITERAL DE INPENDENCIA

El líder de CiU ha descartado la Declaración Unilateral de Independencia (conocida como DUI) que propone en estos momentos el líder de ERC, Oriol Junqueras. “En un país serio no se haría una declaración unilateral de independencia si no hay antes un referéndum”. Mas dijo que el “proceso de transición nacional” tiene que poder ser visto como “creíble a nivel internacional”.

En varios momentos de su discurso y de sus respuestas a los periodistas, ha insistido en una idea: “El único adversario es el estado español”, ha dicho. Preguntado por la relación entre los gobiernos de España y de Cataluña, ha dicho: “Cuando alguien te agrede como te agrede, no sé si hay relación (…) Estamos actuando en legítima defensa”.

Mas ha lamentado que el gobierno español no responda, a su modo de ver, como los gobiernos de Canadá (en las votaciones en el Québec) y de Escocia.

“Tenemos voluntad de hablar, no sé si el gobierno de España piensa tomar alguna iniciativa ante un gran problema de estado como tienen en Cataluña. Imagino que volverán a dar por liquidado el problema. Pueden pensar que todo se ha acabado, pero no es verdad, todo esto sigue. Estoy esperando aun que el gobierno diga alguna cosa positiva o haga una propuesta”.

¿FUTURO REFERÉNDUM? TIENE QUE SER LEGAL

Fialmente, el presidente ha insistido en que el referéndum en Cataluña tiene que ser legal. “Imagínense que usamos un registro de población, protegido por la ley de datos, y ponemos nombres de personas que no quieren aparecer. ¿Usted se imagina que unos cuantos miles de personas actuando legalmente contra su gobierno? Sería un ridículo internacional terrible, que no serviría nada”. En este sentido, el 9 de noviembre, “el registro se hará al mismo momento, cuando las personas vayan a las urnas con su DNI, y solo se registrará las personas que quieran”.

Sobre poner en riesgo a trabajadores de la Generalitat, si se actuara contra la ley organizando una consulta suspendida, Mas ha insistido en que “el gobierno de Catalunya no pondrá la pistola al pecho de los funcionarios”.

“El país [en referencia a Cataluña] tiene que poder decidir su futuro, sea cual sea su futuro. Sea uno u otro. Los resultados no están nunca escritos antes. Se escriben el día de la votación”, ha concluido.

PRIMERA REACCIÓN DEL PP Y PSOE

Inmeditamente después de la comparecencia, el portavoz del PP en el Congreso, Alfonso Alonso, ha reprochado al presidente de la Generalitat, Artur Mas, que haya caído en el "esperpento" y se haya convertido en un "presidente en fraude de ley" que, además, sabe perfectamente que no habrá ningún referéndum el 9 de noviembre, "lo llame como lo llame".

Pedro Sánchez, secretario general del PSOE, por su parte, ha advertido a Artur Mas, de que "no puede continuar engañando a la sociedad catalana porque genera frustración y fractura". También ha pedido al jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, "una solución política a un problema político".

ERC PIDE DECLARACIÓN DE INDEPENDENCIA

Ayer, ERC lamentaba la que considera que es una “renuncia” del Gobierno de Cataluña a la consulta soberanista, un escenario que aboca, a su juicio, a un sólo camino; a que “el Parlament haga una declaración de independencia inmediata y se abra un proceso constituyente”.

Al finalizar la cumbre, ERC expresaba su decepción: “En ningún caso este proceso participativo sustituye la consulta. Por ello, ante la imposibilidad de hacerla por la oposición del Gobierno español y la renuncia del gobierno catalán, advertimos de que sólo hay un camino: un Parlament que haga una Declaración de Independencia inmediata y la apertura de un proceso constituyente”.