Cristo viene el año que viene

Estamos a punto de empezar otro año nuevo; y una vez más, nos topamos con la supuesta ‘revelación’ de que Jesucristo ha de volver el año que viene.

El problema con estas falsas profecías es que enfurecen a Dios, engañan a los creyentes y endurecen a los incrédulos. Son una auténtica maldición.

El Señor Jesús, el Rey de la Iglesia, nos dijo explícitamente que, “Del día y de la hora nadie sabe, ni aun los ángeles de los cielos sino sólo mi Padre” (Mateo 24:36).

Esto quiere decir que cuando un ‘seguidor’ de Cristo empieza a poner fecha a la segunda venida, deja de ser un adepto del nazareno. Es un rebelde insumiso, desleal y arrogante porque se cree más sabio e iluminado que el único Soberano.

¡Da igual si el ‘profeta’ en cuestión tiene cientos o miles de seguidores!

Total:

• Si alguien nos dice que ha recibido una visitación angelical diciéndonos el día y la hora de la parusía, nos está mintiendo. ¡No hay que prestar atención a los ángeles si no nos hablan conforme a la Palabra de Dios!


• Si alguien nos dice que “el Espíritu Santo le ha hablado” revelándole el día y la hora del día de juicio, nos está mintiendo. Al fin y al cabo, ¿quién inspiró Mateo 24:36 sino el Espíritu Santo?


• Si alguien nos dice que ha tenido un sueño en el cual le fue revelado la fecha el día y la hora de la segunda venida, nos está mintiendo. ¡No hay confiar en nuestros sueños si no concuerdan con las Escrituras!


• Si alguien nos dice que según su sistema subjetiva de matemáticas escatológicas “ha descubierto” el día y la hora del regreso del Señor, nos está mintiendo.

Cuando el cristiano se encuentra en dos opiniones que están en conflicto; siempre tiene que optar por la voz del Señor Jesús. La oveja del Señor no hace caso a la serpiente.

Estos falsos profetas están tomando el nombre de Dios en vano y sufrirán gran pérdida en el gran día final. Bien dijo el Todopoderoso en los días de Jeremías, “He aquí, yo estoy contra los que profetizan sueños mentirosos y los cuentan y hacen errar a mi pueblo con sus mentiras y con sus lisonjas y yo no los envié ni les mandé; y ningún provecho hicieron a este pueblo, dice el Señor” (Jeremías 23:32).

Los falsos profetas de nuestros días están jugando con fuego.

APLICACIÓN

Seamos sobrios en este nuevo año, queridos lectores.

Las personas más espirituales son aquéllas que se someten a la Palabra del Señor. Aquel que se atreve a poner fecha a la segunda venida es un engañador. No es un discípulo de Cristo.

Así que, si alguien nos preguntara si pensamos que el Señor Jesús ha de volver el año que viene, ¿cómo responder?

Contestamos diciendo que puede ser que sí o puede ser que no.

E independientemente de la fecha de la parusía, el cristiano es llamado a vivir como si Cristo volviera esta misma noche.

Os deseo a todos un feliz año nuevo en el Señor Jesús, amados hermanos, y os dejo una vez más con estas palabras que tienen más autoridad que todo el poder que hay en el universo:

DEL DÍA Y LA HORA NADIE SABE, NI AUN LOS ÁNGELES DE LOS CIELOS SINO SÓLO MI PADRE.

Ni aun los ángeles…

Ni aun los predicadores…

Ni aun los falsos profetas del siglo XXI…