Protestante Digital navega en mar abierto

Aún le faltan algunos aspectos importantes de novedades que deben salir a la luz en breve, pero ya se ha actualizado y puesto a la vista la casi totalidad de lo que era el “antiguo” Protestante Digital. La última sección importante fue la de los boletines de noticias por email que han comenzado a funcionar hace pocos días.

Cuando esté en pleno funcionamiento les iremos dando datos, pero podemos decirles que son totalmente satisfactorios. Pero lo que queremos relatarles hoy es un análisis somero de dos aspectos del nuevo Protestante Digital que manifiestan este salto cualitativo.

DEFENSOR DEL LECTOR
Por un lado, está la propia dinámica de la revista, que está aumentando alcance en su difusión e imagen. Nos relata Daniel Pujol Fernández, Defensor del Lector, que “Lo que más puede satisfacer a un medio de comunicación es saber que sus contenidos son leídos por muchos lectores, la mayoría de los cuales permanece en el anonimato. Con todo, somos conscientes de que lo que se publica puede tener una apreciación diversa, por la mayor o menor afinidad que el lector encuentre en lo publicado con sus ideas. Puede darse incluso el caso de que discrepe con lo escrito. Tanto en un caso como en el otro, el lector tiene la opción de expresarse libre y correctamente en la sección de Comentarios.

Nuestro compromiso con la verdad y la excelencia nos obliga a ser muy cuidadosos con lo que se publica. Más difícil es cuando se trata de los comentarios que los lectores remiten, lo cual tampoco es que nos sirva de excusa. Eso es precisamente lo que sucedió con la noticia “Chile: diputados de la oposición apoyan demandas de los evangélicos”, en la que una Carta enviada y publicada bajo el nombre de la Oficina de Asuntos Religiosos de Chile” era de alguien ajeno a la misma. La lección nos sirve para que cuando se trata de nombres de personajes públicos, cargos o instituciones debamos comprobar antes la veracidad de que quien escribe es realmente quien dice ser.

Además de la cortesía y comprensión de la Oficina de Asuntos Religiosos del Gobierno de Chile, que llegó a llamarnos a nuestra oficina en Barcelona para rectificar el contenido de la carta, nos honra también constatar que nuestra publicación es leída incluso en lejanas latitudes, incluyendo hasta las cartas de los lectores (lo que indica, dicho sea de paso, la importancia de las mismas). Hemos establecido posteriormente una fluida relación con el Gobierno chileno, y estas situaciones son sin duda la parte gratificante de este trabajo”.

CONSEJO DE REDACCIÓN
Por otro lado, quizás se hayan percatado del cada vez mayor número de noticias propias que publicamos. Está ya cerca del 40% del contenido de la revista; y además creemos que es no sólo de actualidad, sino también de calidad y buscando perspectivas nuevas, originales, fuera de la rutina y con mayor cobertura informativa desde que pasamos a ser un diario online.

Por ello el segundo aspecto que queremos comentar es la elaboración de las noticias; tanto en la elección de las temas de las mismas, como en la forma de enfocarlas y construirlas. Esta dimensión profesional ha cambiado por completo en el nuevo Protestante Digital.

En la nueva etapa se ha creado un Consejo de Redacción, formado por Pedro Tarquis (como director), con los redactores Verónica Rossato, Daniel Hofkamp y Joel Forster, todos ellos periodistas de titulación y profesión. Cada lunes por la noche en España (en la tarde Argentina para Vero)skype une Barcelona, Galicia y Madrid con el continente Sudamericano para abordar la actualidad, analizarla, proponer temas informativos de trabajo de la semana, tratando las circunstancias que van ocurriendo, y ayudar en las ideas que surgen de unos y otros.

Les podemos asegurar que sin las aportaciones de todas y cada una de las personas que participan en este Consejo de Redacción el diario nunca habría alcanzado la mejora actual en su contenido.

Por ello, queremos que conozcan tengan constancia de esta labor que pasa desapercibida (como muchas otras) pero que son fundamentales para la buena marcha del proyecto que representamos. Y, a la vez, son un ejemplo de algunos de los muchos cambios que estamos experimentando y llevando adelante.