Cada vez me llenan más el corazón las palabras de la Escritura.
“Todos piensan en cambiar el mundo, pero nadie piensa en cambiarse a sí mismo”.
Alexei Tolstoi
“Las masas humanas más peligrosas son aquellas en cuyas venas ha sido inyectado el veneno del miedo.... del miedo al cambio”.
Octavio Paz
“Las personas cambian cuando se dan cuenta del potencial que tienen para cambiar las cosas”.
Paulo Coelho
“No cambies la salud por la riqueza, ni la libertad por el poder”.
Benjamin Franklin
“Discúlpeme, no le había reconocido: he cambiado mucho”.
Oscar Wilde
“Y renovaos en el espíritu de vuestra mente, y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad”.
(Efesios 4. Santa Biblia)
Hace pocos días celebrábamos en mi tierra el “Día das Letras Galegas”, algo que disfrutamos con mucha fuerza todos aquellos que amamos a nuestra tierra y las letras. Este año, el homenaje fue concedido por la “Real Academia Galega'” a Xela Arias, alguien muy especial por muchos motivos: hace años que ya no está con nosotros, era mujer y tiene una historia de vida y obra fascinantes para mí.
Xela nació en Sarria (Lugo) en 1962, y se crio junto a sus padres y hermanos en un entorno rural, en la granja-escuela de Barreiros, en la que su padre, Valentín, también ensayista y traductor, daba clase a los niños.
En ese entorno, muy vinculado a la naturaleza y a la cultura rural gallega, Xela Arias forjó sus primeras raíces para después, con tan solo tres años, mudarse a Lugo y, ya con siete, instalarse definitivamente en Vigo, ciudad en la que vivió gran parte de su vida.
“Ella era una niña como todas las demás, pero destacaba porque le gustaba mucho escribir y leer; los libros siempre le gustaron muchísimo y siempre los cuidó muy bien, porque sentía que eran especiales”, dijo en una ocasión su madre, y aseguró que conserva relatos de su hija de cuando tenía apenas nueve años.
Cuando nadie pudiera pensar, Xela nos dejó a los 41 años, en plena efervescencia de su vida y obra. Fue finalista dos veces más para recibir el reconocimiento en el “Día das Letras Galegas”, pero llevaron el premio otros como Carballo Calero… todavía recuerdo cuando tuve que estudiar gallego; hasta hacía no demasiados años, era como una especie de pecado que un niño hablara o escribiera como podía gallego, y de esto los maestros sabemos mucho, por edad y por vivencias de cuando éramos niños, y vimos muchas veces, incluso pegar a chiquillos que venían de entornos rurales y ni sabían hablar en castellano; personalmente viví la transición de todo esto cuando estudiaba mi carrera secular, y siempre que recuerdo las normas de acentuación de Carballo Calero, y lo que me costó aprenderlas, recuerdo a mi profesora de gallego, se llamaba Inés y tenía todo el día en la boca a Carballo Calero…. esto solo es una anécdota personal...
Licenciada en Filología Hispánica, Xela Arias pasó la mayor parte de su vida en Vigo, donde llegó a ser un referente del mundo editorial y de la poesía de mujer. En 1980 se fundó la editorial Xerais, donde trabajó como correctora y asesora lingüística durante diez años.
Se dio a conocer en 1986 con Denuncia do equilibrio, finalista del Premio Losada Diéguez. También fue finalista del Premio Esquío con Lili sen pistolas, un libro que aún hoy permanece inédito. Posteriormente publicó Tigres coma cabalos (1990), Darío a diario (1996) e 'Intempériome' (2003). Además, participó en libros colectivos como Palabra de muller (1992), Rosalía na palabra de once poetas galegas (1997) y Daquelas que cantan (Fundación Rosalía de Castro, 2000).
Tradujo al gallego numerosas obras y fue premio de traducción Ramón Cabanillas. Colaboró en diversas publicaciones y recitales poéticos.
Xela Arias falleció cuando no era el momento, y su repentina muerte sacudió tanto al mundo literario como a su familia, que mantiene un recuerdo muy vivo de ella y que la define como una mujer “discreta” pero “tenaz” y sobre todo con unas “enormes ansias de libertad”.
Xela terminó el bachiller y después dejó los estudios para trabajar en la editorial Xerais, junto a Xulián Maure Rivas y Roberto Pérez Pardo y empezó a publicar sus propios poemarios, el primero, “Denuncia do equilibrio” en 1986.
En ese ambiente artístico, en el que ella se movía, fue donde conoció al fotógrafo Xulio Gil, con quien compartió gran parte de su vida y con el que realizó el poemario Tigres coma cabalos.
“Yo no la conocía, pero quería hacer un libro de fotografía con un poeta. Se dio la casualidad de que un amigo mío iba a dirigir una jornada poética con 20 poetas en 1988 y tomé aquello como si fuera un casting”, cuenta Gil.
De todos los que allí se encontraban, Gil escogió a Xela, porque consideró que sus poemas “hablaban de algo que estaba presente en aquel momento”, una poesía “contemporánea”, sin concesiones a “la lírica más abstracta”.
“En aquel momento era una poeta emergente. Tenía un poemario sólo, pero estaba muy bien considerada”, asegura el fotógrafo, quien también dice que de su unión con Xela Arias salieron “las dos mejores cosas que ha hecho en su vida”, que son Tigres coma cabalos y su hijo en común, Darío.
De sus trece años juntos, Gil destaca una convivencia “natural”, como la de cualquier pareja, pero basada en “una comunión y un respeto absoluto” del uno hacia al otro por la actividad artística que cada uno ejercía.
Otra cosa que destaca el fotógrafo es su carácter feminista, que no llevaba como consigna o catecismo; sino que era más bien una actitud vital. No pagó peaje por ser mujer, asegura. Confieso que me encanta esto… ¡No pagó peaje por ser mujer!
Ese marcado carácter de libertad es otra de las características fundamentales que destaca su hijo Darío, que recuerda que en su niñez se respiraba “un ambiente cultural”, porque su madre siempre le llevaba al teatro, a recitales y en su casa siempre había "el libro adecuado" para él.
Ya en su etapa más madura, tras el fallecimiento de Xela, Darío comenzó a acercarse a la poesía de su madre, sobre todo a través del poemario Darío a diario, en el que ella reflexionaba sobre la maternidad con su hijo como protagonista.
Xela Arias es una mujer muy admirada por mí, como he escrito más arriba, su trasfondo cultural, su vida, su obra, su modo de pensar en no restringirse a ciertas reglas en lengua, su dejar los estudios por un tiempo y licenciarse en Filología Hispánica más tarde, ¡toda una mujer y merecido homenaje!
Os preguntaréis porqué he elegido este tema para un artículo en una revista cristiana evangélica. En primer lugar, me fascina esta mujer por mil motivos, me encanta el “Día das letras galegas”, un tema de relevante actualidad en estos días…… pero hay algo que me ronda y ronda por la cabeza cuando miro y remiro la vida y obra de Xela Arias y la intento hilar con mi vida, con mi ministerio para mi Señor y mi vida personal con Él.
Me sigue encantando aquello de… “No pagó peaje por ser mujer”. Lo sé, es un tema recurrente en mí, tal vez he sufrido demasiadas cosas por ser mujer y…. “no morir en el intento” siguiendo y sirviendo al Dios de mi vida, y cuando mis ojos se alzan al cielo y puedo recordar con mis ojos cerrados como mi Jesús cuando pasó por esta tierra ayudó y restauró a las mujeres, se me empapan los ojos de lágrimas… Él, Dios y hombre a la vez, quitó la lacra, el castigo del Edén y todos los fariseismos y leyes mal entendidas y totalmente injustas para una mujer, restableció su dignidad y nos colocó en el lugar correcto; aunque esto para muchos está demasiado superado, sigue siendo un tema conflictivo para muchos otros. A estas alturas y después de haber bregado mucho en estas lides, vivo en paz conmigo misma y con todos, me encanta esa definición de Xela por parte del que fue su marido… “una persona a medio camino entre discreta y tímida”; aunque matiza que cuando tenía que alzar la voz, “la discreción se la dejaba en el armario”. Y es que en ocasiones hay que alzar la voz, eso sí, siempre en el temor y en el amor de Dios… Cada vez me llenan más el corazón las palabras de la Escritura…
“Ya no hay judío ni griego; no hay esclavo ni libre; no hay varón ni mujer; porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús” (Gálatas 3: 18)
Por otro lado no paro de pensar en otro texto de la Palabra de Dios…
“Y renovaos en el espíritu de vuestra mente, y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad. Por lo cual, desechando la mentira, hablad verdad cada uno con su prójimo; porque somos miembros los unos de los otros. Airaos, pero no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo, ni deis lugar al diablo. El que hurtaba, no hurte más, sino trabaje, haciendo con sus manos lo que es bueno, para que tenga qué compartir con el que padece necesidad. Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes. Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de la redención. Quítense de vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia. Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo.” (Efesios 4:23-32)
Gracias mi Señor por todo lo que hiciste por mí, por mí como mujer, por mí como hija tuya, por mí por que me amaste desde que estaba en las entrañas de mi madre. Dame valor para enfrentar cualquier cambio que tú desees en mi vida, en mi vida contigo y en mi vida con los demás; ¡sólo a ti la gloria, la honra y el poder!
La conmemoración de la Reforma, las tensiones en torno a la interpretación bíblica de la sexualidad o el crecimiento de las iglesias en Asia o África son algunos de los temas de la década que analizamos.
Estudiamos el fenómeno de la luz partiendo de varios detalles del milagro de la vista en Marcos 8:24, en el que Jesús nos ayuda a comprender nuestra necesidad de ver la realidad claramente.
Causas del triunfo de Boris Johnson y del Brexit; y sus consecuencias para la Unión Europea y la agenda globalista. Una entrevista a César Vidal.
Analizamos las noticias más relevantes de la semana.
Algunas imágenes del primer congreso protestante sobre ministerios con la infancia y la familia, celebrado en Madrid.
Algunas fotos de la entrega del Premio Jorge Borrow 2019 y de este encuentro de referencia, celebrado el sábado en la Facultad de Filología y en el Ayuntamiento de Salamanca. Fotos de MGala.
Instantáneas del fin de semana de la Alianza Evangélica Española en Murcia, donde se desarrolló el programa con el lema ‘El poder transformador de lo pequeño’.
José era alguien de una gran lealtad, la cual demostró con su actitud y acciones.
Celebración de Navidad evangélica, desde la Iglesia Evangélica Bautista Buen Pastor, en Madrid.
Madrid acoge el min19, donde ministerios evangélicos de toda España conversan sobre los desafíos de la infancia en el mundo actual.
Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.
Si quieres comentar o