Para que no enferme lo Sagrado

1) Un testamento de inacabable pureza y de densa justicia: el Evangelio.

2) Horizonte de sucesos para una mirada sin fondo. Así conviven el dramatismo y la esperanza; así se plantea el derecho al futuro.

3) Mi oración es para que no enferme lo sagrado.

4) Ácido corrosivo que horada los cimientos de la cristiandad es el que destilan ciertos responsables de ofrecer la Palabra bajo el cómodo paraguas de no actuar en línea recta con el desprendimiento de Cristo. Tal contraste genera, en la ciudadanía no creyente, un desdén hacia tal persona y un rotundo desprecio a la fe que dice representar.

5) Ardiente es el silencio del que se reconcentra para Amar.

6) Considérate pequeño, pero con la posibilidad de saber a qué viniste o por qué rasguña el pensamiento.

7) La fe rejuvenece al hombre enternecido, a la mujer que redobla su fulgor lejos de cualquier amuleto. La fe no sirve para estar tocando campanas. Tampoco para procesionar lleno de lentejuelas. La fe electriza y permite ver la mesa del futuro, la cena de la Bienvenida.

8) Envidia de siglos acumulan los de murmuradora lengua.

9) ¿Recuerdan aquellas iniquidades del Santo Oficio? No entiendo cómo por el castigo se podía obligar a creer. Este tipo de dominación religiosa, esta forma de inculcar miedo no tiene límites ni épocas. ¿Desde qué extraño precipicio salen esos horribles oficiantes? Ninguna plegaria aplaca su sed de censura, tan en reverso de las bondades del Reino.

10) Acércate a todo aquello que favorezca la empatía hacia los otros, a su reconocimiento. ¡Hay tanta subjetividad enajenada!

11) Sólo el amor puesto en práctica indica que nuestro corazón no es de plástico.

12) Porque no todo es Luz; porque a veces prevalece el odio; porque unos amagan abrazar y otros evaden tal abrazo falaz; porque hay exactas infelicidades; porque hasta la manzana más hermosa pierde su aroma; porque hablantes tártaros entorpecen la comunicación entre nosotros; porque en ninguna medalla cabe el dedo de Dios…

13) Cierta ingenuidad no sólo es buena: es necesaria, pues sostiene heroicamente de los latigazos cotidianos.

14) Nunca olvides que es larga la fila de los desamparados.

15) También los laberintos tienen aduanas y debes declarar las cosas que lleves. No te creas libre para ir donde te plazca, sin reglas que cumplir, sin cuentas que dar.

16) Un hijo es esa chispa de eternidad que por un instante se refleja en tus ojos.

17) Quítate los atavíos presuntuosos: sólo son evidencias de una contraverdad, que además exponen la nitidez de tu desamparo.

18) ¿Qué capitalismo es éste, que socializa las pérdidas y privatiza las ganancias? ¿Así es el ultracapitalismo?

19) No entiendo el por qué se ha desbrujulado el reconocimiento a los mayores que tanto han hecho por mejorarnos.

20)Prueba a predicar a gente que no ha probado bocado. Ahí se acaban las florituras.