El País ha publicado en su edición de este sábado un bochornoso artículo sobre el crecimiento de iglesias evangélicas en la zona de Carabanchel.
La valoración del papel activo del Hijo en la procesión del Espíritu desde el Padre ayuda a salir del callejón sin salida de pensar la procesión como “causada” por el Padre y el Hijo, con el riesgo de tener dos fuentes de divinidad y no una.
El Señor comió delante de ellos un trozo de pez asado y un panal de miel, por amor a sus discípulos, con la idea de mostrarles la maravilla sobrenatural de la resurrección
Demasiadas veces, incluso en nuestra vida cristiana, queremos hacer muchas cosas sin darnos cuenta de que la clave de todo es Jesús.
Se ha formado a lo largo de los siglos la feliz idea de que Jesús y sus discípulos vivían felices sin la necesidad de manejar fondos, porque el Padre Celestial lo iba a proveer todo de forma milagrosa. Pero las cosas no eran exactamente así.
La Facultad Internacional de Teología IBSTE ha celebrado una nueva edición de Desafío XXI enfocada en “Jesús como Señor de gloria”.
Hay oscuridad en nosotros, pero hay además una dimensión profunda, con un poder invisible operando. El evangelio nos muestra que el mal está presente en aquel que se ha rebelado contra Dios, pero que Jesús es más poderoso.
¿Qué nos dice la Palabra sobre anidar en nosotros la esperanza en medio de un entorno de inseguridad?
María, la madre de Jesús, no fue ni reconocida ni tenida como “Madre de la Iglesia” por la Iglesia Primitiva.
En su casa no había imagen alguna, pero pintó cien veces la cruz como símbolo universal del sufrimiento.
¿De qué hablamos cuando hablamos de amor? En esta parada en nuestro viaje por la vida a la luz de la historia que Jesús mismo nos cuenta, reflexionamos sobre la parábola del buen samaritano.
¿Cómo veía el Hijo de Dios a los animales? ¿Qué clase de zoología ética y práctica profesaba? Y nosotros, ¿cómo deberíamos verlos también hoy?
Como evangélicos creemos en María, reconocemos el valor de su ejemplo y precioso testimonio y amamos a la Virgen. Pero no creemos ni practicamos todo aquello que ha sido añadido y enseñado a lo largo de los siglos, y que es ajeno a las Sagradas Escrituras.
¿No nos valdrá más la pena seguir leyendo el Antiguo Testamento como Jesús lo hacía, y seguir desarrollando esa capacidad de sacar de entre la violencia del pasado las lecciones para el perdón?
El problema, que no te ves desgraciado en tu actual condición.
No perdamos de vista el contexto multilingüe que se vivió en el tiempo de Cristo.
En las Escrituras, el único Pacto válido que tenemos que aceptar y cumplir es el que Dios hizo ya en y con Cristo Jesús a nuestro favor.
Jesús, con su resurrección, transformó su debilidad en vida abundante, en fuente de poder que es capaz de vencer incluso a la muerte.
Lo que hizo Jesús fue declararse Mesías Divino sin decirlo literalmente y por lo tanto decir la verdad sin ser culpable de blasfemia.
Si Jesús no hubiera resucitado de los muertos, vana sería nuestra fe y también estaríamos irremisiblemente perdidos en nuestros pecados.
Toda la perfección obtenida por Jesucristo será comunicada a su pueblo. En ese proceso nos encontramos y avanzamos.
En Él se juntan el Rey poderoso y el siervo en debilidad.
La pregunta sobre quién es Jesús es fundamental. Hoy nos acercamos a la respuesta que nos ofrece el relato del evangelio según Lucas.
El sacrificio de las mujeres que acababan de alumbrar para entrar en el Templo debía ser de un cordero de un año y un palomino o una tórtola
Se ha extendido la idea de que Jesús era solo un carpintero. Pero ¿qué podemos entender de la palabra usada en el idioma original sobre la profesión que tuvo Jesús?
¿Por qué Dios arrasa o manda arrasar a pueblos enteros en el Antiguo Testamento? ¿Es el Dios del Antiguo Testamento iracundo, vengativo, sanguinario y genocida?
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