Ayunar, clamar, unirse, dar y celebrar. Estas son las cinco acciones que el proyecto ‘Live58:’ está impulsando a nivel mundial para acabar con la pobreza extrema. Los impulsores se definen “cristocéntricos” en sus enfoques y “revolucionarios” en la forma de llevar a cabo la misión. Aseguran que el cinismo ha quedado obsoleto ante la realidad de que la pobreza extrema puede ser erradicada en una sola generación.
La solución está más cerca de lo que creemos. Con esta ideas ‘Live58:’ quiere llamar a los cristianos a soñar con acabar con la pobreza extrema en el mundo. Basándose en estadísticas de los últimos 20 años, los impulsores aseguran que “la evidencia está haciendo callar a los cínicos”.
Todo empieza por acercarse al
libro de Isaías, en la Biblia, y leer con atención el capítulo 58. La pregunta a la que la organización quiere responder es: ¿qué es el verdadero ayuno? Una vez uno entiende la visión de Dios, el siguiente paso es “crear, perfilar y participar en comunidades de cristianos apasionados y con la misma visión, que trabajen juntos para acabar con la pobreza durante el tiempo de nuestras vidas”.
El título del proyecto está inspirado en “vivir” activamente lo que los cristianos creen. Si los cristianos realmente actúan en función de lo que Dios opina sobre las personas necesitadas,
“podemos ser liberados de la tiranía de nuestras expectativas bajas”, explica el
doctor Scott Todd en un vídeo explicativo. “Creo que el mensaje de Isaías 58 es el mismo que necesitamos escuchar hoy en día: basta de palabrerías”. “Dios nos ha dado el mandato y todos los recursos que necesitamos: dinero, conocimiento, influencia y un tiempo limitado en esta Tierra, en el que podemos hacer una diferencia”.
UNA PELÍCULA PARA EXPLICAR QUE ES POSIBLE
Una de las iniciativas de movilización más importantes es la película ‘58:’ será la proyección de una película, que se ha mostrado ya en más de 50 cines.
La página web, Live58.org ofrece los derechos de reproducción de forma gratuita a quienes quieran hacer una proyección en su país.
A partir de enero, el film protagonizará una gira por diferentes países. Utilizando la cifra que marca el año 2012, se presentarán 12 causas ligadas a 12 nuevos proyectos.
@MULT#IZQ#48159@En el tráiler de la película(a la izquierda de estas líneas) se plantea el reto de eliminar de una vez por todas del planeta Tierra la pobreza extrema. Un reto que debería emocionar especialmente a los cristianos
: “A los que somos hijos de Dios simplemente no se nos ofrece la opción de no hacer nada”.
PROYECTOS MUY CONCRETOS
Los impulsores hacen un fuerte énfasis en la iniciativa individual que puede tener una persona individual. A través de
vídeos, libros, guías para estudios bíblicos, uno puede involucrarse en su propio ámbito de actuación. “Tus amigos, tu iglesia, tu grupo de hogar, tu clase o tu empresa… Juntos estamos creando una alianza de cristianos sin precedentes, iglesias y organizaciones que luchan contra la pobreza”. La estrategia está en la conexión de personas en forma de equipos, que se comprometen a actuar apoyando proyectos concretos.
El vídeo de presentación del proyecto (en inglés) explica de forma sencilla la visión que ha levantado el proyecto.
Más allá del trabajo de concienciación y de difusión de los valores, ‘Live58:’ es el paraguas de miles de proyectos específicos de organizaciones lugares del mundo muy diferentes. Desde la distribución de semillas para fomentar la agricultura en poblados sin recursos hasta la formación de nutricionistas en áreas con hambruna.
‘DESAFÍO MIQUEAS’ ENTRE LOS IMPULSORES
Apoyan el proyecto 10 grandes organizaciones humanitarias de inspiración cristiana. Entre ellas se encuentra Desafío Miqueas, que en España está siendo impulsado por Alianza Evangélica.
Comparten el sueño de completar la erradicación de la pobreza extrema. Y hacerlo en base a una visión claramente bíblica, reflejando el deseo de “hacer justicia, amar misericordia y humillarse ante Dios”, tal como lo reflejan las palabras del propio libro de Miqueas.
Una de las marcas distintivas de
Desafío Miqueas es su trabajo a la hora de exigir a las autoridades políticas el cumplimiento de los “Objetivos del Milenio”, que un total de 189 países en el mundo se comprometieron a alcanzar para el año 2015.
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