domingo, 24 de noviembre de 2024   inicia sesión o regístrate
 
Protestante Digital

 
 

El periodista y el mar

Velero Santiago
Islas Cayman
A unos 240 kilómetros de Cuba
6 de mayo

Conocí a Javier Belano, originario de Florida en primer lugar, viajero incansable en segundo puesto de la lista, y periodista por último, el día 1 de este mes dichoso, cuando superaba una nueva fiebre que me incapacitaba para salir de Haití, y yo salí a la terraza del lugar donde me hospedaba, una pequeña pensión cuyo único atractivo eran sus preciosas vistas al
TIERRAS AUTOR Daniel Jándula 10 DE MAYO DE 2008 22:00 h

Siempre permanecía asomado a su balcón, el contiguo al mío, como si en realidad sólo tuviese alquilada esa parte de la habitación, y se inclinaba sobre él como si pudiera caerse en cualquier momento; se anclaba con sus manos largas y pálidas al hierro caliente como recién forjado. Recuerdo haberme preguntado si no estaría soldado él mismo a la estructura. Cosas de la fiebre tropical. Al tercer día de intercambiar comentarios vacíos sobre el mar y la tranquilidad perenne de los habitantes, entendimos que nos esperaba a ambos, y que cada uno, sin llegar nunca a contar toda la verdad sobre el motivo de su estancia en la isla, tenía que partir cuanto antes. De modo que brindamos, él con ron y yo con agua de coco, desde nuestros respectivos y curiosos muelles. El mío cuenta con una sábana que uso para cubrirme y secarme el sudor tibio.

El Diario de La Marina se agita en un rincón del velero de un mástil de Javier, abierto por el resultado de un partido de béisbol de hace dos meses. A un lado Jamaica nos llama, pero ya hemos dejado atrás Guantánamo y Cabo Cruz, y sería injusto desviar el rumbo ahora. Nos detendremos en Cayman Bruc, porque Javier dice que ningún ser vivo puede afirmar que ha viajado por el mundo sin sentirse pequeño delante del Bluff, un altísimo acantilado que separa a los que rondamos la isla de su interior, un casi inaccesible paraíso fiscal. Estamos en un barco viejo que se mueve peligrosamente sobre olas impetuosas repletas de sal que no dudarán en disolvernos a la más mínima oportunidad; sin embargo, qué situación tan distinta a la que vive el viejo de la novela de Hemingway, de la que Javier es un gran admirador, a juzgar por los volúmenes que conserva en su querido Santiago, todos ediciones distintas de la novela que escribió Ernest en Cuba hace cincuenta años. Desde luego, que no parece este el mismo barco de la novela: es bastante más pequeño de lo que uno se imagina. Con todo, Javier lo gobierna y conoce como si ambos estuviesen hechos de la misma madera castigada y quejicosa. Con una mano dirige el timonel, mientras que con la otra muerde su hamburguesa austera de la que sobresale de cuando en cuando una rodaja de piña.

- ¿Qué tal? – me pregunta a veces – Es bonito el mar, ¿verdad?
- Sí, “dulce y hermoso” – respondo para poner un poco más a prueba sus conocimientos sobre la novela. Por ahora, ha repetido unas tres frases del libro, que yo haya detectado.
- Dulce y hermoso… - repite, ausente. Señala hacia la proa – Nubes de tormenta… se mueven rápido… va a dolernos muchacho…

Sobresaliente. Ha leído tantas veces la historia, que ya la está reescribiendo con su vida y sus pensamientos. Ojalá supiera hacer yo lo mismo con la Biblia. Se concentra, y el acantilado cada vez está más cerca. Sus otras frases robadas del libro son: “es bueno que no tengamos que tratar de matar el sol o la luna o las estrellas. Basta con vivir del mar y matar a nuestros verdaderos hermanos”, "el hombre no está hecho para la derrota. Un hombre puede ser destruido, pero no derrotado", y “Tal vez yo no debería ser pescador, pero para eso he nacido”… nos movemos como si el mar quisiera borrarnos del mundo, y yo trato de agarrarme con todas mis fuerzas al mástil. Nos embiste con furia a derecha e izquierda. Vomito lo que he tomado en los últimos tres días, pero no puedo soltarme. Fue lo primero que me advirtió Javier: “no te sueltes”. El primero, y por ahora el único, consejo propio que este loco soñador me endosó. Llegamos a la costa, muy cerca del acantilado, justo cuando arranca la lluvia fría e intensa. A los diez minutos, Javier me confiesa que hemos sorteado unas rocas afiladas como cuchillos gracias a la luz tenue del atardecer. No quería decírmelo para no asustarme más de lo que ya estaba. Vuelvo a vomitar. Algas y agua marina. Me pone la mano en el hombro empapado. Echamos ancla y esperamos en silencio a que pase la cortina de agua. Escuchamos la lluvia. Después escuchamos unos rayos. Después sentimos el frío, la sed, los relámpagos. Tintinea suavemente la campana atada al mástil. Cruje la quilla. Las nubes se alejan en una formación de color carmesí que se asemeja a una sábana de seda, frágil, impotente ante los rayos de sol, tangenciales y débiles por la hora del día en que nos encontramos.

- El mar es dulce y hermoso – asiente Javier – pero puede ser cruel – sonríe.

Estornudo. El aire corre limpio, y la claridad es insuficiente. Seguro que nadie puede intuir desde la costa que acabamos de luchar a muerte contra la naturaleza, y que el Dios del acantilado y de las mareas, de las entrañas de la tierra y de todo ser viviente, del día que muere y la noche que sembrará plata por todas partes, nos ha librado una vez más antes incluso de haber sentido que debíamos pedirlo. Unas manchas de tonos marrones de distintos tamaños se mueven nerviosas alrededor de la embarcación.

- Son rayas – aclara Javier –. Se van a dormir. Son muy curiosas.
 

VALORA EL ARTÍCULO (0)











 


0
COMENTARIOS

    Si quieres comentar o

 



 
 
ESTAS EN: - - - El periodista y el mar
 
 
AUDIOS Audios
 
La década en resumen: teología, con José Hutter La década en resumen: teología, con José Hutter

La conmemoración de la Reforma, las tensiones en torno a la interpretación bíblica de la sexualidad o el crecimiento de las iglesias en Asia o África son algunos de los temas de la década que analizamos.

 
Intervalos: Disfruten de la luz Intervalos: Disfruten de la luz

Estudiamos el fenómeno de la luz partiendo de varios detalles del milagro de la vista en Marcos 8:24, en el que Jesús nos ayuda a comprender nuestra necesidad de ver la realidad claramente.

 
2020, año del Brexit 2020, año del Brexit

Causas del triunfo de Boris Johnson y del Brexit; y sus consecuencias para la Unión Europea y la agenda globalista. Una entrevista a César Vidal.

 
7 Días 1x08: Irak, aborto el LatAm y el evangelio en el trabajo 7 Días 1x08: Irak, aborto el LatAm y el evangelio en el trabajo

Analizamos las noticias más relevantes de la semana.

 
FOTOS Fotos
 
Min19: Infancia, familia e iglesias Min19: Infancia, familia e iglesias

Algunas imágenes del primer congreso protestante sobre ministerios con la infancia y la familia, celebrado en Madrid.

 
X Encuentro de Literatura Cristiana X Encuentro de Literatura Cristiana

Algunas fotos de la entrega del Premio Jorge Borrow 2019 y de este encuentro de referencia, celebrado el sábado en la Facultad de Filología y en el Ayuntamiento de Salamanca. Fotos de MGala.

 
Idea2019, en fotos Idea2019, en fotos

Instantáneas del fin de semana de la Alianza Evangélica Española en Murcia, donde se desarrolló el programa con el lema ‘El poder transformador de lo pequeño’.

 
VÍDEOS Vídeos
 
Héroes: un padre extraordinario Héroes: un padre extraordinario

José era alguien de una gran lealtad, la cual demostró con su actitud y acciones.

 
Programa especial de Navidad en TVE Programa especial de Navidad en TVE

Celebración de Navidad evangélica, desde la Iglesia Evangélica Bautista Buen Pastor, en Madrid.

 
Primer Congreso sobre infancia y familia, primera ponencia Primer Congreso sobre infancia y familia, primera ponencia

Madrid acoge el min19, donde ministerios evangélicos de toda España conversan sobre los desafíos de la infancia en el mundo actual.

 
 
Síguenos en Ivoox
Síguenos en YouTube y en Vimeo
 
 
RECOMENDACIONES
 
PATROCINADORES
 

 
AEE
PROTESTANTE DIGITAL FORMA PARTE DE LA: Alianza Evangélica Española
MIEMBRO DE: Evangelical European Alliance (EEA) y World Evangelical Alliance (WEA)
 

Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.