El País ha publicado en su edición de este sábado un bochornoso artículo sobre el crecimiento de iglesias evangélicas en la zona de Carabanchel.
La libertad, alma de todas las cosas, no depende de las circunstancias sociales o políticas. La libertad la tenemos dentro de nosotros mismos o no la tenemos.
Necesitamos una renovación rebelde que transforme la vida de tantos y tantos cristianos cómodos que, finalmente, están cayendo en la decepción y en lo tedioso.
Ilustres escritores españoles han llegado a la conclusión de que muchos de los que han dirigido la creencia católica en este país, “son malos, mentirosos y de fea conducta”.
La muerte que mata está aún viva. Ojalá estuviera muerta. Mientras tanto, mi corazón se queja: Muerte, muerta seas.
El testimonio cristiano se da siempre con mentes despiertas y no con sensibilidades cristianas cómodas, adormecidas e impregnadas de aburrimiento y de tedio.
Ortega y Gasset dice que hay épocas en que “emerge de improviso el acantilado de la Divinidad. Y se impone gritar ¡Dios a la vista!”. Esa época es hoy, es ahora.
Contrariamente a la situación de la mujer en aquél mundo, sometida a la voluntad del marido, la de Proverbios es una mujer independiente, liberada. Una mujer de fuerte carácter.
Las consecuencias económicas y humanitarias de esta infección contagiosa son realmente de un alcance fatal.
Me admira ese convencimiento de que un misionero extranjero, que llegaba con todo un bagaje de raza y cultura, se despojara de todo para encarnarse en esa nueva cultura que le acogía.
Es la eterna duda del agnóstico. Si Dios existe no está dado al ser humano comprenderlo.
En la salvación de Moisés, no existe la casualidad, rotundamente no. Todo estaba bien pensado y ejecutado.
Jesús fue libre ejerciendo su libertad en compromiso con el hombre y con el mundo de una manera amorosa, ética y muy humana.
Es tiempo que en este país termine el racismo. Debemos confrontar esta triste realidad de nuestra historia.
Convertido en religión y con biblia propia, surgen en el ateísmo los doce apóstoles, escritores, filósofos, científicos, artistas, dedicados a predicar mediante la escritura las malas nuevas, la inexistencia de Dios por todos los rincones del mundo.
La Biblia narra la historia de dos mujeres que se presentaron por cuenta propia ante Salomón.
Hay dificultades de entendimiento, pero lo más grave es que hay problemas en el momento de mostrar la coherencia del lenguaje con el ejemplo de vida del evangelizador.
Historiadores han establecido sus orígenes en los antiguos filósofos griegos, en torno a los siglos V y VI antes de Cristo, considerando a Diágoras de Melos como el primer ateo.
El alma cargada de penosos recuerdos es una terrible realidad que siempre nos mantiene alerta, dejando ver los abismos que en ella se esconden. La de Sísara no estaba en paz.
Hay que analizar el mundo con ojos solidarios, las relaciones humanas con sus desequilibrios. Luego, lanzar palabras de denuncia y hacer justicia que, en la Biblia, siempre va a ir junto a la práctica de la misericordia.
Dios lo libró de perecer en el fuego que consumió Sodoma, pero no de las trágicas consecuencias que siguieron.
El anuncio del acontecimiento más relevante e importante de la historia de la humanidad, se relaciona con los débiles y humildes de la tierra, dejando a un lado a los poderosos. ¡Hay esperanza para los pobres de la tierra! ¡Ha resucitado!
No podemos afirmar que amamos a nuestros semejantes y quedarnos callados frente al racismo.
El ateísmo niega todo lo que el cristianismo afirma.
Zorrilla se anticipó a esta sociedad del siglo XXI que estamos viviendo, una sociedad egoísta, egocéntrica, avara, individualista.
Hay un brazo de la cruz que se agarra a la tierra para que nadie pueda mover este mensaje del amor de Jesús al mundo.
Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.