La sonrisa de Dios brilla en todo el universo con la belleza de la vida que nos regala y esa misma gracia se descubre en todas las cosas que Él ha creado.
Juan Luís Guerra es uno de los cantantes latinos más premiados a lo largo de la historia: diecinueve grammys ganados en toda su carrera le avalan. En el año 2007 consiguió ¡siete! grandes premios con el disco La llave de mi corazón. Todo el mundo le conoce por su calidad musical y la sensibilidad de sus canciones… pero también por el hecho de querer honrar a Dios en todo lo que hace. Sus primeras palabras de agradecimiento en la entrega de los grammys de ese año fueron dirigidas al Señor Jesús.
[ads_google]div-gpt-ad-1623832500134-0[/ads_google]
Todos podemos hablar de lo que Dios ha hecho en nuestra vida, no necesitamos ser predicadores ni pasar la vida en la iglesia para hacerlo. Testificar es simplemente contar a los que nos rodean que amamos al Señor, y que nuestra vida no tendría sentido sin Él. Eso es lo normal, porque cuando Dios vive dentro de nosotros, nuestro corazón rebosa alegría y nuestros ojos brillan… ¡No podemos hablar de Él sin que nuestra mirada delate nuestro amor por el Señor!
Uno de los compositores de los salmos (las canciones del pueblo de Dios en la antigüedad) lo explicó de una manera sublime: “Los que miran al Señor resplandecen de alegría y jamás se verán defraudados” (Salmo 34:5). La alegría encuentra su hogar dentro de nuestro corazón, porque se ve en el espejo del rostro del Señor.
Nuestro Padre Celestial se siente “feliz” cuando ve que nuestro rostro resplandece de alegría, cuando puede distinguir en nosotros algunas de sus propias cualidades. Para comprender de qué estamos hablando, tenemos que recordar que cada persona en esta tierra tiene un carácter diferente, pero la manera de ver la vida, la sonrisa y el entusiasmo, o por el contrario, el pesimismo, la tristeza o la melancolía solemos recibirlo de nuestros padres. ¡Y ese es el legado que también le dejamos a nuestros hijos! Por eso debemos sentirnos felices cuando vemos sonreír a nuestros hijos.
En hebreo, el idioma en el que fue escrito el Antiguo Testamento, se dice que nuestro rostro “resplandece” cuando sonreímos, porque llenamos de luz nuestro ser y el de los que nos rodean. Por eso la bendición de Dios es que su rostro resplandezca sobre nosotros. Cuando Dios mira a sus hijos, sonríe, y su luz llena cada rincón de nuestra alma. La sonrisa de Dios brilla en todo el universo con la belleza de la vida que nos regala y esa misma gracia se descubre en todas las cosas que Él ha creado. Por eso jamás vivimos defraudados: desalentarse y desesperarse son verbos que no sabemos conjugar.
Mira hacia el cielo: Dios sonríe al verte.
La conmemoración de la Reforma, las tensiones en torno a la interpretación bíblica de la sexualidad o el crecimiento de las iglesias en Asia o África son algunos de los temas de la década que analizamos.
Estudiamos el fenómeno de la luz partiendo de varios detalles del milagro de la vista en Marcos 8:24, en el que Jesús nos ayuda a comprender nuestra necesidad de ver la realidad claramente.
Causas del triunfo de Boris Johnson y del Brexit; y sus consecuencias para la Unión Europea y la agenda globalista. Una entrevista a César Vidal.
Analizamos las noticias más relevantes de la semana.
Algunas imágenes del primer congreso protestante sobre ministerios con la infancia y la familia, celebrado en Madrid.
Algunas fotos de la entrega del Premio Jorge Borrow 2019 y de este encuentro de referencia, celebrado el sábado en la Facultad de Filología y en el Ayuntamiento de Salamanca. Fotos de MGala.
Instantáneas del fin de semana de la Alianza Evangélica Española en Murcia, donde se desarrolló el programa con el lema ‘El poder transformador de lo pequeño’.
José era alguien de una gran lealtad, la cual demostró con su actitud y acciones.
Celebración de Navidad evangélica, desde la Iglesia Evangélica Bautista Buen Pastor, en Madrid.
Madrid acoge el min19, donde ministerios evangélicos de toda España conversan sobre los desafíos de la infancia en el mundo actual.
Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.
Si quieres comentar o