40 curiosidades sobre la historia del cristianismo (2)

La semana pasada salieron las primeras 20 curiosidades; vamos con la segunda parte:

21. Durante casi cuarenta años, hubo más de un papa en simultáneo. Siete pontífices gobernaron desde Aviñón, en Francia, hasta que en 1377, Gregorio XI trasladó su corte nuevamente a Roma. Pero murió al año siguiente y fue reemplazado por Urbano VI, al que no todos lo aceptaron. Así que Clemente VII, el primer antipapa, fue elegido para gobernar desde Aviñón. La cosa se complicó cuando en 1409 quisieron resolver la disputa destituyendo a los dos papas, el de Roma y el de Aviñón, y nombrando a un tercero, Alejandro V, en la ciudad de Pisa. Pero más que una solución, la cosa trajo aún más problemas. Finalmente, el Cisma de Occidente concluyó en 1417 con la destitución de los 3 papas y la elección de Martín V.

22. Le debemos el uso de minúsculas a un teólogo y sacerdote anglosajón. Otro personaje fascinante de la historia cristiana es Alcuino de York, un religioso de la orden de San Benito que vivió en el siglo VIII. Carlomagno lo convocó para que dirigiera una reforma educativa muy influyente, que conocemos con el nombre de Renacimiento carolingio. El sacerdote Alcuino escribió comentarios bíblicos, hizo una revisión de la Biblia Vulgata y es considerado el primer ministro de Educación de la historia. Fue además uno de los promotores de la minúscula carolingia, una nueva tipografía, más pequeña y redondeada, que al combinarse con las mayúsculas romanas puso las bases de nuestro actual sistema de escritura.

23. Uno de los episodios más sangrientos de la historia cristiana sucedió el 22 de julio de 1209 en Béziers, en la actual Francia. La masacre fue parte de una cruzada contra la secta de los cátaros. En el poblado de Béziers había algunos herejes, pero también muchos creyentes fieles; los soldados enviados por el papa Inocencio III estaban por atacar, pero no sabían cómo reconocer a los cátaros. Entonces el comandante les dijo una frase brutal que pasaría a la historia: «Mátenlos a todos. Dios reconocerá a los suyos».

24. Pocas décadas después del desembarco de Colón, un fraile español se convirtió en uno de los primeros defensores de los Derechos Humanos en América. Al tomar conciencia de los abusos de los conquistadores, Fray Bartolomé de las Casas se dedicó a defender a los indígenas. Su obra Brevísima relación de la destrucción de las Indias es considerada el primer informe moderno sobre los Derechos Humanos, y su labor política y filosófica ayudó a establecer las bases del derecho internacional moderno. A diferencia de muchos contemporáneos, Las Casas creía que los indígenas eran seres racionales, con dignidad y derecho a la libertad. Curiosamente, al principio propuso resolver el problema de la colonia reemplazando a los indígenas con esclavos africanos, pero más tarde se retractó y afirmó que ambas formas de esclavitud eran igualmente injustas.

25. Uno de los primeros movimientos pacifistas a nivel global surgió por motivos religiosos. La práctica de suspender el combate durante ciertos períodos surgió hace casi un milenio. En el año 1027, el abad Odilón de Cluny logró un acuerdo en Francia conocido como La tregua de Dios. Los combates quedaban prohibidos desde el sábado a la noche al lunes por la mañana para no impedir el culto dominical; con el tiempo se sumarían épocas de tregua como adviento y cuaresma.

26. La Revolución francesa copió descaradamente al cristianismo. Los revolucionarios emprendieron un violento programa de descristianización que incluyó el ahogamiento de sacerdotes católicos y la destrucción de templos. Intentaron crear una religión patriótica que reemplazara al cristianismo. En vez del crucifijo, la bandera tricolor; en lugar de himnos religiosos, la Marsellesa; en lugar del altar sacerdotal, el altar de la patria. También cambiaron los nombres religiosos de calles y ciudades por nombres patrióticos, y si antes la iglesia anotaba los nacimientos, matrimonios y muertes, la Revolución creó el registro civil. El punto más alto de este esfuerzo fue el Festival de la Razón, celebrado el 10 de noviembre de 1793 en la catedral de Notre-Dame.

27. Martín Lutero no es el nombre original del reformador alemán. Su apellido original no era Luther, sino Luder. Sin embargo, después de una profunda experiencia espiritual, decidió cambiárselo por uno que hiciera justicia a un nueva identidad. Primero se hizo llamar Eleutherios, una palabra griega que significa “hombre libre”, pero no estaba muy convencido, así que después de unos meses, unió su antiguo y su nuevo apellido y creó uno nuevo: Luther, que en español se conoce como Lutero.

28. Y seguimos en tema. El nombre original del activista norteamericano no era Martin Luther King, sino Michael King. El cambio de su nombre sucedió cuando tenía 5 años, cuando su padre, que también se llamaba Michel King, viajó a Alemania en 1934. Durante esa visita quedó tan impactado por la historia y el legado de Martin Luther —en español: Martín Lutero— que decidió cambiar su nombre y el de su hijo. Desde entonces fueron conocidos como Martin Luther King; irónicamente, su hijo sería una especie de Lutero del siglo XX, que al igual que el monje alemán, desataría profundas reformas, reflexiones y transformaciones sociales.

29. Aunque Jesús y los primeros discípulos fueron todos judíos, el cristianismo ha sido muchas veces antijudío. Por lo general, el motivo fue más religioso que étnico. Desde comienzos de la Edad Media, la cristiandad europea hostigó y segregó a comunidades judías. Los ejemplos lamentablemente sobran, y se encuentran en diversas ramas del cristianismo: los caballeros de la primera cruzada en el siglo XI; las expulsiones forzadas de países como Inglaterra [1290], España [1492] o Portugal [1496]; las políticas antijudías que existieron tanto en la Reforma protestante como la Contrarreforma católica del siglo XVI; los pogromos en Ucrania bajo la mirada de la Iglesia ortodoxa; etc. Después de la Shoah de la Alemania nazi, muchas iglesias y cristianos del mundo han revisado su historia, se han arrepentido y han pedido perdón por los abusos del pasado.

30. En Inglaterra, a principios del siglo XIX, se lanzó un libro conocido como La Biblia de los esclavos. La Sociedad para la conversión de los esclavos negros publicó una versión de las Escrituras que quería evitar que los esclavos encontraran inspiración para rebelarse. Pocos años antes, un levantamiento de esclavos en Haití había desatado una revolución en la que habían muerto cientos de miles de personas; para evitar revueltas como esa, la Biblia de los esclavos reforzó pasajes que favorecían la obediencia y la humildad, pero eliminó secciones y libros enteros que podían fomentar la esperanza de libertad. Se calcula que aproximadamente un 90% del Antiguo Testamento y un 50% del Nuevo Testamento fueron quitados de esta versión mutilada de la Biblia.

31. Hay una extraña conexión entre Hernán Cortés y Martín Lutero. Entre el Edicto de Worms [25 de mayo de 1521] —que declaró enemigo del Imperio a Lutero— y la conquista de México-Tenochtitlan [13 de agosto de 1521] pasaron menos de 3 meses. En el imaginario católico de la época, América era un paraíso terrestre y Cortés no solo era un enviado de Dios, sino la contracara exacta de Lutero, a quien se representaba como una serpiente que había corrompido la cristiandad del Viejo Mundo. Según fray Jerónimo de Mendieta, el Nuevo Mundo era el premio que Dios daba a la Iglesia católica para compensar «la pérdida y daño grande que el maldito Lutero había de causar en la misma sazón y tiempo en la antigua cristiandad. De suerte que lo que por una parte se perdía, se cobrase por otra» [Historia eclesiástica indiana, 3.1].

32. La doctrina de la predestinación no siempre tuvo un lugar tan central en la teología calvinista. Aunque Juan Calvino introdujo el tema en la primera edición de la Institución de la religión cristiana de 1536, lo desarrolló de forma más detallada y sistemática recién en la tercera edición. La doctrina adquirió todavía más importancia bajo la influencia de Teodoro de Beza, el sucesor de Calvino en la ciudad de Ginebra. Algunos de los alumnos de Beza se opusieron a su énfasis en la predestinación; el más famoso de ellos fue Jacobo Arminio (y de ahí viene el asunto de los calvinistas y los arminianos).

33. Hubo un patriarca ortodoxo que intentó hacer una reforma calvinista. En 1620, Cirilo Lukaris se convirtió en patriarca ecuménico de Constantinopla, y trató de hacer una renovación profunda de la iglesia ortodoxa siguiendo las ideas de la Reforma protestante. Cirilo publicó una Confesión de fe con mucha influencia calvinista y patrocinó una traducción de la Biblia al griego moderno; también fue responsable de regalar el Códice Alejandrino —uno de los primeros y más completos manuscritos de la Biblia— al rey Carlos I de Inglaterra. Sus enemigos lo acusaron de traición y fue ejecutado en 1638.

34. Uno de los primeros abolicionistas de la era moderna fue un cristiano que medía un metro veinte. Benjamin Lay fue un cuáquero nacido en Inglaterra en 1682. Cuando viajó a Barbados, vio que un esclavo africano prefirió suicidarse antes que ser golpeado nuevamente por su dueño. Desde ese momento, comenzó a denunciar la esclavitud como un terrible pecado contra Dios; su activismo sembró en Occidente las ideas que llevarían progresivamente a la abolición de la esclavitud. Benjamin Lay no solo era conocido por su abolicionismo, sino también por su pobreza y su pequeña estatura, por ser un escritor prolífico, por ser vegetariano y también defender los derechos de los animales.

35. La iglesia ayudó a paliar la crisis humanitaria generada por la Revolución industrial. La industrialización de Inglaterra llevó a una rápida transformación social; los campesinos migraron en masa a ciudades que no tenían la infraestructura para recibirlos. Las condiciones de trabajo, vivienda, salud y educación eran pésimas, y el tejido social tradicional se hizo pedazos. Muchos cristianos lucharon activamente para reconstruir los lazos sociales y espirituales. El ejemplo de los metodistas inspiró a denominaciones protestantes —como el Ejército de salvación, las iglesias bautistas y los cuáqueros— a preocuparse no solo por la salud espiritual de las masas, sino también a liderar esfuerzos de ayuda humanitaria: alimento, educación, salud, albergue, trabajos, reforma carcelaria y la abolición de la esclavitud.

36. Aunque no es tan conocido como el de Azusa, en la misma época hubo otro gran avivamiento en América Latina. Los historiadores consideran el despertar de la calle Azusa en Los Angeles (1906-1915) como el catalizador más importante del movimiento pentecostal; pero no fue el único. En 1909 estalló otro avivamento en Chile. Willis Hoover Kurt era pastor de la Iglesia Metodista Episcopal de Valparaíso y durante años buscó una experiencia espiritual más profunda. Siguiendo ejemplos de todo el mundo —como Evan Roberts en Gales o Pandita Ramabai en la India—, el 12 de septiembre de 1909 finalmente experimentaron un avivamiento marcado por oraciones, glosolalia, sanidades y conversiones. Las autoridades de la denominación rechazaron el avivamento de Valparaíso, lo que motivó el nacimiento de la Iglesia Metodista Pentecostal de Chile.

37. El primer alimento y la primera bebida consumidos en la luna fueron el pan y el vino de la Cena del Señor. Buzz Aldrin fue uno de los astronautas de la Apolo 11, la nave que llegó a la luna en julio de 1969. Aldrin era anciano de la iglesia presbiteriana, y antes de su primera comida en la superficie lunar, hizo una breve ceremonia: tomó el pan y el vino, y leyó Juan 15:5: «Yo soy la vid y ustedes los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí ustedes nada pueden hacer».

38. Hitler y Tolkien se enfrentaron en el campo de batalla. El escenario más sangriento de la Primera Guerra Mundial fue la Batalla del Somme, en Francia, donde murieron más de un millón de soldados. Adolf Hitler sufrió una herida en la pierna defendiendo el lado alemán; su experiencia en la Primera Guerra Mundial influyó en su decisión de crear una ideología nacionalista que, en la práctica, funcionaba como una religión. Del lado inglés había un soldado profundamente cristiano: J. R. R. Tolkien, que se inspiró en esta batalla para crear Mordor, la tierra del mal en El Señor de los anillos. La escena de la Ciénaga de los Muertos está inspirada directamente en la batalla del Somme: «Hay cosas muertas, caras muertas en el agua».

39. Hubo cristianos a favor y en contra del nazismo. Con la llegada de Hitler al poder en 1933, hubo grupos que vieron en él a un enviado de Dios para restaurar la nación; estos defensores de Hitler fueron conocidos como Cristianos alemanes. Pero ya en mayo de 1934, un grupo de pastores y teólogos firmó la Declaración de Barmen, en la que se separaban oficialmente de la iglesia estatal para formar la Iglesia Confesante. La Declaración fue firmada por figuras como Karl Barth, Dietrich Bonhoeffer y Martin Niemöller.

Y finalmente… 40. Nigeria tiene más del doble de protestantes que Alemania, y Brasil tiene más del doble de católicos que Italia. El mapa del cristianismo ha cambiado dramáticamente en el último siglo. Según un estudio del 2010, casi un tercio de la población mundial es cristiana; cien años antes, los cristianos también representaban un tercio de la población, pero en esa época la mayoría vivía en Europa. Hoy el cristianismo atraviesa un momento crítico en Europa, pero las iglesias carismáticas y pentecostales prosperan en el Sur Global. Aunque el Vaticano esté en Italia y la Reforma haya empezado en Alemania, actualmente África, Asia y América Latina son los lugares donde el cristianismo crece con más fuerza. 

Umberto Eco escribió en una ocasión: «Quiénes eran los cristianos, podría preguntarse un marciano del año tres mil, ¿los que se dejaban comer por los leones o los que mataban herejes? Todo eso». Como seguramente te queda muy claro después de ver este video, la historia del cristianismo es fascinante, compleja, preciosa y aterradora. Por momentos nos llena de vigor y esperanza, aunque en ocasiones también nos confunde y horroriza.

De una forma u otra, tanto los creyentes como los que no creen estamos atravesados por esa historia. Esa gran narrativa cristiana, que comienza con un galileo crucificado y resucitado hace dos mil años, sigue influyendo en el mundo hasta hoy. Conocer esa historia nos ayuda a entender cómo se ha forjado el mundo en el que vivimos, nos inspira a ser dignos herederos de esa Buena noticia y a aprender de los errores del pasado.

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