Al final hay muchas luces de colores. Un último gran fuego artificial. Zumban ante los ojos, azules, rosas, morados, amarillos. Un cóctel de noradrenalina, serotonina, dopamina. Y de repente, silencio. Se hace la oscuridad. Así es morir, dice la ciencia.

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La puerta se abre y sales a la luz. No en el reino celestial, por supuesto. Sólo a la habitación contigua, un pasillo blanco.

[photo_footer] La muestra incluye la manera de afrontar la muerte por parte de diferentes cosmovisiones religiosas. / RFK Architects, Tom Piper, Stiftung Humboldt Forum im Berliner Schloss, Alexander Schippel.[/photo_footer]

Esto es lo que sienten los visitantes de la exposición “un_endlich. Vivir con la muerte”, en el Foro Humboldt de Berlín. Hasta mediados de noviembre, no sólo pueden experimentar su propia muerte aquí, en el corazón de la capital alemana, sino también ver, leer, oír y reflexionar sobre todo tipo de cosas fascinantes sobre el final.

La fe a la vista

El recorrido comienza con una mirada a las religiones del mundo. En varias carpas, musulmanes, cristianos, hindúes o incluso agnósticos, como el biólogo criminalista Mark Benecke, hablan acústicamente de la vida después de la muerte tal y como ellos la imaginan. O no imaginada. Para Jasmin El-Manhy, sacerdote de la Samariterkirche de Berlín-Friedrichshain, hay consuelo y apoyo en la despedida. Y la esperanza de la resurrección, que se encuentra en la historia bíblica de la Pascua.

Una sala, blanca y forrada de telas semitransparentes, invita a descansar en tumbonas de bienestar. Con la ayuda de auriculares, la gente, echada, aborda a continuación cuestiones sobre la vida y la muerte: ¿Ha pensado alguna vez en su propio funeral? ¿Cree en la vida después de la muerte? ¿Existe la buena muerte? Las respuestas, “sí” o “no”, se recogen, evalúan y pueden verse en porcentajes en el transcurso posterior de la exposición.

[photo_footer]La sala de tumbonas donde meditar acerca de la muerte. / Architects, Tom Piper, Stiftung Humboldt Forum im Berliner Schloss, Alexander Schippel.[/photo_footer]

Una videoconferencia editada conjuntamente, la “Conferencia de Morir”, proporciona información sobre el proceso de morir. Muestra a personas de todo el mundo que se ocupan del tema en su función. Una enfermera de un hospicio, un acompañante de moribundos o un monje hablan de cómo el cuerpo de una persona que está a punto de morir se siente diferente al de una persona sana. Cuáles son los últimos deseos de los moribundos. Y cómo suenan los últimos alientos.

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Entierro según las normas oficiales

El corazón del “tanatorio” es una mesa de autopsias, convertida en una especie de televisor. En su superficie se proyecta una película. Por un lado, muestra un ritual islámico de lavado del cadáver; por otro, un entierro según las normas DIN (las normas técnicas utilizadas en Alemania para llevar a cabo el control de calidad de los productos industriales y científicos), tal y como lo realizan las funerarias laicas.

[photo_footer]La sala del 'tanatorio' ofrece una explicación sobre las diferentes formas en las que se prepara al muerto para su entierro. / RFK Architects, Tom Piper, Stiftung Humboldt Forum im Berliner Schloss, Alexander Schippel.[/photo_footer] 

Sin embargo, nadie llega a ver el cadáver en sí; los paños y las abluciones sólo insinúan que podría haber un cadáver allí tendido. Mostrarlo sería probablemente demasiado, incluso para una exposición dedicada por entero al final de la vida.

Pero la exposición no se detiene en la transitoriedad del individuo. Gráficos y mapas sinópticos ofrecen información sobre las causas de muerte más comunes en todo el mundo, las edades medias de fallecimiento e incluso la extinción de especies en todo el mundo.

¿Una esperanza por delante?

Una de las últimas salas de esta exposición condenada al fracaso parece una sección de un museo de historia natural. Cilindros de líquido conservante muestran especies extinguidas y en peligro de extinción, como el murciélago gris ahumado de la fruta o el pangolín javanés. Los numerosos recipientes vacíos deben entenderse como un recordatorio: pronto se llenarán si no cambiamos nuestro modo de vida.

[photo_footer]La exposición puede visitarse hasta noviembre. / RFK Architects, Tom Piper, Stiftung Humboldt Forum im Berliner Schloss, Alexander Schippel.[/photo_footer]

“Un_endlich” es una impresionante exposición que recuerda al teatro. Como si estuviera dividida en diferentes actos, el visitante se acerca primero a su propia muerte, para luego dar un paso atrás y contemplar el mundo.

Recorrer las salas es como una experiencia meditativa que tiene especial relevancia para los cristianos en tiempo de Pascua, el tiempo de la vida, la muerte y la resurrección.

Este artículo fue publicado por primera vez en alemán por Pro Medien Magazin, y traducido después con permiso.

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[title]El arte redescubre la muerte[/title]

[text]La muerte como tema de debate artístico y mediático está de moda. Esto puede deberse a la forma en que cada uno de nosotros se enfrenta actualmente al reto de afrontarla. La guerra y las pandemias nos la han acercado en Occidente más de lo que ha estado en mucho tiempo. Y los políticos alemanes han tenido que atormentarse durante meses con la cuestión de cómo encontrar una nueva regulación de la eutanasia.

Al parecer, existe un ansia de conocimiento, un anhelo de desarrollar un sentido de lo inevitable. La cadena alemana RTL fue noticia hace poco con un documental sin precedentes titulado Morir para principiantes, por citar sólo un ejemplo.

Ahora llega la exposición del Foro Humboldt. No será la última de este tipo.[/text]

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