Sin máscaras

Algunos de los jugadores del equipo ruso no sabían dónde "meterse". Se quedaron con esa sensación de querer "desaparecer" del campo cuando iban poco más de cinco minutos de partido.

Déjame que te ponga en antecedentes: Europeo de Hockey sobre patines, (3-12-1994) partido disputado en Funchal (Madeira)… el resultado final: España 61, Rusia 0. La mayor goleada de la historia. Creo que cualquiera de nosotros hubiera sentido lo mismo.

Una de las claves en la vida es encontrar nuestro lugar. No importa si "ganamos o perdemos"siguiendo el símil deportivo, pero al menos necesitamos saber quiénes somos.

Para algunos, su identidad está ligada a lo que tienen, otros lo que pueden conseguir. Algunas personas se sienten bien si su presencia física es buena. Otros muchos se juzgan a sí mismos por los amigos que tienen o las personas a las que quieren... Déjame decirte que no sabremos quienes somos hasta que encontremos nuestro lugar delante de Dios:

El verdadero viaje en la vida comienza cuando desaparece nuestro falso yo, cuando somos lo suficientemente valientes como para quitarnos cualquier máscara. Aunque la hayamos llevado por mucho tiempo y pensemos que no podemos vivir sin ella.

Muchos se sienten seguros detrás de su falsa identidad, porque están acostumbrados a vivir así. No quieren que nadie les descubra. Han creado su propia personalidad y manejan la vida a su antojo, la "controlan" para que nadie sepa lo que hay realmente detrás de esa máscara. Si vivimos de esa manera, estamos perdiendo lo que somos cada día. Llegará un momento en el que estemos tan apegados a nuestra máscara que sea imposible quitarla, porque ni nosotros mismos sabremos quienes somos en realidad.

Sé que no va a gustarte mi pregunta, pero tengo que hacértela: ¿Llevas alguna máscara puesta?

Algunos llevan puesta una máscara de insensibilidad y frialdad; parece que nada les hace temblar, todo lo tienen controlado. Otros se sumergen en una falsa alegría permanente para derramar sinceras lágrimas cuando nadie les ve. Algunas personas viven con una falsa imagen religiosa, hacen absolutamente todo lo que su doctrina les impone, pero no entienden nada ni son capaces de disfrutar con nada. El pueblo de Israel llevaba puesta una máscara de santidad; decían que amaban a Dios porque formaban parte del "pueblo escogido" pero en realidad estaban muy lejos de Él...

Podríamos mencionar cientos de imágenes diferentes, pero no se trata de eso. Lo que realmente importa es dejar de esconderse. Aprender a ser quien eres.

Acércate a Dios y sé la persona que Él ha creado. No sólo porque eso es lo mejor que puedes hacer ahora mismo, sino también porque lo que ganas es eterno. "Abrirá el Señor para ti su buen tesoro, los cielos, para dar lluvia a tu tierra a su tiempo y para bendecir toda la obra de tu mano; y tú prestarás a muchas naciones, pero no tomarás prestado. Y te pondrá el Señor a la cabeza y no a la cola, sólo estarás encima y nunca estarás debajo, si escuchas los mandamientos del Señor tu Dios que te ordeno hoy, para que los guardes cuidadosamente;" (Deuteronomio 28:12-13)