Pretendo dejar aquí destellos del viaje, de las impresiones que he tenido al visitar los diferentes lugares de Israel. No un análisis en el sentido estrictamente teológico o bíblico
Del 7 al 12 de este mes de diciembre he tenido la grata oportunidad de visitar Israel, junto con mi esposa Asun (en realidad iba yo con ella, como esposo de pastora, un “cargo” poco habitual y que hasta este momento ningún beneficio me había dado). Un viaje realizado gracias a la invitación de Ferede, que tiene un acuerdo con el Ministerio de Turismo de Israel y la línea aérea El Al.
Fuimos doce matrimonios, con una muy buena experiencia de convivencia. Era mi segundo viaje a Israel, y ciertamente debo decir que, mucho más que el primero, deja una huella que no olvidaré.
Pretendo dejar aquí destellos del viaje, de las impresiones que he tenido al visitar los diferentes lugares. No un análisis en el sentido estrictamente teológico o bíblico (ya hay maestros suficientes para ello), sino lo que me destacó más o impresionó mi corazón.
Para empezar, sólo resaltar que aunque existía cierta incertidumbre en cuanto a la seguridad, salvo la frecuente presencia de soldados israelíes nada alteró el ambiente de calma en todo el recorrido.
Aunque hay muchas noticias (ciertas) de atentados mi impresión es que es similar a lo que ocurría en el País Vasco en España con ETA. Es real la situación, pero se magnifican los hechos.
Y hablando de soldados, era curioso ver tantos jóvenes uniformados (el servicio militar es de 15 a 18 años). Debo decir que con un trato exquisito con nosotros. Y con la curiosidad de ver muchas mujeres perfectamente armadas (los hombres hacen tres años de “mili”, las mujeres dos). Especialmente en el centro de Jerusalén, cada 50 o 100 metros había una pareja armada.
Otro tipo de ejército bien distinto era el de los judíos ultraortodoxos, con sus trajes negros, largas barbas, sombreros y tirabuzones.
Vimos que el resto del pueblo judío no les mira con especial simpatía. Como partido político -a pesar de ser minoría- han logrado gracias a sus votos que les den derechos que ningún ciudadano tiene. Están libres de hacer el servicio militar, reciben un sueldo por hijo (y tienen muchos) y además no pagan impuestos. Fruto de todo ello, se dedican sólo a sus labores religiosas.
En broma uno de nuestros compañeros de viaje decía que seguramente la falta de actividad física es la que hacía que muchos de ellos tuviesen “tripillas cerveceras”. Y es cierto, cuando paseaban con su característico paso rápido y su típica postura con las manos cogidas a la espalda era frecuente ver una clara “curva de la felicidad” prominente.
Como anécdota (no diré quiénes por respeto a la privacidad) uno de los matrimonios visitó la zona del barrio ultraortodoxo. Allí, un rabino se les acercó al verles y les preguntó si eran turistas, a lo que dijeron que sí (no sabemos que hubiese pasado de haber dicho que no). Entonces amablemente les invitaron a irse del barrio “porque ella llevaba pantalones”.
Hasta aquí esta primera entrega, un primer acercamiento. Seguiré en las próximas semanas contándoles más detalles de este viaje. Shalom.
La conmemoración de la Reforma, las tensiones en torno a la interpretación bíblica de la sexualidad o el crecimiento de las iglesias en Asia o África son algunos de los temas de la década que analizamos.
Estudiamos el fenómeno de la luz partiendo de varios detalles del milagro de la vista en Marcos 8:24, en el que Jesús nos ayuda a comprender nuestra necesidad de ver la realidad claramente.
Causas del triunfo de Boris Johnson y del Brexit; y sus consecuencias para la Unión Europea y la agenda globalista. Una entrevista a César Vidal.
Analizamos las noticias más relevantes de la semana.
Algunas imágenes del primer congreso protestante sobre ministerios con la infancia y la familia, celebrado en Madrid.
Algunas fotos de la entrega del Premio Jorge Borrow 2019 y de este encuentro de referencia, celebrado el sábado en la Facultad de Filología y en el Ayuntamiento de Salamanca. Fotos de MGala.
Instantáneas del fin de semana de la Alianza Evangélica Española en Murcia, donde se desarrolló el programa con el lema ‘El poder transformador de lo pequeño’.
José era alguien de una gran lealtad, la cual demostró con su actitud y acciones.
Celebración de Navidad evangélica, desde la Iglesia Evangélica Bautista Buen Pastor, en Madrid.
Madrid acoge el min19, donde ministerios evangélicos de toda España conversan sobre los desafíos de la infancia en el mundo actual.
Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.
Si quieres comentar o