El País ha publicado en su edición de este sábado un bochornoso artículo sobre el crecimiento de iglesias evangélicas en la zona de Carabanchel.
Hay sobre todo cuatro objetivos o funciones principales que tradicionalmente han sido importantes en apologética.
El apóstol Pedro nos da una serie de pautas a seguir en cuanto a la actitud del apologista en su defensa del Evangelio de Jesucristo.
Jesús es único entre todos los fundadores de religiones. Dijo que el destino eterno de las personas dependía de lo que cada cual hiciera con él.
No hay tantos científicos ateos como se suele creer. La increencia es un fenómeno mayoritariamente europeo.
Dios ha dado a cada persona completa libertad para pensar sin que nadie la imponga ninguna idea por la fuerza.
El judaísmo no cree que las profecías mesiánicas se cumplieran en Jesús. Los musulmanes creen que Jesús predijo la venida de Mahoma al hablar del “otro Consolador”.
La creencia, propia del politeísmo, en que el mundo material siempre existió, propia del politeísmo, choca contra el argumento cosmológico que afirma que todo tuvo un principio y que nada existió eternamente.
La moral de las sociedad evoluciona y cierta teología con visos panenteístas pretende que los preceptos morales de Dios también cambien para adecuarse a la moralidad moderna.
A lo largo de la historia del hinduismo se han manifestado ciertas tendencias de especulación filosófica que podrían clasificarse como escépticas o agnósticas, además del hinduismo panteísta.
Según el ateísmo, lo único que posee existencia real sería el universo físico o material.
Cada religión concibe a Dios a su manera y lo representa de forma diferente.
La evidencia histórica y la pura lógica indican que el rabino galileo fue quien dijo ser, que murió en la cruz, fue sepultado y la tumba quedó vacía.
La simplicidad y la belleza de los lirios del campo, que dependen exclusivamente de Dios, resultan del todo incomparables con cualquier riqueza o mérito humano.
El Corán niega que Jesús fuera crucificado por los romanos, en base al pobre argumento de que a la gente “le pareció que había ocurrido así”.
¿Qué mentiroso es capaz de morir por defender una mentira, sabiendo que es mentira?
Si la resurrección de Jesús hubiese sido una alucinación, el cristianismo se habría extinguido en sus mismos orígenes.
Esta idea choca frontalmente contra el comportamiento de los discípulos de Jesús, ya que ninguno de ellos tenía la esperanza de que resucitaría al tercer día.
Existen numerosas hipótesis y legendas contrarias a la resurrección o que pretenden negar la realidad histórica de la misma.
Toda criatura humana es también como un caminante de la historia. El Maestro se hace presente en los senderos de la humanidad.
Los cristianos que se reajustan a la vida al salir del confinamiento deben buscar el bien común respetando la ley y siguiendo las directrices. Un artículo de Jonathan Tame.
El Dios de la Biblia no puede reducirse a la propia naturaleza creada por él mismo, como creyeron tantos filósofos materialistas a lo largo de la historia.
La Alianza Evangélica Europea elogia el trabajo de Ján Figel’, que acabó su mandato en 2019.
No podemos ignorar que una conciencia turbia significaría la pérdida de la confianza para acercarnos a Dios.
Si hay algo que Jesús ha dejado claro, en el N.T., es que Dios no es un sádico que se complace en hacer sufrir al ser humano.
Hay hechos que cuanto más avanza el conocimiento científico, más recalcitrantes se vuelven. Son sucesos que se resisten a cualquier intento de explicación científica.
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