El País ha publicado en su edición de este sábado un bochornoso artículo sobre el crecimiento de iglesias evangélicas en la zona de Carabanchel.
Cuando el hurto es parte de un sistema corrupto, no solo es culpable el ideólogo del delito sino también los partícipes necesarios.
Son numerosas las manifestaciones de creyentes denunciando la corrupción política y social. ¿Dan a su vez testimonio que en sus propias iglesias corrigen los pecados del sistema mundano que denuncian?
“A vivir en paz nos llamó Dios” afirma el Apóstol Pablo. Aquel judío transformado por Cristo pasó de perseguir a los discípulos del Mesías, a anunciar al mundo el Evangelio de Paz.
La gente que es llamada y apartada del mundo, lo es para ser enviada a servir en el mundo.
La tarea central de los Apóstoles consistió en dar cumplimiento a la misión que el Señor Jesucristo les había encomendado personalmente.
Merece analizarse por qué razones hoy, en muchos sitios, la mujer no ministra como lo hacía en el siglo I. Más teniendo en cuenta al Apóstol Pablo: “En Jesucristo somos uno; (…) ya no hay varón ni mujer”.
En algunas iglesias el diaconado es el primer escalón al obispado. En otras, es una institución separada del sacerdocio. El NT enseña que el sacerdocio universal es el eje de la iglesia de Jesucristo.
Un nuevo relato de Antonio Cárdenas.
Para ocuparse en la oración y el ministerio de la Palabra los Doce propusieron elegir a siete varones llenos del Espíritu Santo para servir a las viudas. Así nace como servicio de amor la ‘diaconía’ cristiana.
No hay poder humano comparable al Evangelio, poder de Dios para salvación de toda persona. Varones y mujeres, al entregarse a Jesucristo, gozan por igual de esta eterna salvación.
Que Dios no desacredita el testimonio de la mujer es tan cierto como que Su Hijo no vino ‘hecho hombre’ desde el Cielo. Nació de una mujer y sin la participación de un varón.
Jesús no tuvo reparos en incluir a mujeres en el círculo de sus más allegados.
El orden divino existía antes de la creación del ser humano. La rebelión contra Dios originó el egoísmo humano y el caos global. Aún así Dios tenía prevista la solución para el pecado.
Una cosa es creer en Dios, y otra muy distinta, creerle a Dios.
La verdad que apoya a la mujer expone las mentiras sobre las cuales la sociedad injusta dominada por el varón se apoyó siempre para justificar su propio fracaso.
Los miembros de la joven iglesia palmesana en la Calle de la Concordia viven el milagro de la Redención cada día. Predican el Evangelio que incluye a toda persona pues Jesucristo es amor y entrega cada día.
Acaba de regresar a Dios el espíritu del Dr. Billy Graham. Imperfecto - nadie es perfecto - este varón ha dejado un valioso legado. Le recordaremos por lo mucho bueno que aportó para la gloria de Dios.
El esfuerzo apocalíptico del Engañador es usar la Escritura como, cuando y donde él quiere. Seduce nuestra mente instilando su perversa versión del Evangelio: para que creamos que vivir en su jaula dorada es la verdadera libertad.
¿Quién podrá ponerse a trabajar, sino los redimidos, buscando un desarrollo humano y de la naturaleza que se base en principios y exigencias psicológicas, intelectuales, de dignidad de la persona, éticas, morales y religiosas?
¿Quién siendo niño no jugó a ser chofer de autobús, arquitecto, enfermera, futbolista, maestra, predicador, médica, camarero, o presidente de la nación? El quid del asunto es cómo debemos ejercer la ocupación siendo adultos.
“Primero fue su mujer Liliana la que entendió su cambio de identidad. Para hablarlo con sus hijas, recurrieron a profesionales que los orientaron y la familia salió adelante.” Así se difunde el derecho a la ‘diversidad de género’.
La autoridad impide el caos. Pero el exceso de ella hizo que la ira, la arrogancia y aun la brutalidad y el asesinato manchasen las páginas de la historia de la iglesia.
Cada día hay más estudios que demuestran que las sequías son muchas veces producto de la mano del hombre.
Año 2035: Sobre España cuelga una neblina gris, una gran boina, encima de una tierra que parece los restos de una barbacoa.
Los cristianos no siempre comprendemos y practicamos el amor de Dios. Vivir como Dios desea vivamos empieza por obedecer la autoridad de Jesucristo y la Palabra, dentro y fuera de las iglesias.
Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.