Las denominaciones en Estados Unidos tienen garantizado su apoyo en el presente, aunque no puede decirse lo mismo respecto al futuro próximo. Es la conclusión a la que llega Lifeway Research en un estudio publicado este mes de junio sobre la manera en la que los pastores consideran a los organismos denominacionales.

Según la publicación, cerca de 8 de cada 10 pastores de iglesias que pertenecen a alguna denominación en la actualidad aseguran que es “vital” formar parte de un cuerpo denominacional, mientras que el 20% no está de acuerdo. El estudio de Lifeway Research alinea la opinión de los pastores y sus congregaciones, con el 77% de los líderes asegurando que sus comunidades también ven necesario identificarse con una denominación y el 21% que dice lo contrario.

La tendencia cambia cuando se proyecta en el futuro a corto plazo. En concreto, pensando en los próximos diez años, hasta el 63% de los pastores de iglesias que ahora pertenecen a una denominación creen que la importancia de identificarse con una entidad denominacional disminuirá, según Lifeway Research. La cifra no ha variado casi nada respecto a hace diez años, en 2010, cuando se registraba un 62%.

“Entre las iglesias protestantes en los Estados Unidos siguen habiendo divisiones y disputas denominacionales, el surgimiento de nuevas redes no denominacionales, tanto locales como nacionales, y la presencia de un gran número de iglesias que no pertenecen a ninguna denominación”, asegura Scott McConnell, director ejecutivo de Lifeway Research. “Esto plantea la pregunta de si aquellos dentro de las denominaciones protestantes todavía ven valor en ellas”, añade.

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Luteranos y pastores jóvenes, los más proclives a afirmar la importancia de las denominaciones

Las perspectivas también difieren en función del trasfondo de los pastores. Entre los que pertenecen a alguna de las llamadas denominaciones protestantes históricas, el 92% considera importante formar parte de un grupo denominacional, mientras que entre los evangélicos la cifra se reduce al 76%. En concreto, los pastores luteranos son los que otorgan una mayor importancia a la denominación (95%), mientras que los líderes del movimiento restauracionista los que menos (31%).

Por edades, los pastores más jóvenes (18-44 años) son los más proclives a considerar la identidad y la pertenencia denominacional como importante (83%), más que los de 65 años o más (74%). 

La relevancia de las denominaciones está más arraigada también entre los pastores blancos (80%) que entre los afroamericanos (63%). De hecho, en el mes de abril, una publicación del centro de investigación Pew Research señalaba que para la mayoría de los pastores negros es más importante una congregación acogedora y una predicación inspirada que una etiqueta denominacional.

“Muchos, incluidos los pastores, que predijeron la desaparición de las denominaciones protestantes en los Estados Unidos han demostrado no ser proféticos”, dice McConnell. “El hecho de que los pastores más jóvenes sean menos pesimistas [en cuanto a la importancia futura de las denominaciones] podría indicar mejores días para las denominaciones o, quizá, menos recuerdos de los peores días”, remarca.