¿Se oye la voz de los cristianos en la UE?

¿Tienen los valores de los cristianos voz en la Unión Europea? ProtestanteDigital ha preguntado sobre ello a dos auténticos expertos que conocen el tema, ya que trabajan para representar a los cristianos ante las instituciones europeas.

David Fieldsend es Manager de Care for Europe [www.careforeurope.org] y Christel Lamère Ngnambi es Manager para la Alianza Evangélica Europea [www.europeanea.org]. Ambos trabajan en Bruselas, centro del poder europeo. Desde allí, responden a nuestras preguntas y explican como ven la relación entre política europea y valores cristianos.

1. Cómo describiría las directivas y tendencias políticas que se dan últimamente en la Unión Europea (UE), en el área de los Derechos Humanos? Cree que hay tendencias políticas que chocan frontalmente contra los valores cristianos?

David Fieldsend: Hay muchos puntos positivos que están sucediendo en la agenda de Derechos Humanos de la UE. Pero pese a eso, la mayoría no son una cuestión de directivas sino es la UE usando el soft power (poder paralelo a la legislación) para influenciar países terceros a que mejoren sus actuaciones, si quieren recibir ayudas al desarrollo de la Unión, por ejemplo.

En el área concreta de la familia y de la vida del niño aún no nacido, se puede ver una tendencia de las estructuras oficiales UE a hablar de ´diferentes formas de familia´ en lugar de ´la familia´. También se habla de ´derechos sexuales y reproductivos´ (entre ellos, el ´derecho a abortar´). Y eso puede llevar a una presión sobre quienes mantengan una visión diferente de la sociedad.

Pero los derechos de cada país miembro está garantizados porque cada Directiva tiene que ser aprobada por unanimidad. Ahora bien, eso no evita que el Tribunal Europeo de Justicia pueda hacer leyes nuevas en un proceso ´caso por caso´, cuando hay denuncias individuales.

Christel Lamère Ngnambi: Estamos preocupados por el hecho que la UE está bailando sobre una ladera ideológica muy resbaladiza en lo que se refiere a algunos derechos humanos, como la legislación sobre igualdad o los derechos sexuales y reproductivos. La suposición es que el comportamiento que es contrario a la mezcla de ideologías seculares humanistas, relativistas y filosóficamente liberales, deberían ser consideradas inmorales e ilegales. En algunas decisiones políticas, esto mina o podría minar claramente algunos de los valores cristianos esenciales, como por ejemplo la completa dignidad del ser humano (Directiva sobre la Asistencia sanitaria Transfronteriza) y la libertad de expresión, conciencia y religión, especialmente en lo que se refiere a lo que los evangélicos creemos que es pecado (Directiva sobre Trato Igualitario). En todo caso, no hay unanimidad sobre cuáles son los “valores cristianos”. Para muchos, estos valores se encuentran o en la enseñanza de una iglesia concreta, o en el manifesto de un partido político, o en el punto de vista sobre la moral que tenga un movimiento religioso. Los escritores católicos suelen referirse a los valores cristianos como aquellos que tienen que ver con asuntos como la familia y la vida, con los que los evangélicos (con algunas reservas) estamos bastante de acuerdo. Pero si Dios es el Señor de todo, los valores cristianos van mucho más allá de esta, quizás, limitada agenda de temas. Y desde este punto de vista, algunos acontecimientos en la UE en el ámbito de los derechos humanos, tienden a apoyar los valores cristianos. Sólo un ejemplo: la Unión está haciendo un muy buen trabajo en frenar la intolerancia religiosa en varios países fuera de la UE.

2. ¿Cuán potente es la influencia en la UE de grupos de presión (lobbies) cómo el movimiento gay, el movimiento pro-aborto, u otros movimientos que en principio tienen intereses diferentes (u opuestos) a los objetivos de CARE y la Alianza Evangélica Europea?

David Fieldsend: Generalmente estos lobbies tienen una influencia mucho más grande del apoyo popular que realmente tienen. Puede haber muchas razones para esto, pero tener una representación desproporcionada de gente altamente inteligente y muy articulada tanto en la política como una muy alta presencia en los medios de comunicación y la esfera pública, no ha ayudado. Además, también ha sido, sin duda, importante una financiación significante de la EU y otras instituciones internacionales.

Christel Lamère Ngnambi: No hay duda que la influencia de grupos de interés y de presión como el lobby gay y los aborcionistas es inmensa. Han desarrollado nudos muy fuertes con promotores internacionales de políticas. Han influenciado a muchos en el pensar que sus opiniones [de los lobbies] son la verdad objetiva en la que las políticas deberían basarse.

Dicho esto, creo realmente que estos grupos van perdiendo fuerza: sus bases de apoyo se van deshaciendo cuando los ciudadanos de a pie se cuestionan más y más sus acciones y creencias, o simplemente pierden interés en sus ´luchas´. Por otro lado, algunos movimientos cristianos, están ganando fuerza, ente otras cosas porque más y más cristianos se dan cuenta de la importante necesidad de comprometerse con la vida de nuestras sociedades.

3. Cree que los diferentes países de la UE están siendo influenciados por valores promovidos por el Parlamento Europeo y que podrían ser contrarios a los valores cristianos?

David Fieldsend: Influencia es realmente un camino en dos direcciones. La reciente ampliación de la UE para incluir a ex países comunistas ha llevado a algunos promotores de valores cristianos muy convencidos a ser elegidos en el Parlamento Europeo, y están utilizando su influencia allí. En relación a Polonia, los países bálticos y Croacia, ha habido varios intentos en los últimos años, por parte de europarlamentarios secularistas, de influenciar sus políticas domésticas. Pero estos intentos no han tenido éxito.

Christel Lamère Ngnambi: No. De hecho, en lo que se refiere al Parlamento Europeo, es justo al revés. Las instituciones de la UE están profundamente influenciadas por las tendencias ideológicas de quienes toman las decisiones, que siempre vienen de un contexto nacional. Por ejemplo, muchos parlamentarios europeos de Francia y Bélgica de varios partidos, apoyan la laicidad de una forma fuerte pero calmada, mientras que no es raro encontrar a otros, provenientes de Italia o España, que exhiben puntos de vista anticlericales y antireligiosos, duros y a veces agresivos. Especialmente los que vienen del campo liberal y socialista. Así que todo empieza en las urnas: los valores anticristianos sólo aparecerán si están apoyados por los votantes europeos.

4. Está de acuerdo con las autoras del libro Contra el Cristianismo (Scaraffia, Rocella) en que la UE está creando “una religión secular que lucha contra el legado y los valores cristianos”?

David Fieldsend: Sé que hay algunas de las estructuras de la UE que están promoviendo este tipo de agenda, y muy ruidosamente, pero en ningún caso es una forma de pensar universal. Lo triste para mí es que en la ´antigua´ Europa occidental tantos cristianos están dispuestos a dejarles hacer y no están preparados para levantar su voz y su opinión. Afortunadamente, nuestros hermanos y hermanas del este de Europa están presionando para que los de aquí tomemos una postura clara.

Christel Lamère Ngnambi: Soy muy cauteloso con discursos que tienden a construir santuarios en adoración del “legado cristiano y sus valores”. Es verdad que la tendencia actual no es buena. Pero la culpa se debe apuntar primeramente y principalmente a nosotros, los cristianos, cuando miramos nuestra vida cívica y nuestra identidad completamente separada de nuestra fe. Los dogmas seculares no son para nada algo nuevo, pero sí se está convirtiendo en la corriente principal hoy en día, es esencialmente porque secularistas extremos han monopolizado áreas internacionales de influencia, mientras los cristianos hemos desertado esas mismas áreas. No seamos ciegos! Que Dios nos ayude a comprometernos y a llevar nuestra entendimiento de las muchas y variadas temáticas a las que se enfrenta nuestro mundo hoy a la plaza pública!