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Estados Unidos parece ir dejando atrás su prominente identidad religiosa y, en concreto, cristiana. Los últimos datos publicados por el centro de investigación Pew Research muestran que el número de personas que no se identifican con ninguna religión ha crecido en el país a razón de un 1% anual en los últimos catorce años.

Mientras que en 2007 la cantidad de estadounidenses que se identificaban como ateos, agnósticos y sin ninguna creencia religiosa en particular era del 16% de la población, en 2021 ha alcanzado al 29%, según Pew Research. “Los evidentes cambios de secularización en la sociedad estadounidense en lo que va de siglo XXI no muestran signos de desaceleración”, dicen los investigadores en su publicación. “La proporción de población sin identidad religiosa es seis puntos más alta que hace cinco años, y 10 puntos más que hace una década”, añaden.

Esta tendencia tampoco ha repercutido en el crecimiento de otras religiones que no sean la cristiana, que apenas han experimentado un cambio en su representatividad demográfica, pasando de un 5% de la población en 2007 a un 6% ahora. Ni siquiera el ateísmo y el agnosticismo militantes han experimentado un crecimiento sustancial. Hace 14 años ambos grupos representaban al 4% mientras que ahora alcanzan al 9%. Donde más repercute ese dato de cerca de tres de cada diez estadounidenses ‘sin creencias religiosas’ es en el grupo de población que sencillamente prefiere no identificarse con nada, que ha aumentado desde el 12% en 2007 al 20% en 2021.

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El protestantismo, el grupo más malparado

Como es de esperar ante cualquier dato relativo a la situación religiosa en Estados Unidos, el cristianismo es el grupo más afectado. Según Pew Research, el número de personas que de definen como cristianas en el país ha pasado del 78% en 2007 al 63% en 2021. “Los cristianos continúan constituyendo la mayoría de la población en los Estados Unidos, pero su proporción adulta es 12 puntos más baja en 2021 que en 2011”, aseguran desde Pew Research.

Dentro de las diferentes sensibilidades cristianas, el protestantismo en general es el grupo al que más afecta el aumento de la secularización en Estados Unidos. En concreto, si en 2007 un 52% de la población estadounidense se identificaba con alguna de las confesiones protestantes, ahora solo lo hace el 40%. Este descenso es mucho más sutil en el catolicismo, que en catorce años solo ha perdido tres puntos y ahora ahora representa al 21% del total de cristianos.

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“Dentro del protestantismo, los evangélicos continúan superando en número a los que no son evangélicos. Actualmente, el 60% de los protestantes responde ‘sí’ cuando se les pregunta si se consideran ‘cristianos nacidos de nuevo o evangélicos’, mientras que el 40% dice ‘no’ o se niega a responder la pregunta”, explican los investigadores.

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Una decadencia no solo en los datos

El descenso de representación del cristianismo en la sociedad estadounidense no es únicamente una cuestión de datos. Según la última Encuesta de Referencia de la Opinión Nacional Pública (NPORS, por sus siglas en inglés), también se refleja en la práctica religiosa cotidiana de la población. Si en 2007 era el 58% de los encuestados que aseguraban “orar a diario”, ahora solo es el 45%. 

También hay un descenso notable en la percepción del hecho religioso y la creencia para la vida misma, pasando del 56% de la población que así lo afirmaba en 2007, al 41% ahora. “Los datos disponibles indican que los estadounidenses también se están volviendo menos religiosos según esta medida”, dicen desde Pew Research. 

En este sentido, la tendencia parece ser similar a la que lleva años experimentando también el continente europeo. Por ejemplo, en Reino Unido parece que los cristianos están a punto de bajar del límite del 50% de la población, mantenido más o menos hasta ahora. 

En España, el ateísmo, el agnosticismo y la falta de identificación con ninguna creencia representa ya el 40% de la población.