‘Tres siglos de periodismo protestante’, por Valentín Cueva

Tal como suelo hacer en ocasiones cuando escribo crítica de libros, primero presento al autor.

Valentín Cueva nació el 6 de julio de 1945, aquellos años del hambre y de racionamiento. Vino al mundo en la pequeña aldea de Balbona, en Asturias. Al quedar viuda, la madre decidió trasladarse a Madrid. En la capital de España entró como aprendiz en una imprenta, el mejor lugar para aprender a escribir manejando las letras. El dueño de aquella imprenta, Ángel Gil, era miembro de la iglesia bautista que se reunía en la calle General Lacy. En esta Iglesia tuvo lugar su conversión, siendo bautizado el primer día de enero de 1961.

En agosto de 1968 contrajo matrimonio con Aurea Harnero. El matrimonio tiene dos hijos, Nohemí y Jorge Juan.

Deseando prepararse para el ministerio pastoral ingresó en el Seminario Bautista Español. Después de su graduación sirvió como pastor en iglesias de Gandía y Denia. Una vez jubilado optó por un segundo ministerio de carácter secular. Diplomado en Enfermería colabora con el hospital Francisco de Borja en Gandía. Atiende a los cuerpos y trata de salvar las almas para que alcancen un destino de gloria en la eternidad.

El libro que estoy comentando es una abultada continuación del que presentó en 1997 con motivo del VI Congreso Evangélico Español con el título Historia Ilustrada de los Protestantes Españoles.

El escritor y teólogo Máximo García Ruiz dice en el prólogo: “En esta obra enciclopédica, ilustrada con centenares de imágenes recuperadas de muy diversas fuentes con la precisión de un entomólogo, subyace la intrahistoria del protestantismo español, contada al hilo de lo que cada número de la revista a lo largo de 129 años de recorrido que abarca”.

Esos 129 años que menciona García Ruiz se refiere al primer número de la revista El Eco de la Verdad, publicado por la Unión Evangélica Bautista Española (UEBE) en enero de 1893, siendo Enrique Lund su primer director. Lund era misionero sueco instalado en Cataluña. El primer número de El Eco de la Verdad llevaba esta especie de declaración de intenciones: “Revista cristiana independiente de las tradiciones humanas, órgano de las Iglesias Evangélicas denominadas bautistas”.

Los primeros capítulos de Tres siglos de periodismo protestante están dedicados a contar la historia de El Eco de la Verdad, algo normal teniendo en cuenta que es el primer objetivo que persigue su autor. Cueva realiza este trabajo con un sentido de la historia y una escrupulosidad admirables. Por esos capítulos pasan los hombres y mujeres (menos) que se involucraron en la escritura y la evangelización con corazón, cuerpo y alma. No sólo trata de la revista, Cueva detalla los más importantes acontecimientos que protagonizó la UEBE como denominación. Esta característica se repite a lo largo de las quinientas páginas del libro, algo normal.

Pero Cueva no olvida en este libro al resto de denominaciones que han trabajado mucho y bien la evangelización del país. Estudiando este tema en el libro que estoy comentando observo que el autor no margina a otros grupos. Escribe sobre líderes destacados de varias denominaciones: Iglesia Española Reformada Episcopal, Asambleas de Hermanos, Asambleas de Dios de España, Federación de Iglesias Evangélicas Independientes de España, Iglesias de Cristo, Iglesia Evangélica Española y otras.

En página 439 Cueva rinde un homenaje a todos “los protestantes españoles por su fe heroica ante la intolerancia, su contribución a la libertad religiosa y el servicio y la convivencia a sus ciudadanos”. Otro homenaje “a los misioneros evangélicos foráneos y sus familias que nos sembraron y legaron con esfuerzo y tesón: el amor a la Biblia, un cristianismo más evangélico, sus dones, y lo mejor de ellos mismos”.

En este libro me ha impresionado la cantidad de fotografías que contiene. Me he tomado el trabajo de repasar una a una sus 510 páginas y anotar el resultado. Cueva reproduce en su obra 702 fotos de individuos y 169 de grupos de personas. ¡Grandioso! ¡Monumental! Son fotografías de líderes del protestantismo español de antes y de ahora. Desde los que iniciaron la segunda reforma, hombres como Cabrera, Matamoros, Villaespesa, Ruet y otros hasta los jóvenes que se graduaron este verano para ejercer el ministerio pastoral. En la relación de líderes del protestantismo español figuran nombres de hombres de quienes ni siquiera habíamos oído. Es uno de los valores que tiene este libro. Ante las 702 fotografías de individuos y 169 de grupos a los que he aludido, caben dos preguntas: ¿Tiene Cueva un archivo propio donde conserva tantas fotografías? De ser así, menudo archivo. ¡Qué envidia! Por otro lado, ¿son el resultado de investigaciones en libros y revistas? En este caso el trabajo debe haberle llevado años, mucha paciencia y dedicación.

El filósofo, poeta, dramaturgo y novelista Wolfgang Goethe dijo que “lo mejor que debemos a la historia es el entusiasmo que inspira”. Cueva ha escrito la historia de una revista, El Eco de la Verdad; la historia de una familia denominacional, los bautistas; la historia de un pueblo, los protestantes españoles. Estas historias producen entusiasmo en quienes ahora las lean. El entusiasmo, como lo concibió García Lorca, es la fe candente, la fe al rojo vivo, esa fe que llevó a Valentín Cueva a escribir esta maravilla de libro al que he dedicado cuatro días de mi tiempo para leerlo y comentarlo.