Consejos prácticos para ser parte de la “ÉLITE”

1- Procura siempre mostrar a la gente que estás BIEN.

2- Si eres líder o del grupo élite nunca cuentes tus debilidades a nadie ni las muestres, ante todo da la impresión de que vives inmerso en un halo de santidad y perfección, que vean lo que vales y que eres de una casta distinta. Se hermético de tal manera que la gente no se atreva a preguntarte nada sobre tu vida.

3- No hables ni te rías demasiado alto o fuerte. No querrás que el resto de la gente piense que eres un payaso o alguien poco espiritual, de forma que no te respeten o no te tomen nunca en serio.

4- Se callado, habla poco, y si lo haces usa siempre una voz suavecita y dulce (especialmente si eres mujer) y procura mostrar que no tienes mucha seguridad en realidad, que eres fácilmente manipulable (aunque no lo seas, eso no importa, lo que importa es la apariencia que muestres a la gente, recuérdalo siempre). Ya sabes que si no hablas así es porque eres rebelde, orgulloso y tienes el “espíritu de Jezabel” y así no ascenderás nada ni lograrás la aprobación del “grupo élite” sino que, por el contrario, estarás siempre “bajo sospecha”.

5- No digas lo que piensas ni lleves la contraria a ningún líder o a nadie del “grupo élite” no sea que quedes relegado al ostracismo en la comunidad. Tiene que parecer que todo te parece estupendo y maravilloso, no digas otras opiniones o dirán que das problemas y eso no te conviene...

6- Ahórrate problemas y haz la pelota todo lo que puedas, admira y alaba al grupo élite, hazles favores... Muéstrate una persona confiable y que nunca les contradecirás en nada. Procura quedar bien con ellos y sus familias, y con todos aquellos que te puedan hacer algún favor o beneficio en el tiempo presente. Ascenderás rápido, aunque recuerda que sólo te dejarán llegar hasta un punto.

7- Haz algunas buenas obras para gente necesitada o de servicio a la comunidad, pero procura que te vean hacerlo o se enteren los más posibles de ello, para que sea de conocimiento de todos, si no te ven, nunca lo sabrán, y no te servirá para ganar prestigio ante la comunidad.

8- No dudes en usar todos los medios de comunicación posibles para dar a conocer tus éxitos (bueno mejor pon los “éxitos de Dios” (con perdón, mi intención no es usar su Nombre en vano).Pero también pon tu nombre al lado para que la gente pueda alabarte un poco a ti también, no dudes en usar todo tipo de redes sociales para ello, como Facebook o Twitter. Y utiliza el lenguaje adecuado para ello, palabras sagradas que sabes que darán una impresión de que vives a otro nivel.

9- No profundices mucho en los temas de conversación, ni en las amistades, mantén un trato superficial. No sea que te metas demasiado y te encuentres con algún roce con alguna persona, o a alguien le moleste si le preguntas o comentas algo íntimo. Ser superficial te asegura el llevarte siempre más o menos bien con todos sin entrar en situaciones violentas y te muestra como una persona fácil de tratar. “La procesión va por dentro” y dentro se tiene que quedar, no compartas tu interior.

10- Tienes que aprender rápido a seleccionar a la gente de la comunidad, hay algunos con los que no debes pasar tu tiempo ni asociarte con ellos, no son de la élite, no pierdas el tiempo, puedes ignorarles al igual que la élite les ignora, pero NUNCA lo reconozcas públicamente!!. En realidad cada miembro tiene sus etiquetas, seguro que pronto las verás, pero ten cuidado que a ti te pondrán una también, así que intenta que sea una que te beneficie aunque tengas que disimular tus defectos para conseguirlo... Créeme, puedes durar años y años disimulando y ningún miembro lo sabrá y al final habrás conseguido que todos estén convencidos de que tú eres lo que aparentas ser, pero no bajes la guardia.

11- No olvides dar la impresión de que estás por encima de todos (no de la élite, ¡ojo!): que eres más inteligente, más íntegro, más maduro y más todo que ellos.

12- Asegúrate tu puesto y hazte necesario para la élite, así no se podrán deshacer de ti tan fácilmente.

“El príncipe necesita recordar solamente que, aunque no es necesario poseer todas las cualidades generalmente consideradas como buenas, es «muy necesario aparentar tenerlas». Bueno es que se le considere generoso; es sensato el parecer misericordioso y no cruel; es esencial en general ser «considerado como persona de grandes méritos». La solución consiste en llegar a ser «un gran simulador y un gran disimulador», aprendiendo «a confundir las cabezas de los hombres con patrañas» y hacer que se crean vuestros engaños.” - Maquiavelo

(“Maquiavelo” - Q. Skinner. Anotaciones de “El Príncipe”)

“Pero yo os digo: amad a vuestros enemigos y orad por los que os persiguen, para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos; porque El hace salir su sol sobre malos y buenos, y llover sobre justos e injustos. Porque si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa tenéis? ¿No hacen también lo mismo los recaudadores de impuestos? Y si saludáis solamente a vuestros hermanos, ¿qué hacéis más que otros? ¿No hacen también lo mismo los publicanos? Por tanto, sed vosotros perfectos como vuestro Padre celestial es perfecto.” - Jesús de Nazaret

(Mateo cáp. 5 vs. 44-48 - La Biblia)

“Amémonos los unos a los otros, porque el amor viene de Dios, y todo el que ama ha nacido de Él y lo conoce. El que no ama no conoce a Dios, porque Dios es amor (...) En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó y envió a su Hijo para que fuera ofrecido como sacrificio para perdonar nuestra maldad (...) Nadie ha visto jamás a Dios, pero si nos amamos los unos a los otros, Dios permanece entre nosotros, y entre nosotros su amor se ha manifestado plenamente” - La Biblia

(1ª Juan cáp. 4 vs. 7-8,10, 12 - La Biblia)

Y nosotros, ¿A quién nos estamos intentando parecer?.