‘Nada cambiará’, episcopales desafían a la Comunión anglicana

La Iglesia Episcopal de Estados Unidos ha dicho que no va a cambiar su posición favorable sobre el matrimonio homosexual en el seno de la iglesia a pesar de la sanción que por este motivo le impuso la Comunión Anglicana.

"Nada de lo que los Primados han dicho va a cambiar la actividad de nuestra Convención General que en los últimos cuatro decenios nos ha llevado hacia la plena inclusión y la igualdad del matrimonio homosexual", expresó en un comunicado.

La Iglesia Episcopal ha sido suspendida de la plena participación en la Comunión Anglicana durante tres años después de una reunión de los Primados en Canterbury. Una decisión que sucedió después de que la Iglesia Episcopal Estados Unidos formalizó su postura de aprobar que se realizasen matrimonios del mismo sexo en la misma condición que el matrimonio tradicional desde julio del año pasado.

La decisión de los primados supone que no se permitirá a la Iglesia Episcopal participar en comités de toma de decisiones o debatir en cuestiones de doctrina.

Pero los episcopales han respondido de manera desafiante contra la disciplina recibida y dice que continuará asistiendo de forma plena en el Consejo Consultivo Anglicano, el organismo mundial de obispos, clérigos y laicos que facilita el trabajo cooperativo de las iglesias de la Comunión Anglicana.

"A pesar de la votación de los Primados, nosotros los episcopales continuaremos trabajando con los anglicanos en todo el mundo para alimentar a los hambrientos, cuidar a los enfermos, educar a los niños, y sanar el mundo” añaden.

Clark Jennings, presidente de la Cámara de Diputados de la Iglesia Episcopal ha declarado que tiene la intención de asistir a la próxima reunión en Zambia con la intención de "participar plenamente".

ACUSACIONES DE “HOMOFOBIA”

Clark Jennings ha declarado: "Esta noticia puede ser dolorosa para algunos de nosotros, sobre todo para las personas LGBT que han sido excluidas con demasiada frecuencia y durante demasiado tiempo por las familias, iglesias, escuelas, y otras instituciones sumidas en la homofobia”.

Y agregó: "Las personas más propensas a sufrir de esta noticia son fieles anglicanos LGBTI y sus aliados, especialmente en África.

"Cuento con muchos de ellos como mis amigos y colegas, y hoy me siento especialmente orando para que este nuevo mensaje de exclusión no alimentar más odio y la homofobia y los hace aún más vulnerables a la violencia y la discriminación de lo que ya son."

El arzobispo de Canterbury ya preveía las acusaciones de homofobia y expresó su dolor y respeto a los cristianos LGBTI en una conferencia de prensa posterior a la reunión de los Primados anglicanos, sin retractarse de la decisión y postura tomadas.

Justin Welby dijo además que él y la Comunión anglicana, al margen de la decisión tomada, consideran que es una "fuente constante de profunda tristeza que las personas sean perseguidas por su sexualidad."