Premios Príncipe de Asturias: primeros y últimos

La capital de los Príncipes de Asturias, Oviedo, un año más se vistió de gala para recibir la trigésimo tercera edición de los Premios Príncipe de Asturias, galardones que contribuyen a la exaltación y promoción de los valores científicos, culturales y humanísticos que son patrimonio universal, fueron presididos, como de costumbre, por los Reyes de España, solo que esta vez eran los primeros premios que vivían como soberanos, al lado de Doña Sofía.

Además de los Reyes de España, en el Teatro Campoamor se diercon cita muchas otras personalidades del ámbito social y político para ser testigos de la entrega de los ocho galardones que se otorgan en estos premios.

LOS PREMIADOS

Los galardonados en esta entrega fueron: con el premio Príncipe de Asturias de las Artes el Arquitecto estadounidense Frank O. Genhry, cuyos edificios se caracterizan por un juego virtuoso con formas complejas, por el uso de materiales poco comunes, como el titanio, y por su innovación tecnológica, que ha tenido repercusión también en otras artes. El Premio de Ciencias Sociales recayó en el historiador francés Joseph Pérez, por sus aportaciones a la investigación y divulgación de la historia de España y América.

El Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y humanidades fue para Joaquín Salvador Lavado Tejón, dibujante argentino mundialmente conocido como Quino, creador del universo de Mafalda, una niña que percibe la complejidad del mundo desde la sencillez de los ojos infantiles. Mafalda, la principal protagonista del trabajo creativo de Quino, es inteligente, irónica, inconformista, contestataria y sensible.

El Premio de Investigación Científica y Técnica se concedió al químico Avelino Corma Canós (España), al ingeniero químico Mark E. Davis (Estados Unidos) y al químico físico Galen D. Stucky (Estados Unidos), por sus contribuciones al desarrollo de los materiales microporosos y mesoporosos y sus aplicaciones.

El novelista irlandés John Banville recibió el Premio Príncipe de Asturias de las Letras por su inteligente, honda y original creación novelesca, y a su otro yo, Benjamín Black, autor de turbadoras y críticas novelas policiacas.

El Premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional fue para el Programa Fulbright de intercambio educativo y cultural, diseñado para mejorar y estrechar los lazos y el mutuo entendimiento entre los ciudadanos del mundo.

En el área de deportes, el premio fue para el Maratón de Nueva York, uno de los acontecimientos deportivos más importantes del mundo.

Y finalmente el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia se otorgó a la periodista congoleña Caddy Adzuba, como símbolo de la lucha pacífica contra la violencia que afecta a las mujeres, la pobreza y la discriminación, a través de una labor arriesgada y generosa.

EL REY APELA A LA UNIDAD

Los galardones fueron seguidos por el discurso del Rey Don Felipe VI, en el que recordó entre otras cosas que "Se debe hacer de España una nación ilusionada, llena de vida y de pensamiento; llena de ideas que merezcan la confianza de los ciudadanos; de proyectos que atraigan la mente y la voluntad de todos y conquisten sus corazones". Toca alejarse del pesimismo, la desconfianza y el desencanto. "Queremos también una España alejada de la división y de la discordia".

España afronta una de las "crisis económicas más profundas. Un mundo que camina hacia una mayor integración y no al contrario. Es un futuro complejo, claro que sí; pero lleno de nuevas oportunidades. Ese es uno de los grandes retos que tenemos como país". Y ha continuado: "Sigamos, en fin, el viejo consejo de Unamuno: Haced riqueza, haced patria, haced arte, haced ciencia, haced ética'. Ha finalizado recordando a los premiados, "el mayor patrimonio de nuestra fundación", y a los que reconoce sus méritos y valores. "Pues, como afirmaba nuestro querido Vicente Ferrer, hacer el bien sirve para llenar una vida. Hacer el bien a los demás, señoras y señores, sirve para darle sentido a una vida".

Una vez finalizado su discurso, el Rey ha convocado a los asistentes a los próximos premios “Príncipe de Asturias 2015”, ha dicho el Rey, quien se ha equivocado, pero rectificado rápidamente “Premios Princesa de Asturias 2015” y con las risas de los invitados terminó esta trigésima tercera y “última” entrega de los premios Príncipe de Asturias 2014.