Niños acelerados, descentrados y descontrolados

A veces se ven incapaces, aturdidas, viven en una tensión familiar constante que, en ocasiones, degenera en depresiones. Y el sentimiento de culpa. Una de esas madres cuenta como el niño comenzó a desafiarles, a no obedecer ni escuchar... la gente lo primero que piensa es que es un niño muy mal educado..

SÍNTOMAS
Para seguir indagando en la búsqueda de soluciones a este síndrome, tuvo lugar en Madrid el Congreso 2008 sobre el Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH). Más de un millar de médicos, psicólogos, padres y educadores debatirán sobre un trastorno que sufre entre el 4 y el 5% de la población infantil y una media de dos alumnos por cada aula durante los cursos de educación primaria, según el doctor Alberto Fernández Jaén, neuropediatra del Hospital La Zarzuela, de Madrid, y miembro del comité científico del Congreso.

Los síntomas esenciales de este síndrome son la hiperactividad, la impulsividad y los problemas de atención, situaciones que con acentuada intensidad repercuten en el entorno escolar, social y familiar. Los niños afectados siempre están en movimiento, son olvidadizos, se distraen con mucha facilidad y con frecuencia pierden el interés por lo que están haciendo.

El trastorno de estos niños reside en que padecen una alteración a nivel del sistema nervioso central y, según algunos expertos, tiene un origen fuerte en los genes.

La hiperactividad es cuatro veces más frecuente en los niños que en las niñas. El desorden acarrea importantes secuelas al niño, ya que se ve abocado al fracaso escolar y a una frecuente mala relación con sus compañeros.

DIAGNÓSTICO DESDE PRIMARIA
Las investigaciones más recientes indican que los niños con TDAH tienen un volumen cerebral menor. El diagnóstico entre los cuatro y los seis años de edad es arriesgad, según el doctor Jaén, que se muestra más proclive a efectuar un diagnóstico más certero a partir de los seis años.

Tanto el neurólogo infantil como Teresa Moras, presidenta de ANSHDA (Asociación de Niños con Hiperactividad y Déficit de Atención) demandan la creación de la psiquiatría infantil como especialidad médica concreta para tratar a estos menores.

TRATAMIENTO CON FÁRMACOS
Este trastorno sigue siendo un "gran desconocido", motivo por el que no todos los pacientes afectados reciben un diagnóstico y tratamiento adecuados.

España, de momento, el tratamiento con eficacia demostrada en más de 2.000 chicos es el farmacológico, aunque es trascendental dar a la primera con el tratamiento idóneo.

El tratamiento con fármacos es imprescindible en siete de cada diez niños. Aunque hay otras alternativas farmacológicas, el tratamiento habitual es mediante psicoestimulantes, que mejoran la liberación de noradrenalina y dopamina.

NEURÓLOGOS, PSICÓLOGOS, PROFESORES...
Los padres que viven esta situación coinciden en la escasez de especialistas y en la falta de formación adecuada por parte de los profesores ante lo que consideran necesidades educativas especiales.