La expresión inglesa think tank se ha puesto de moda para referirse a los organismos e instituciones que investigan los problemas sociales a fin de llegar a diagnosticar sus causas y así encontrar posibles soluciones a los mismos.
Se les podría definir como laboratorios donde se trabaja para encontrar estrategias que puedan asesorar luego a otras entidades a las que sus hallazgos les resultarán vitales. De este modo, los
think tanks se han convertido en algo imprescindible para cualquier grupo que quiera tener una presencia e influencia social poderosa.
De ahí que los grandes partidos políticos hayan creado sus propios think tanks,a fin de hacer que su ideología tenga un mayor peso y calado en el tejido social. Es decir, en el
think tank se encuentra la "materia gris" que estudia los problemas y proporciona (o vende) sus hallazgos a quienes los necesiten. Naturalmente sus posibles clientes no se encuentran solamente en el terreno de la política, sino en el de las ideas en general, cubriendo un amplio espectro como es el de la cultura, el militar, el de la empresa, el de las creencias en general, el de las tendencias artísticas y estéticas, el de la economía, etc. Obviamente cualquier
think tank está compuesto por un conjunto de personas a las que se considera expertas en las esferas de su especialidad, de ahí el crédito que, por anticipado, lleva aparejado su trabajo.
Es evidente que el profundo cambio ideológico que en el terreno de la moral ha tenido lugar en los últimos años en buena parte de las naciones occidentales ha sido estudiado por poderosos think tanks, que han elaborado definiciones pertinentes que justifiquen tal cambio.
Una de esas profundas alteraciones tiene que ver con la noción de matrimonio, que hasta hace poco se refería únicamente a la unión de un hombre y una mujer. Para sustentar racionalmente la posibilidad de que también se incluya en esa noción la unión de dos hombres o dos mujeres había que erradicar primero la idea de que tal unión es contra natura, perversa o al menos impropia. De esa forma fue como
se fabricó la expresión "orientación sexual", para que incluyera la tendencia homosexual. Nótese que la expresión es neutral moralmente hablando, lo cual es vital para conseguir el efecto deseado, a fin de que desaparezca cualquier connotación negativa que denigre a la homosexualidad. La elección del término "orientación" no es casual, ya que indica una tendencia o disposición inherente al individuo, lo cual tiene que ver con sus derechos humanos básicos.
Al mismo tiempo este término implica una dirección en la que el individuo camina, siendo evidente que se trata de una opción entre otras, tan válida como cualquiera de ellas. Esta idea de opción le viene como anillo al dedo a la de "orientación".
El
think tank que elaboró la expresión "orientación sexual" dio en el blanco, ya que su idea ha sido adoptada por grandes instituciones, desde el consejo de Europa, que la ha hecho suya literalmente, hasta muchos gobiernos y parlamentos occidentales, que han recibido su espíritu cuando no su letra.
El problema de buscar eufemismos y subterfugios para darle la vuelta a la realidad es que ese arma se puede volver fácilmente contra quienes la usan. Porque de la misma manera que se ha fabricado el término "orientación sexual" para aprobar lo que de otra manera sería reprobable, también se pueden llegar a fabricar otras expresiones que faciliten el tránsito de lo reprensible a lo aceptable.
Por ejemplo ¿No podríamos hablar de "orientación ética", en el caso de alguien que no comparta los criterios establecidos sobre lo que es honesto y lo que es deshonesto? Si sexualmente se puede emplear un término que sea inclusivo, es razonable pensar que también en el terreno de la ética se pueda usar otro que sirva para abarcar distintas nociones morales.
De este modo los que están engañando al erario público, eludiendo sus responsabilidades fiscales y robando descaradamente a los demás, podrían razonar que lo que hacen se debe a su "orientación ética", que puede ser tan explicable y honorable como cualquier otra. ¿Suena esto a locura? Bueno, solamente hace falta que se den las condiciones adecuadas y haya un
think tank por medio para que un día asistamos a la entronización de la "orientación ética" en nuestro sistema jurídico y social, pues el peligro de fabricar una primera insensata definición es que se abre la puerta para que se fabriquen otras no menos insensatas.
De este modo un islamista que usa el terrorismo como arma para implantar su creencia puede esgrimir que su actividad es "orientación doctrinal", no terrorismo.
El profeta dijo: "¡Ay de los que a lo malo dicen bueno y a lo bueno malo; que hacen de la luz tinieblas y de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por dulce y lo dulce por amargo!"[i] Porque cuando él escribió esas palabras ya existían los think tanks, tal vez no tan sofisticados como los actuales aunque sus efectos eran tan letales como los de ahora, pues su misión consistía en la subversión de las ideas.
De ahí que lanzara este ay contra ellos: "¡Ay de los sabios en sus propios ojos y de los que son prudentes delante de sí mismos!"
[ii]. El mismo ay que pende sobre las cabezas de quienes, hoy, inventan estratagemas engañosas para torcer las cosas.
Si quieres comentar o