Mis 38 años en Betesda

“LAS PALABRAS BONDADOSAS, PUEDEN SER BREVES Y FÁCILES DE DECIR; PERO SUS RESONANCIAS, SON VERDADERAMENTE INFINITAS”

Teresa de Calcuta.

Se cuenta la historia real de una prostituta con gesto altivo y duro, que por razones desconocidas se encontró con una anciana enferma, sucia, andrajosa y que lloraba mucho. Dicen los que pudieron observar aquella escena, que la prostituta abrazó con un cariño y comprensión infinita a la anciana y con sus propias lágrimas, enjugaba las de la pobrecita anciana mientras le decía…. Todo irá bien!! Todo irá bien!!.

Creo qué hay algunas palabras que están demasiado olvidadas en el lenguaje cristiano de los últimos tiempos y precisamente estas tres palabras son la pura esencia del Evangelio: COMPRENSIÓN, COMPASIÓN Y MISERICORDIA.

Nos pasamos la vida discutiendo sobre cuestiones doctrinales y muchísimas otras cosas que no deberían ser el más grande distintivo de un auténtico cristiano y perdemos de vista el centro real del Evangelio de Jesucristo.

Siempre me fascinó el relato bíblico que recoge el Evangelio según S. Juan en su capítulo 5, la historia de la sanación milagrosa del paralítico de Betesda.

Hay mucha información importante extra bíblica sobre ese conocido estanque, pero que no me interesa tocar en estos momentos. Me llega con lo que dice la Biblia. Era un estanque que se encontraba en Jerusalén, cerca de la puerta de las ovejas. Su nombre en hebreo era Betesda y tenía cinco pórticos. Alrededor de este conocido estanque situado cerca del Templo, yacía una multitud de enfermos de todo tipo y condición.

De vez en cuando descendía un ángel que removía las aguas y, cuando sucedía esto, el que llegaba primero era sanado.

Entre todos aquellos enfermos había uno muy especial, estaba imposibilitado en gran manera, no tenía a nadie que le ayudara a caminar o llevarlo hacia las aguas milagrosas cuando el ángel las removía y llevaba sobre su lecho de enfermedad y dolor 38 años. Una situación verdaderamente triste, no es cierto??

El Señor Jesús venía de Sicar, de tener un encuentro con la mujer Samaritana. Un encuentro no fortuito del que aún resuenan las palabras: “….DAME DE BEBER!!….. SI CONOCIERAS QUIEN ES EL QUE TE DICE DAME DE BEBER, TÚ LE PEDIRÍAS Y ÉL TE DARÍA AGUA DE VIDA..” Jn 10: 14. Y por cierto qué así fue!!

El hombre enfermo e imposibilitado que yacía ante el estanque de Betesda, supongo que tendría las esperanzas bajo mínimos, había sufrido demasiados años. También intuyo que el dolor de su realidad, dio paso a la resignación, esta a la frustración y todo desembocó en mucha amargura. No conocía a Jesús, jamás había oído hablar de Él. Pero Jesús sí le conocía a él y vino desde Sicar para tener un encuentro con alguien que, nuevamente ni lo conocía ni lo buscó.

Me parece preciosa la actitud de Jesús, Él jamás fuerza a nadie, se acerca a el hombre enfermo y, paradójicamente, le dice: QUIERES SER SANO?? …. Parece una pregunta demasiado obvia, verdad?? No lo es!! Jesús conocía perfectamente toda la más profunda realidad, dolor, desanimo, resignación, frustración y amargura de este hombre; pero no le impone nada, simplemente le pregunta, es como una prolongación de la conversación con la Samaritana.

“SEÑOR…. NO TENGO QUIEN ME META EN EL ESTANQUE CUANDO SE AGITA EL AGUA…… JESÚS LE DIJO: LEVÁNTATE, TOMA TU LECHO Y ANDA”

Me fascina el modo de obrar del Señor, se acerca sabiéndolo todo, pregunta y hace el milagro.

Era día de Reposo y el Señor lo sabía demasiado bien, hizo lo que hizo y en el momento que quiso con propósitos muy determinados.

Aquel hombre llevaba 38 años, os podéis imaginar en que estado?? Me imagino que estaba más que sucio, sobre y entre auténticos harapos, su aspecto y el olor que desprendía debían de ser casi nauseabundos. Alguna vez los judíos importantes del Templo se habían acercado a Él??...... Oh no!!!! Por favor!! Se hubieran contaminado y más en día de Reposo…… Mas de lo mismo de la historia del Buen Samaritano…… Uno tenía que llegar temprano al Templo, el otro no podía contaminarse……

Aquí llega el Rey de Reyes, el Dios de la Gloria hecho hombre y no le dan temor los harapos, el mal olor, la enfermedad ni mucho menos que fuera día de Reposo. Se acerca con cariño, no fuerza, sana y salva…. “….NO PEQUES MÁS..”

Ah, por supuesto!! Los grandes del templo!!...... Tan santos ellos con todas sus leyes y doctrinas, pero jamás se habían acercado al pobrecito necesitado…… Y no sólo cuestionan a Jesús, sino que intentan matarle.

Puedes sentirte identificado de algún modo con el paralítico de Betesda?? “38años” de soledad, desamparo, resignación, frustración….. Amargura, suciedad….?? Yo no en todas ellas por supuesto!! El Señor limpió mi vida hace muchos años; pero, tal vez el polvo del camino y los dolores implícitos a él me han llenado de demasiado dolor y soledad…..

Hoy, mi Señor, vuelve a venir a mi encuentro y me susurra al oído lleno de dulzura…… HIJA MÍA!! QUIERES SER SANADA DE TU DOLOR??.... DAME LA MANO DE NUEVO Y VEN!! LEVÁNTATE DE NUEVO Y COMIENZA A CAMINAR EN MI LIBERTAD……. SÉ LIBRE NUEVAMENTE!!…….. LEVÁNTATE Y ANDA!!

Estos son los verdaderos milagros de mi Señor, no sana a multitudes a gritos y demás…… Se acerca personalmente lleno de tres cosas qué se han olvidado demasiado….. COMPRENSIÓN, MISERICORDIA Y COMPASIÓN.

Mi Jesús está ahora ahí, a tu lado, entre tus “harapos de dolor” y el especialista en “Sanar a los quebrantados de corazón y vendar sus heridas”, se acerca a ti con mucho cuidado y te dice….

“QUIERES SER SANO??........... LEVÁNTATE, TOMA TU LECHO Y ANDA”

“Nunca una noche ha vencido al amanecer

y nunca un problema podrá vencer la esperanza

ni nublar nuestros sueños”

Beatriz Garrido