Fue el vicepresidente Joe Biden quien lanzó el pasado domingo lo que en lenguaje periodístico se llama un “globo sonda” (avanzar una opinión polémica para medir su impacto social) posicionándose a nivel personal a favor del matrimonio homosexual. Tres días después llegaba la confirmación del propio presidente. Obama se mete definitivamente en campaña anunciando uno de sus promesas estrella: si él gana, los gays y lesbianas podrían casarse.
Barack Obama ha explicado en en una entrevista con la cadena de televisión ABC que después de varios años de reflexión y “evolución” sobre este asunto, “he concluido que es importante para mí dar un paso adelante y afirmar que creo que las parejas del mismo sexo deberían poder casarse”.
En la entrevista, que ha concedido en la propia Casa Blanca, Obama dice que siempre había creído que los homosexuales deberían de tener los mismos derechos que los heterosexuales, pero que mantenía dudas sobre la legalización del matrimonio por respeto a la tradición y a las objeciones religiosas de muchas personas, y también porque creía que las uniones civiles podían ser suficientes para garantizar esos derechos.
Añadía que después de haber comprobado el efecto que produjo la eliminación de las restricciones a los homosexuales en el Ejército,
ha llegado a la conclusión que el matrimonio homosexual debería de ser legal. También expresaba durante la entrevista que el ver de cerca el cambio de opinión en los campus universitarios e incluso algunas conversaciones con sus hijas, le han llevado a expresar su posición con más claridad.
Algunos creen quela evolución de Obama no ha sido tal, y que llevaba años teniendo una opinión clara sobre el tema, pero que no la expresaba por el riesgo político que hubiera significado. Una web especializada en política comenta: “Nadie puede mirar dentro de la mente de Obama, pero la explicación más probable a este misterio es que él simplemente no ha sido honesto sobre su verdadera opinión acerca del matrimonio homosexual”.
IMPACTO SOCIAL Y POLÍTICO
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Muchos grupos progresistas, dentro y fuera del partido Demócrata han salido a felicitar al presidente por lo que consideran “un paso histórico”. Sin embargo, los expertos creen que posicionarse tan claramente en un debate que lleva años dividiendo a la sociedad estadounidense puede complicar su reelección.
La legalización del matirmonio gay y su equiparación al matrimonio heterosexual no sólo no recibe el apoyo de la mayoría de votantes conservadores, sino que también choca con la visión de una parte de los votantes demócratas.
Las uniones entre personas del mismo sexo cuentan hoy con el respaldo del 50% de los norteamericanos y la oposición del 48%, según la última encuesta de Gallup, es decir, es un tema que divide por la mitad a la nación. Y la divide, además, de una forma irregular. Muchos de los tradicionales votantes demócratas están en el campo de los que se oponen. Un 55% de los afroamericanos, por ejemplo, lo rechazan. Similar puede ser la situación entre los hispanos, en su mayoría católicos.
MITT ROMNEY SE REAFIRMA EN CONTRA
El Partido Republicano y su futuro candidato a la presidencia Mitt Romney han respondido al anuncio de Obama de forma contundente. “Tengo la misma opinión que tenía cuando era Gobernador y que he repetido en numerosas ocasiones”, ha dicho Romney. “Creo que el matrimonio es la relación entre un hombre y una mujer”, ha dicho el empresario, de fe mormona. Hace unos meses ya había apuntado que tampoco está a favor de las uniones civiles “si estas suponen una equiparación total con el matrimonio excepto en el nombre”. Romney sí aceptaría es un “acuerdo de asociación” entre personas del mismo sexo.
¿CONSECUENTE CON LA ÉTICA CRISTIANA?
Barack Obama ha hablado varias veces en los últimos años de su fe en Dios y se define como cristiano evangélico. Sin embargo,
su clara apuesta por dar la definición de “matrimonio” a las uniones homosexuales y su redefinición del concepto bíblico podría ser una razón de peso para que muchos votantes cristianos socialmente progresistas pero moralmente conservadores (la mayoría) se replanteen su voto.
La conversación en los medios de comunicación y las encuestas de opinión mostrarán si el anuncio de Obama llevará a un cambio en la opinión pública.
El debate sobre ética, derechos y orientación sexual, que ya estaba presente por el proceso de votaciones en varios Estados, tomará ahora aún más fuerza. Se prevé que los grupos de presión, en un lado y en el otro, intentarán desequilibrar la balanza a su favor y se alinearán más claramente con un candidato u otro, en los próximos meses.
LOBBY GAY: CAMPAÑA DE AGRADECIMIENTO
La mayoría de colectivos de defensa de los derechos de los homosexuales no han tardado en salir a felicitar al presidente por su decisión. El mayor lobby gay del país, llamado “Human Rights Campaign”
, ha organizado ya una campaña de envío de correos electrónicos de agradecimiento a la Casa Blanca. "Hoy, el presidente Obama ha tenido la audacia de hacer historia al afirmar que los estadounidenses gays y lesbianas deberían ser parte plena e igualitaria de la estructura de la sociedad y que nuestras familias se merecen nada menos que el mismo respeto y reconocimiento que otorga algo como el matrimonio”, ha dicho el presidente de esa agrupación, Joe Solmonese.
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