Nate Davis y el poder de Dios

Yo nunca había visto nada parecido. Creo que ya os hablé en otra ocasión de él: NATE DAVIS uno de los mejores jugadores de baloncesto que han pisado tierras europeas. A principios de los ochenta le escayolaron una mano por una rotura, y el siguiente partido era muy importante para su equipo (Valladolid-Miñón en ese momento) Nate se sentó en el banquillo junto a sus compañeros, y en el intermedio le dijo a su entrenador: “Quiero jugar”. El equipo iba perdiendo, y aparentemente no había posibilidad de victoria, así que el entrenador le puso en la segunda parte a pesar de tener la mano escayolada. Marcó 30 puntos y fue el mejor del partido. Los periodistas le preguntaron cómo era posible jugar básquet con una mano escayolada, Nate respondió: "Con la ayuda de Dios todo es posible".

Poder de Dios, la más inmensa fuerza que existe en el Universo. Poder que creó el mundo y a cada uno de nosotros, poder sin igual. Nosotros, sabemos que somos hijos del Dios Todopoderoso, pero... sabemos que Él puede vencer en cualquier situación, pero... sabemos que Él va a hacer muy grande nuestro futuro, pero... vivimos como mendigos de Dios, le pedimos un poco cuando Él quiere damos TODO.

A veces no logramos comprender que por muy difícil que sea una situación, un problema o un deseo, Dios va a hacer todo mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, porque a Dios le gustan los desafíos imposibles. Busca un problema "imposible", y Dios lo solucionará. Encuentra una persona imposible, y Dios la salvará. Piensa en un proyecto imposible, y Dios lo llevará a cabo. Si creemos que un problema es imposible, el problema somos nosotros. ¿Cuántas veces estamos pensando en nuestros planes, tanto materiales como espirituales, y los hacemos tan pequeños que Dios casi no cabe en ellos?

¿Cómo podemos vivir así? “Por el poder que actúa en nosotros". Muchas veces planificamos, pensamos en lo que vamos a hacer, ideamos cómo hablarle a una persona de Dios y al final, le pedimos a Dios que nos dé el poder para llevarlo a cabo, cuando hemos hecho nosotros absolutamente todo. Y sin embargo, es mucho más sencillo comenzar pidiendo a Dios ese poder; empezar pidiendo a Dios que nos enseñe su voluntad... y todo lo demás vendrá sencillamente, a su tiempo, mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos.

"Con la ayuda de Dios, todo es posible", "Dios es poderoso, según el poder que actúa en nosotros" ¿Son frases nada más, o significan algo para ti y para mí? Un poder sobrenatural está a tu alcance... ¡Agárralo!