El País ha publicado en su edición de este sábado un bochornoso artículo sobre el crecimiento de iglesias evangélicas en la zona de Carabanchel.
El informe coincide en tiempo y forma con uno similar realizado en Argentina, con el objetivo de criminalizar a entidades provida en el continente europeo.
Mi querida amiga Jacqueline, era la persona más dulce y buena que he conocido.
Es liberador asumir que lo que siento o percibo en medio de mi dolor puede que no sea la verdad absoluta.
En Apocalipsis 3:20, Jesús no le está rogando a una persona para que sea salva; está buscando la entrada a una iglesia.
¿Por qué tienen que aparecer el sufrimiento, la cruz y la muerte en el camino de Jesús? ¿No parece todo esto un contrasentido?
Un poema del autor canario de fe cristiana.
Te instalas en mi horizonte a tus anchas, coges el lugar más destacado, y te aposentas como una reina deseando gobernar los pensamientos, los actos, las emociones.
El contenido de aquel largo viaje estaba centrado en la Biblia como fenómeno literario y cultural, además de la importancia del libro de los libros para la vida y obra de cada autor.
El Autor de la vida fue el Dios del Sinaí y el Dios del Calvario.
Mi gran disfrute es servir a mi Señor con todas mis fuerzas, no dejarme llevar por el temor.
Una propuesta para poder estructurar el trabajo eclesiástico y coordinarlo con otras intervenciones dentro de las múltiples necesidades humanas, de forma colaborativa pero con lo espiritual de base y prioritario en la persona.
Las palabras de Jesús, como no podía ser de otra manera, ponen en crisis un modelo de mujer sometida al sistema.
Jesús les enseña que todo forma parte del reino de Dios, toda la existencia de las personas y, ahora, precisamente su necesidad de comer.
Cada vez me llenan más el corazón las palabras de la Escritura.
En la pelea contra la falsa doctrina, la mundanalidad y el pecado, avanzamos sin temor hasta el final, y por eso nuestro lenguaje no debe ser fruto de una pasión desordenada, sino de principios bien considerados.
Vemos a un Jesús expulsado, no recibido y no creído que se admira de la falta de fe de las gentes de su pueblo.
Hasta que el amor de Jesús no esté en nosotros, podemos matarnos a trabajar y será solo trabajo, no amor. El trabajo sin amor es esclavitud.
Pienso en lo que pide Dios de mí; en ocasiones una terrible soledad, viento y frío en el alma, todo por poder rescatar de una muerte segura a alguien, para poder iluminar el sendero en el mar.
El lamento permanente es vivir estancado y no ver más allá de nuestras propias limitaciones.
El seguimiento de Jesús supone enfrentar peligros y amenazas desconcertantes pero, a la vez, se nos invita a desterrar el miedo paralizante.
A pesar de nuestros fallos para con nuestro Señor, nos sigue amando, y nos acompaña en cada tramo de nuestro difícil caminar.
En el seguimiento aparece implicado un modo alternativo de entender la existencia que descentra y desinstala la vida situándola en estado de misión.
Lo que aparece en juego es la decisión de desinstalar la vida para convertirla en seguimiento del Maestro.
Pido al Dios de mi vida no cambiar, no dejarme arrastrar por el miedo o la comodidad, y esforzarme del modo que sea por ayudar y servir.
Y continúa mascullando palabras con no se sabe quién de no se sabe dónde.
Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.