El País ha publicado en su edición de este sábado un bochornoso artículo sobre el crecimiento de iglesias evangélicas en la zona de Carabanchel.
Comparto aquí sugerencias de lecturas sobre la temporada navideña, una por cada día, iniciando el primero de diciembre y concluyendo el 25.
No hay camino a la recuperación, a controlar los comportamientos adictivos sin pasar por la verdad y encontrar un lugar donde decir la verdad, sin tapujos ni excusas.
Escribir bien, o al menos correctamente, no es cuestión de aprender técnicas de redacción. El oficio de escritor conlleva formarse lentamente en la disciplina de aprender a pensar.
El capítulo final del libro Navidad de 1873: apertura de la Iglesia Metodista la Santísima Trinidad en la Ciudad de México. Antecedentes y precursores, en el que expongo algunas conclusiones.
Un recorrido por la historia del obispo metodista en México.
He querido valorar y, sobre todo, agradecer a Francisco Ruiz de Pablos su labor como traductor de textos latinos escritos por Casiodoro de Reina.
En Nicaragua conocí a García Márquez. Una tarde salimos juntos a tomar café y aproveché para hacerle una entrevista. Entre otras cosas le recordé el letrero “Macondo, Dios existe”.
Fue el primer Consejo Evangélico autonómico legalmente constituido, y el primero en firmar (en 1995) un Convenio Marco con su Comunidad Autónoma (la de Madrid, en su caso).
Francisco Ruiz de Pablos con grandes méritos ingresó a la estirpe de quienes son puentes del conocimiento, que nos llevan de una a otra orilla. Nos hizo asequible al traducir a español lo escrito en latín por Casiodoro de Reina.
Lorca, anticatólico, como lo demuestran biógrafos imparciales, no era ateo. En sus poemas incorpora a Dios.
Francisco Ruiz de Pablos, junto con Emilio Monjo Bellido, rescató las obras de los reformadores españoles del siglo XVI.
Hace dos décadas supe de PD porque de alguna manera, no recuerdo con precisión cómo, me llegó noticia de la publicación que estaba realizando en España un pequeño grupo de cristianos evangélicos.
Me pongo de pie ante Nelle Harper Lee, porque nos legó una pieza literaria en la que hizo luz sobre la intolerancia, el racismo y la religiosidad protestante/evangélica que sucumbe ante los prejuicios.
Dudar me hace mejor pastor y apologeta, porque me obliga a profundizar más y me ayuda a entender la dificultades de los que no creen.
El acercamiento a los libros con espíritu de aprendizaje nos vivifica, a la vez que la vida y sus retos amplían el entendimiento de lo que vamos decodificando al ejercitar el acto de leer.
Buscamos en las cosas creadas el placer que solo te da relacionarte con tu creador y los demás.
Para Lutero fue más importante traducir la Biblia a la lengua del pueblo que la redacción de su vasta obra escrita.
Sí, AMLO es religioso, un tanto sui generis, ya que adopta creencias variadas que injerta en lo que él entiende por ser cristiano.
A diferencia de la definición sociológica de secta, el entendimiento dominante del concepto en México tiene cargas estigmatizantes y peyorativas.
El presidente de México es un cristiano heterogéneo, pero no es posible adscribirlo al perfil evangélico/pentecostal.
Si en el pensamiento de AMLO se acrisolan distintas tradiciones, ¿por qué afirmar que sus ideas son preponderantemente evangélicas/pentecostales?
Con matices, pero por todas partes crece la cultura de la banalización, el afán de trivializar todo, la disposición a consumir/difundir charlatanerías que compiten por likes.
Unos pocos libros nos cimbran de pies a cabeza, de cerebro a corazón y arroban el alma.
Un breve mensaje desde una isla remota en Panamá.
Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.