El País ha publicado en su edición de este sábado un bochornoso artículo sobre el crecimiento de iglesias evangélicas en la zona de Carabanchel.
El hecho de que los sacramentos no “causen” por sí mismos los resultados esperados, ¿no es una indicación de que la estructura causal en la sacramentología católica romana es más un esquema filosófico que una categoría bíblicamente realista?
Entre la lectura crítica y la ecléctica se encuentra cuál es el enfoque adecuado de la fe evangélica frente a Tomás de Aquino y la tradición en general, siempre sujeta al escrutinio supremo de la Escritura.
La Iglesia de Roma se ha apropiado de Tomás de manera persistente y convencida, elevándolo a teólogo católico romano por excelencia.
Durante siglos, el catolicismo romano ha considerado a Tomás de Aquino como su campeón.
El tomismo no tiene una comprensión trágica del pecado y sus consecuencias. Por lo mismo, la relación entre la naturaleza y la gracia en el catolicismo romano tomista subestima los efectos del pecado y tiene una visión optimista de las capacidades humanas.
El concepto de “nada”, que es fundamental en la doctrina de la creación a partir de la nada, es radicalmente diferente de la “nada” de los cosmólogos.
¿Podrá la ciencia dar una explicación del origen del universo, sin necesidad de Dios?
Para el ateo el que afirma que Dios existe está loco, y para el creyente lo está el que niega tal posibilidad.
Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.