jueves, 11 de septiembre de 2025   inicia sesión o regístrate
 
Protestante Digital

 
 

Daniel, “varón muy amado”

Dios no se olvidó de Daniel en la parte que él más necesitaba: Sentirse amado por el Dios a quien servía, en medio de tanto rechazo y tensión que le creaban sus enemigos.

PALABRA Y VIDA AUTOR 942/Angel_Bea 10 DE SEPTIEMBRE DE 2025 15:40 h
Foto: [link]Kyle Loftus[/link], Unsplash CC0.

Sabemos que el hombre y la mujer fueron creados para amar y ser amados; y alguien dijo que todos hemos fracasado en dar amor; por tanto, ni hemos podido recibirlo tal y como lo necesitábamos, ni tampoco lo hemos dado en la medida que nuestro prójimo lo esperaba de nosotros.



[ads_google]div-gpt-ad-1623832500134-0[/ads_google]



La situación se agrava para muchos seres humanos cuando han vivido y viven en contextos donde lo que han experimentado es lo contrario al amor: la indiferencia, el rechazo evidente, las palabras hirientes, las maldiciones, el maltrato psicológico y hasta físico, han sido el pan de cada día de muchas criaturas.



Y sobre todo, en los años de muchas dificultades como suelen ser los tiempos de las guerras y pos-guerras. Esto último lo vemos todos los días del año. Los resultados son grandes y graves daños; heridas en el corazón que a menos que suceda un milagro, no pueden sanar fácilmente. Y muchos milagros tendrían que suceder para sanar tanto dolor.



El profeta Daniel era de los judíos que habían sido deportados a Babilonia, cuando todavía era un muchacho. No sabemos lo que había vivido en su hogar.



Lo más probable es que fuese atendido en sus necesidades emocionales, tal y como se caracterizaban las madres en Israel, amantes de sus hijos y encargadas de su educación hasta la edad de entrar en las escuelas rabínicas.



Pero lo que sí sabemos es que Daniel, una vez llevado cautivo a Babilonia con una gran compañía de judíos, llegó a ocupar un lugar prominente en la corte del rey, a causa de su sabiduría.



Eso que en un sentido le favoreció a él y a sus amigos, también fue la causa de muchas envidias, intrigas y persecución contra ellos por otros altos dignatarios, cuyos celos habían despertado.



Es en ese contexto en el cual Daniel siempre mantuvo su fidelidad a pesar del peligro que corría su vida; y no era fácil mantenerse fiel en ese contexto. Pero esa fue la razón por la cual Dios lo usó dándole palabras de revelación, tanto para sí mismo como para el rey de Babilonia y para su pueblo Israel (D.10.1).



Sin embargo, Dios no se olvidó de Daniel en la parte que él más necesitaba en ese tiempo: Sentirse amado por el Dios a quien servía, en medio de tanto rechazo y tensión que le creaban sus enemigos.



Por eso, las primeras palabras que Daniel recibió de aquel varón apocalíptico que apareció en su visión, fueron: “Daniel, varón muy amado”. (D.10.5-6) Dichas palabras le fueron repetidas en el versículo 19. Muy necesitado tendría que haber estado Daniel para recibir tal mensaje directamente de parte de Dios.



Por eso, Dios quería que Daniel supiera que él era muy amado por Él. Pero además, dichas palabras fueron acompañadas de otras que llevaban en sí mismas el poder para liberarle de todo temor, llenarle de paz, fortalecerle y alentarle:



“Y aquel que tenía semejanza de hombre me tocó otra vez y me fortaleció, y me dijo: Muy amado, no temas; la paz sea contigo; esfuérzate y aliéntate. Mientras me hablaba, recobré las fuerzas…” (D.10.18-19).



Un psicólogo no lo puede hacer mejor. Seguramente muchos de nosotros hemos conocido la falta de ese amor completo que necesitábamos en el tiempo cuando estábamos creciendo y, a más, es posible que muchos hayan sufrido grandes daños internamente, por causa del rechazo.



[ads_google]div-gpt-ad-1623832402041-0[/ads_google]



Sin embargo, cuando venimos al Señor, la base primordial de nuestra fe es saber que Dios es amor y nos ama con amor eterno. Él lo ha hecho “de tal manera que ha dado a su Hijo…” por todos nosotros, (J.3.16).



Por tanto, cuando le reconocemos y aceptamos como nuestro Salvador, Señor y Maestro, descubrimos que somos aceptados por Dios, en la persona de su Hijo a quien él reconoció repetidamente como “mi Hijo amado” (Mat..3.17; 17.5 y Ef.1.6).



Luego, descubrimos también que lo recogido por las Escrituras sobre este tema, es tanto una realidad como una promesa que hemos de creer y aceptar por la fe, mientras luchamos, quizás, con sentimientos encontrados en nuestro interior.



No son pocos los hijos de Dios que luchan con este sentimiento del rechazo y la falta de aceptación por lo vivido en el pasado ¡aun en sus propios hogares! ¿Y por qué no reconocerlo? Muchos creyentes, habiendo tenido esa falta de aceptación y habiendo experimentado incluso rechazo buscan en las iglesias la aceptación por parte de los demás.



Esa realidad se da a veces al ejercitar sus dones espirituales. Es decir lo que se hace no es tanto con la motivación de servir a los demás por amor y sin ninguna pretensión, sino el buscar la aceptación y el reconocimiento de los demás a través de lo que se hace. Y si es un ministerio relevante como el de “pastor” mucho más todavía. Pero ese no es el camino; ese es un camino equivocado que nos llevará a la frustración.



Lo más probable es que, en un momento, a lo largo del camino de nuestra vida cristiana y cuando menos lo esperamos, conscientes de nuestra gran necesidad de aceptación, puede que llegue a nosotros esa Palabra de Dios susurrante, pero poderosa y firme, por el poder del mismo Espíritu de Dios, comunicándonos libertad de todo temor, infundiéndonos paz, fortaleza y aliento, mientras nos parece oír al Padre decir: “porque tú… eres muy amado/amada para mí”.



Da igual quien quiera que seas; una vez que lo sabes de primera mano, habrás experimentado la sanidad de las heridas de tu corazón por causa del rechazo.



Te digo esto querido lector/lectora, porque esas palabras que recibió Daniel de parte de aquel “varón” que le apareció, también formaron parte de mi propia experiencia personal, hace muchos años, cuando de forma muy especial pude saber tanto de manera objetiva -porque la Palabra de Dios lo dice y yo siempre lo creí- como de forma subjetiva, por el Espíritu de Dios ¡que yo también soy amado y aceptado por Él como jamás había soñado!



¡Y no importa que yo sea un insignificante número entre miles de millones de seres humanos! Yo soy amado por Dios en la persona de su Hijo Jesucristo. Y estoy seguro que así debe ser también con cada uno de sus “hijos e hijas” (2ªCo. 6.18).



Sin embargo, no hemos de pasar por alto la razón por la cual a Daniel se le comunicaron estas valiosas palabras de parte de Dios. El varón que le apareció, le dijo:



"Daniel, no temas; porque desde el primer día que dispusiste tu corazón a entender y a humillarte en la presencia de tu Dios, fueron oídas tus palabras y a causa de tus palabras yo he venido" (Da. 10.12).



Estas palabras de aquel ser que apareció a Daniel, el profeta, ponen de manifiesto que Daniel tenía todas las cualidades necesarias para estar delante la presencia de Dios y recibir su bendición.



Si atendemos a dichas palabras, esas cualidades son:



1) Disposición de corazón para entender todo lo referente a la voluntad de Dios para su vida y la vida de su pueblo;



2) Disposición humilde delante de la presencia de Dios, que es del todo necesaria para acercase a Él sin ninguna pretensión, excepto lo que Dios quiera otorgarnos; y Él no es escaso en otorgar su bendición.



Por eso no basta con hacer una mera "profesión de fe" en Jesucristo. Se hace necesario estar dispuestos a seguirle como discípulos suyos, con oídos abiertos para oír y el corazón dispuesto para obedecer.



Sólo así se podrán recibir y disfrutar todos los demás recursos divinos destinados para nuestra bendición. Y uno de ellos es el saber que en la persona de Jesús, el Hijo de Dios somos “muy amados” por Él.



Recibe el contenido de Protestante Digital directamente en tu WhatsApp. Haz clic aquí para unirte.


 

 


0
COMENTARIOS

    Si quieres comentar o

 



 
 
ESTAS EN: - - - Daniel, “varón muy amado”
 
 
AUDIOS Audios
 
La década en resumen: teología, con José Hutter La década en resumen: teología, con José Hutter

La conmemoración de la Reforma, las tensiones en torno a la interpretación bíblica de la sexualidad o el crecimiento de las iglesias en Asia o África son algunos de los temas de la década que analizamos.

 
Intervalos: Disfruten de la luz Intervalos: Disfruten de la luz

Estudiamos el fenómeno de la luz partiendo de varios detalles del milagro de la vista en Marcos 8:24, en el que Jesús nos ayuda a comprender nuestra necesidad de ver la realidad claramente.

 
2020, año del Brexit 2020, año del Brexit

Causas del triunfo de Boris Johnson y del Brexit; y sus consecuencias para la Unión Europea y la agenda globalista. Una entrevista a César Vidal.

 
7 Días 1x08: Irak, aborto el LatAm y el evangelio en el trabajo 7 Días 1x08: Irak, aborto el LatAm y el evangelio en el trabajo

Analizamos las noticias más relevantes de la semana.

 
FOTOS Fotos
 
Min19: Infancia, familia e iglesias Min19: Infancia, familia e iglesias

Algunas imágenes del primer congreso protestante sobre ministerios con la infancia y la familia, celebrado en Madrid.

 
X Encuentro de Literatura Cristiana X Encuentro de Literatura Cristiana

Algunas fotos de la entrega del Premio Jorge Borrow 2019 y de este encuentro de referencia, celebrado el sábado en la Facultad de Filología y en el Ayuntamiento de Salamanca. Fotos de MGala.

 
Idea2019, en fotos Idea2019, en fotos

Instantáneas del fin de semana de la Alianza Evangélica Española en Murcia, donde se desarrolló el programa con el lema ‘El poder transformador de lo pequeño’.

 
VÍDEOS Vídeos
 
Héroes: un padre extraordinario Héroes: un padre extraordinario

José era alguien de una gran lealtad, la cual demostró con su actitud y acciones.

 
Programa especial de Navidad en TVE Programa especial de Navidad en TVE

Celebración de Navidad evangélica, desde la Iglesia Evangélica Bautista Buen Pastor, en Madrid.

 
Primer Congreso sobre infancia y familia, primera ponencia Primer Congreso sobre infancia y familia, primera ponencia

Madrid acoge el min19, donde ministerios evangélicos de toda España conversan sobre los desafíos de la infancia en el mundo actual.

 
 
Síguenos en Ivoox
Síguenos en YouTube y en Vimeo
 
 
RECOMENDACIONES
 
PATROCINADORES
 

 
AEE
PROTESTANTE DIGITAL FORMA PARTE DE LA: Alianza Evangélica Española
MIEMBRO DE: Evangelical European Alliance (EEA) y World Evangelical Alliance (WEA)
 

Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.